Un Accidente El Conocernos

Segundo Formalmente

Pasaron los meses y la relación de Calle y Poché no podía ser mejor. Aunque aveces Poché se iba de gira con algún artista y se extrañaban mucho se desquitaban cuando volvía a Bogotá. Por su parte a Calle le iba muy bien en la universidad y la empresa también iba excelente, tanto así que iban a abrir una sucursal en New York.

Celebraban un mes más de su relación y era con una cena en el apartamento de Calle, quien estaba terminando de cocinar mientras que Poché la miraba desde el mesón, tomando una copa de vino

- Te ves hermosa cocinando

- Esperemos que hoy si salga todo bien

- No me lo recuerdes

Se sonrieron y un par de minutos después estaban en la mesa una enfrente de la otra cenando, con vino y la luz de las velas. Brindaron y conversaron hasta terminar

- Te quedó delicioso amor

- Gracias amor. Ahora el postre

- Pero no me cabe nada más en el estómago

- Créeme que valdrá la pena... cierra los ojos

Poché obedeció y esperó la señal para poder abrirlos nuevamente, al hacerlo vio a Calle arrodillada al frente suyo y sosteniendo una pequeña caja en sus manos

- Ya casi cumplimos un año de conocernos y aunque no ha sido una historia perfecta, si ha sido nuestra historia - abrió la caja y Poché pudo ver un hermoso anillo en su interior - María José Garzón, ¿Me daría el placer de convertirse en mi esposa?

Poché tenía las manos cubriendole la boca y sus ojos estaban cristalinos

- Acepto, claro que acepto

Calle sacó el anillo de la cajita y le tomó la mano con delicadeza, la acarició lentamente y se lo colocó, por la cercanía Poché notó que Calle llevaba también el anillo que ella le había obsequiado en Cartagena, derramó algunas lágrimas, después se quedó mirando su anillo, era hermoso

- Te queda perfecto

- Es precioso amor

- Tu mereces lo mejor futura María José de Calle

Poché se estremeció un poco al escuchar aquel apellido, a veces le costaba asimilar la situación, trató de disimular ese sentimiento pero fue en vano

- Amor ¿Qué pasó?

- Nada, estoy muy feliz

- A mi no me engañas, te dije... ohh ya sé

- No lo mal interpretes amor

- Es difícil y lo sé, aún yo también no asimilo lo que pasa

- Yo te amo, no lo dudes

- No lo dudo, sólo que no entiendo que fue lo tan bueno que hice para merecerte, para que me perdonaras y te quedarás conmigo, aún existiendo personas mejores para ti

- Calla Daniela - colocó un dedo en su boca - la persona perfecta para mi eres tú, con respecto a que fue lo bueno que hiciste para merecerme, no tengo ni idea - unió sus frentes - y perdonarte pues es que te amo... y prefiero mi felicidad a tu lado que odiarte, eso jamás podría

Sin pensarlo dos veces se acercó a Calle y la besó, un beso cargado de sentimiento y emociones, la embriago su sabor y quería más, quería jamás alejarse de ella. Se separaron y Calle se levantó del suelo, fue hacía la sala para agarrar su celular, cuando de repente cayó al sofá.

Encima se colocó Poché y empezaron a besarse, pasó sus manos por el cuello mientras que Calle la tomó por la cintura, sus lenguas comenzaron a bailar como ya sabían hacerlo, mientras sus cuerpos se llenaban de deseo, se separaron para tomar aire

- Quiero estar contigo Poché - le susurró al oído ocasionandole un corrientazo de placer por todo su cuerpo

Bajó las manos al trasero de Poché y lo apretó haciendo que gimiera, empezó a subirle el vestido la una a la otra y tuvieron que separarse para poder quitárselos completamente. El deseo en sus ojos era claro, Poché se dedicó al cuello de Calle, dándole besos, chupones y lamidas, bajó la mano hacía el centro de Daniela y la metió debajo de la ropa interior, la hizo gemir lo cual le ocasionó una sonrisa.

Sacó su mano para darle la tarea de desabrocharle el brassier, el cual posteriormente arrojó, acarició y apretó los senos de Calle haciendo que de nuevo gimiera, bajó las manos por sus piernas y la acariciaba mientras succionaba sus pechos, con la lengua delineo los pezones

- Amor - la voz de Calle estaba ronca por la excitación - no me tortures

Poché besó su abdomen bajando mientras dejaba besos húmedos en el camino y con sus manos aún estimulaba los senos de Calle. Le quitó el panty y pasó la lengua por su zona húmeda

- Ahg... por... fa-vor - Poché le sonrió y metió un dedo en su interior para estimulada haciéndole pequeños círculos mientras la besaba - Amor - dijo aferrandose al sofá

Poché sacó el dedo para después introducir dos, lo cual tomó por sorpresa a Calle y tuvo que sujetarse de su novia para no caer al suelo, Poché metía y sacaba sus dedos al comienzo con suavidad pero luego intensificó el movimiento

- ¿Quieres más? - le susurró al oído

- Sssi puedes

Aquello sonaba a reto para Poché quién introdujo otro dedo, ocasionando un grito por parte de Calle, empezó a moverlos rápidamente y miraba el rostro de placer que tenía Daniela

- Me voy a venir - casi no podía hablar de lo agitada que estaba, Poché intensificó el movimiento y Calle apretó sus piernas

- Te amo

Aquellas palabras fueron el detonante para que llegara al orgasmo. Poché se acomodó a su lado, se entrelazaron las manos y sus anillos brillaban con la luz de la luna que entraba por la ventana. Estuvieron así hasta que sus respiraciones se regularon

- Siempre haces tan buen sexo - miró a Poché - haces maravillas - llevó la mano de Poché a su boca y le mordió suavemente un dedo

- Daniela de Garzón quiero tenerte toda la vida

- Ya me tienes

- Eres tan sexy, dulce, tierna

- Creo que me estás viendo con los mismos ojos que yo te veo a ti

Se abrazaron y en medio de caricias se quedaron dormidas. Al día siguiente despertaron por el sonido del celular, Calle lo agarró y miró la pantalla

- Mierda

- ¿Qué pasó amor?

- Hoy es lo de Adrián

- Cierto

- ¿Qué tal quedó todo?

- Fantástico, al menos en lo que yo ayudé

- Jajaja me encanta tu modestia

La tomó del mentón y le levantó la cara para darle un beso, Poché la abrazo con más fuerza acercándose más, se separaron

- Me hace tan feliz estar contigo Poché

- Quisiera quedarme así el resto de mis días

- ¿Y por qué no al menos hoy?

- Porque tenemos que ir a casa de Adrián

- No va a notar nuestra ausencia

- Nada de eso señorita, debemos ir

Calle trató de convencerla pero Poché se mantenía en su posición, al final se levantaron y se arreglaron para salir.

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Mentes corrompidas hay tienen más smut jajaja más leve que el anterior