Capítulo dedicado a estas hermosas personitas ✨♥
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NamJoon sentía como todo se había ido a la mierda en grande, removió su cabello castaño hacia atrás revolviendolo a su vez, le había pedido a SeokJin que cerrase todo con llave y no saliera de la habitación por nada del mundo, la policía estaba ya haciendo patrulla en su casa en caso de que YoonJi apareciera.
Las enfermeras le miraban con pena y algunas se habían acercado a él con el fin de curar sus posibles heridas pero no tenía ninguna. Toda la sangre que bañaba su cuerpo era de JiMin.
Cuando llegó a la casa de la pálida y la antes mencionada no pudo encontrar a YoonJi por ningún lado, y no fue como si la haya buscado demasiado al ver el cuerpo inerte y sangrante de JiMin en el suelo de la habitación. La sangre brotaba por todas partes creando un inmenso chaco debajo de ella.
NamJoon creyó que la pequeña había muerto pero no fue así, asombrosamente JiMin seguía con vida. Apenas respirando pero con vida.
No quiso moverla con el miedo de lastimar aún más su cuerpo, pero tampoco podía verla morir de manera lenta, para su suerte Jin había llamado antes a la policía quienes no tardaron en llegar. Con mucho cuidado habían envuelto y llevado el cuerpo de JiMin a la ambulancia, apenas pudo responder unas preguntas para poder ir al hospital.
Le había informado todo a SeokJin, esta por más que quisiera ir a donde ellos no podía, no sólo por el embarazo sino por que era peligroso para una mujer ir de madrugada sola por plena calle aún cuando tomara un taxi.
NamJoon bufo una vez más sintiendo el vértigo en su estómago. Todo estaba mal.
¿Qué había pasado para que YoonJi apuñalara 18 veces a JiMin? Por que unas horas después de haber llegado el doctor le confirmo el estado crítico de la menor quien había recibido las apuñaladas en cada parte de su cuerpo, era grotezca la manera en que lo hizo YoonJi. Había golpeado su cabeza con algún tubo de hierro o algo parecido pues JiMin tenía una contusión y un derrame.
«-No garantizó nada pero si esa señorita sobrevive a tal ataqué, no creo que vaya a despertar muy pronto... Al menos no con la inflamación de su cerebro. -Le dijo el viejo hombre algo apenado con lo que le sucedió a JiMin. -Fuera quien fuera la persona que le hizo algo así, debía odiarla demasiado. »
¿Odiarla? Hasta donde NamJoon sabía YoonJi estaba perdidamente enamorada de JiMin... ¿Qué había ido mal entonces?
Pasó sus manos por su cara tratando de alejar el cansancio que esa situación le estaba provocando. No podía entenderlo aún.
-¡NamJoon Oppa! -Volteó casi de inmediato al reconocer las voces de HoSeok y TaeHyung quienes venían corriendo hacia él. -¿Cómo esta JiMin? ¿Podemos verla? ¿Qué sucedió? ¿Dónde esta YoonJi? -TaeHyung le bombardeó inmediatamente con preguntas rápidas, desesperada por saber que había pasado, pues lo único que pudo decirle fue que JiMin había sido atacada. -¡Respóndeme NamJoon!
-¡Fue YoonJi! -Explotó. Tomó su cabello con frustración antes de volver a mirar a las dos menores que le miraban expectantes. -No sé que sucedió, creo que tuvo un ataque de celos o no se pero cuando llegue JiMin estaba desangrándose en el suelo y YoonJi no estaba por ningún lado... Esta en estado crítico ahora. -Susurró lo último sabiendo que ambas chicas estaban colapsando.
La primera en derrumbarse fue TaeHyung seguida de HoSeok quien la abrazó con fuerza para evitar que sus gritos de dolor fueran más grandes. Trataba de contener las lágrimas pero falló en el intento temblando entre lágrimas junto a la menor quien negaba ante lo dicho por el moreno. -JiMin...-Jadeo la peligris desconsolada en el pecho de su -ahora- novia quien acariciaba su corto cabello de manera amorosa buscando calmarla.
-¿Cómo? -HoSeok preguntó con voz ahogada en su garganta. Sus almendrados ojos rasgados mostraban toda la frustración, ira, tristeza y decepción que estaba sintiendo en esos momentos.
-Al parecer la apuñaló 18 veces, la mayoría fue en el espalda, uno de sus pulmones colapsó de camino acá, además de un derrame... -Sus palabras fueron golpes duros en ambas mujeres quienes sollozaron. -El doctor dijo que era un milagro que JiMin siguiera viva, que se estaba aferrando a la vida.
-¿Cómo es posible que YoonJi haciera algo así? -Susurró TaeHyung su mirada no dejo el suelo en ningún momento.
Una enfermera paso por su lado y NamJoon sintió todo su cuerpo temblar con el aura que está desprendía, todo su cuerpo estaba cubierto, no se podía ver ni una sola porción de piel nada pero cuando sus ojos se conectaron. YoonJi.
La pálida bajo su cubrebocas mostrándole una sinica sonrisa antes de dejar el carrito que llevaba y se hechara a correr lejos de ellos hasta que desapareció fue cuando por fin NamJoon pudo reaccionar. Vio de donde venía y temió lo peor en ese momento.
Con el corazón golpeando a todo en su pecho corrió hacia la enfermera que venía. -¿¡En dónde está terapia intensiva!? -Gritó alterando a la mujer y logrando que algunos guardias se acercaron creyendo que él haría algo estúpido. -¡Acabo de ver salir a la atacante de mi amiga, maldición! -Rugió y miró a los dos guardias que se le habían acercado.
-Puede describirlos a la persona en cuestión. -Pidió uno de ellos, la mujer se había ido corriendo por la misma dirección en la que vino llamando a alguien por un intercomunicador que los de terapia intensiva tenían.
-Es una mujer pálida, uno setenta, pelo corto de color azul. Iba vestida de enfermera -NamJoon apenas pudo contestar cuando todo en el tembló al ver a algunos doctores correr hacía la misma dirección en donde la enfermera había ido.
Los dos guardias se alejaron de el dando la información que él les dio a los demás mediante los radios.
TaeHyung y HoSeok le miraban expectantes entre lágrimas, mordió sus labios con desesperación. ¿Cómo había pasado eso?
¡Diablos! Había sido un imbécil al creer que la pálida simplemente desaparecería así nada más. Sólo rogaba por que nada malo hubiese sucedido, ¿Cuánto tiempo había estado ahí? Cómo fue que nadie la vio entrar o siquiera dijo algo cuando entro a la habitación de JiMin.
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« 閔嫉妒 » • YM; Fem
Hayran KurguYoonJi no podía evitar volverse loca cada que alguien trataba de hablar con su hermosa novia. Pero del amor a la obsesión hay una línea muy delgada. [ Contenido delicado. Respete la obra si no es de su agradó. ]