Lo que paso después. Ranma Y Akane.

Capítulo 5

Baje las escaleras. Por su parte Rioga estaba en la puerta esperando.

- Vamonos Akane.
- Si.

Al llegar al parque, Rioga puso bajo la sombra de un árbol un tapete la canasta y nos sentamos.

- Traje tus sándwiches favoritos. - comento.
- Gracias Rioga eres un buen amigo. Espera ¿Cómo sabes cuales son mis sándwiches favoritos?.
- Kasumi me lo dijo. - respondió un poco nervioso pero no le di importancia.

En el picnic me la pase muy feliz. Ahora se más cosas sobre Rioga y el de mi. Sé que le gustan las películas clásicas, leer, oír música de piano, no tiene comida favorita en general, le gustan los helados de vainilla, y le gustaría tener un perro cuando en table una familia y casa. No sabia nada de eso y me pareció interesante saber cosas sobre el.

- Akane ¿Te parece bien?
-ha..., Si. -mis amigas se rieron muy fuerte y luego me dijeron.
- Akane no dijimos nada, estas en las nubes ¿Ho acaso estas enamorada?
- ¿Qué? Claro que no.
- Por favor estas suspirando bastante ¿En quién piensas? - inmediatamente en mi cabeza se formó la imagen de Rioga y Ranma.
- En nadie. Por favor chicas no puedo estar enamorada, no me gusta nadie.
- ¡Akane! - grito Rioga enseguida mis mejillas ardieron, ¿Qué me sucedía? Rioga solo era un amigo sin embargo me había sonrojado inmediatamente al escuchar su voz.
- Rioga ¿Qué haces aquí?. -Mis amigas empezaron a reírse.
- ¿No qué nadie te gustaba? - Rioga y yo nos pusimos rojos como los tomates.
- Bueno... Este yo vine a darte esto. - de su bolsillo saco un regalo, pero por como estaba envolvido, supe que era un pañuelo.
-Rioga... Gracias no debiste.
- Es solo un obsequio por lo de estos días. Me la he pasado muy bien contigo Akane.
- Yo también Rioga. - lo mire a los ojos y le sonreí. Luego el tomo mi barbilla y me dio un beso en la frente. - Ten un bonito día Akane.

Yo me quedé como tonta viendo la espalda de Rioga.

-¡¡Akane tiene novio y se llama Rioga!! - gritaron mis amigas y todos los que nos rodeaban nos miraron, impresionados. Yo volteé enseguida para aclarar la situación y hay estaba Ranma, dando lugar día vuelta para irse.
- Ranma... Espera Ranma. - Fui corriendo tras el. Y lo sujete del bazo a la mitad del patio. Agradecí que ya no hubiera gente. - Ranma... No es lo que parece Rioga y yo somos buenos amigos, no pasa nada entre nosotros.- Ranma se volteó y me miró a los ojos. Sus ojos en ese momento se veían tristes.
- Akane... No tienes que darme explicaciones al final es tu vida.  - El se encogió de hombros.
- Pero, es que tu siempre me has dado explicaciones y aclarado la situación, déjame hacerlo a mi.

Ranma se volteó y me enseñó la lengua divertido.

- Te la creíste. Yo no estaría celoso, y menos de ti. - apreté con furia mis dientes y lo mire a los ojos con la mirada más asesina que pude. Sujete una roca del suelo, y rápidamente se la lance.
- ¡Eres un idiota!- grite furiosa y me fui.

¿Cómo se atrevía? Me hacía sentir importante y luego nada. Que idiota es.

Las siguientes dos horas de clase ignore a Ranma, ni siquiera quería verlo a la cara. Y el sabia el porque de mi enojo, al llegar a casa cenamos en completo silencio luego subí a mi habitación a hacer mi tarea, asta que me acorde del regalo de Rioga era un pañuelo blanco, bordado de las orillas y con mi nombre grabado en el. Luego escuche que llamaban en la puerta me levanté y era el.

- Rioga...
El me sonrió.
- Hola... Bueno yo estaba pensando en ir el fin de semana a algún parque ¿Te gustaría?
- Claro.
- Genial...
Miró mis labios y luego regreso su mirada a mis ojos. Pero cuando hizo eso sentí mis mejillas arder, sabía que seguro me veía super roja. Entonces Rioga se dio cuenta de lo que había hecho y sé puso igual que yo.
- Lo lamento no debí hacer eso. - se disculpo dando una reverencia.
- No te preocupes. - Me acerqué a el y lo abrace gracias por el regalo me encantó.

Espero que les allá gustado. Me disculpo el no haber actualizado (la escuela), pero seguramente actualizaré los fines de semana besos.