Capítulo 5 Parte 1

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Al regresar de su primer viaje, Katsuki ya había preparado la habitación vacía para su nueva inquilina. Una enorme cama ocupaba un gran espacio en la habitación, en la que también había ya un clóset de madera fina para guardar su ropa nueva, Ochako seguía sin creer nada.

Con cada día que pasaba, su relación era más cercana, incluso ella comenzó a retarlo a veces, lo que la divertía mucho.

Ochako pasaba la mayor parte del tiempo en casa, leyendo y esperando a que Katsuki regresara de sus viajes, viajes a los que no podía llevarla, o tal vez simplemente no quería. Prefería no preguntar, no podía ponerse caprichosa, después de todo, el solo aceptarla en su hogar y tener todas esas comodidades, era más que suficiente.

A las pocas semanas, el rubio había despejado una de las dudas de ella, entregándole una llave para la caja fuerte y diciéndole que ahí había dinero guardado y que podía tomar lo que necesitara.

—¿Por qué me das algo así? ¿Y si me voy con todo?— preguntó alguna vez. Katsuki ni levantó la mirada del periódico que leía esa mañana, sólo siguió tomando su café.

—Tengo más.— Ochako sintió muchas ganas de aventarle la cuchara con la que removía su té, pero se contuvo e hizo un puchero, y entre dientes murmuró —"Maldito niño rico."— Katsuki sonrió detrás del periódico.

Cada día transcurría más rápido que el anterior, de pronto ya eran semanas, y luego meses. Entonces, el cumpleaños número 19 de Uraraka estaba a nada de suceder.

Para ese momento, ella había logrado una relación muy cercana con las amistades de Bakugou, principalmente Kirishima y Ashido, quienes la adoraban y cada que podían la invitaban a comer a su casa. Y aun con todo el tiempo transcurrido, prefería seguir guardando distancia con los Todoroki. A veces se odiaba por eso, pues ellos eran muy amables y atentos con ella, pero simplemente no podía evitar sentir precaución.

Cuando su cumpleaños llegó, sus ahora amigos le organizaron una pequeña fiesta a puerta cerrada en el bar.

Mina se había esforzado en hacer un pastel de fresa para la ocasión. Los esposos Todoroki parecían especialmente felices por la celebración.

Todos se reunieron alrededor de la mesa en el centro donde Ochako estaba frente al más hermoso pastel de cumpleaños, mientras que Bakugou estaba en una esquina con una mala cara.

Kaminari encendió las velas para Ochako, quien no podía ocultar lo emocionada que estaba.

—Recuerde pedir un deseo al soplar.— le dijo maternalmente Momo, a quien la castaña respondió con una tímida sonrisa.

Ochako sopló las velas sin saber qué pedir y todos le aplaudieron.

—¡Hora de los regalos! ¡Quien no haya traído regalo mejor que se largue!— dijo animosamente Mina mirando divertida hacia la dirección del rubio, quien sólo se enfurruño en su asiento.

—¿Re-regalos?— Pregunto, nerviosa Ochako.

—¡Claro! No es un cumpleaños sin regalos— Respondió la pelirrosa con una sonrisa. Sus tacones hicieron eco en el lugar cuando corrió detrás de la barra, sacando una caja algo grande en color rosa claro. —Este es nuestro obsequio— Dijo, poniendo la caja sobre la mesa. Ochako la miró emocionada, hacía tanto que no recibía un regalo de cumpleaños.

—Éste es de Jirou y mío— Hablo Denki, dejando una pequeña caja en color morado. Ochako miró en dirección a la pelimorada que desviaba la mirada mientras jugaba con su cabello.

—No sé si son tu estilo, pero espero te gusten— Ochako asintió emocionada.

El bicolor dejó una caja de tamaño mediano en color azul. Ochako hizo una pequeña reverencia, que Shouto regreso con una leve sonrisa. Era la primera vez que lo veía sonreír. Miró a su esposa y de igual manera le sonrió.

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