One Shots Lemon |Owari No Seraph|

Mikaela: No me gustan los rubios

____(Tn) pov.
-¡Buenos días estudiantes! *dijo el profesor nuevo mientras entraba por la puerta y se sentaba en el escritorio*

-¡Buenos días profesor! *respondieron los demás*. Yo miré a las compañeras con cara de asombro por la forma en la que todas respondieron y por el tono en que lo hicieron. Todas babeaban con el profesor nuevo mientras algunas susurraban: "Esta buenísimo" "Que papi". Mientras que yo solo me decía a mi misma: "Ojalá y no sea odioso".

-Bueno estudiantes, mi nombre es Mikaela Hyakuya....

-Jajaj "¿Mikaela"? *lo interrumpi riendo en forma burlona*

-Haces un chiste de mi nombre y sales del curso y a mi clase no entras *dijo enojado*

Todos en la clase me miraron y dijeron "Oohhh" yo enojada y de la vergüenza me callé y le lancé una mirada acecina al profesor.

-Como seguía diciendo, me llamo Mikaela y a partir de hoy seré vuestro profesor de matemáticas, a mi me gusta dar clases en cursos limpios, no me gusta el desorden, yo no dudo en mandar a una persona a completivo, aquellas jovencitas que están sentadas cogiendo aire por favor siéntense bien *de inmediato todas se sentaron corectamente* y espero que nos llevemos bien.

La campana sonó indicando la hora del almuerzo, Melan, Alicia y yo nos sentamos en un banco a almorzar mientras estas no dejaban de hablar de lo "bueno" que está el profesor.

Melan: -Esos ojos azules, ese pelo rubio..

Alice: -Esos labios *continuo diciendo mientras se mordía el labio inferior*

-¡Oh, por favor! *dije rodando los ojos* Ese profesor es muy odioso, y llegó al curso poniendo demasiadas normas, no se ilusionen que no se fijara en ninguna de nosotras.

Melan: -¿Que no habías dicho que no te gustaban los rubios?

-Pero eso no quiere dejar dicho que yo no le vaya a gustar.

Alice: -Dudo mucho que eso pase *risas* después de lo que hiciste.

Melan: -Todos los profesores ponen normas, y de que esta bueno ¡esta bueno! *Continuaban diciendo las chicas* Yo miré al profesor el cual estaba charlando con los demás profesores y si, tienen razón, el profesor Hyakuya no se veía tan mal, el profesor me miró y yo nerviosa volteé la mirada hacia otra parte.

Tocaron el timbre y nos tocaba otra hora con dicho profesor. A mi las matemáticas no se me dan nada bien y duré tres meses sacando bajas notas, por lo que el profesor me dijo que quería hablar conmigo a solas cuando despachen, pues ya me imaginaba para qué era.

            ........Horas mas tarde......

<Tocan la puerta>

-¿Profesor? *lo llamé mientras entraba lentamente al no recibir respuesta*

-¡Pasa y siéntate! *me indicó él* Me senté frente al escritorio en donde él estaba sentado  con su computadora.

-Señorita ____(T/A), ¿Que le esta pasando? Últimamente ha estado sacando las notas muy bajas. ¿Qué ocurre? ¿Acaso no estoy dando bien la clase? ¿O no comprende como la doy?.

Yo simplemente me quedaba cabizbaja conteniendo mis lágrimas. En realidad es él el que me distrae; últimamente me pongo a soñar despierta en clases y me descontento, hasta he llegado a fantasear con él cosa de la cual me avergüenzo mucho.

-¡Piensa ____(Tn)! ¡Piensa en una excusa!.

-¡Señorita! ¡Dígame! Muchas veces los estudiantes no entienden al profesor y entienden a la explicación de un compañero. Y he visto en la dirección que usted fue estudiante meritorio.

-Es que yo... estoy teniendo problemas en casa. *mentí*

-Le he preguntado a tus amigas... *dijo levantándose de la silla para sentarse a mi lado* ...-y no ha tenido problemas en casa, hasta vive con Melan porque su madre esta de viaje... *decía colocando mi cabello detrás de la oreja mientras yo me sonrojaba*... - en realidad el problema soy yo, ¿verdad?.

El profesor se lamió los labios y yo intentaba no mirarlo, pero él me volteó la cara para que lo viera, era mucho mas hermoso de cerca. Esos ojazos azules, esa cabellera rubia que me daban ganas de acariciársela, y esos labios gruesos como me gustan me daban ganas de besarlo.

-Estoy en lo cierto, ¿verdad señorita?. El profesor me sujetó de la barbilla y yo intentaba no mirarle los labios pero fue en vano, así que sin pensarlo lo besé.

-L-Lo siento m-mucho señor Hyakuya *decía avergonzada* Pero el profesor sin decir nada, me devolvió el beso mientras que yo acariciaba su cabello. Sus labios eran tan suave como la seda, no quería que se rompiera el beso.

-Alguien nos puede ver. *dijo rompiendo el beso mientras miraba hacia las ventanas*

-Tiene razón, aquí no es seguro, por qué mejor no voy a su casa, me vendría bien unas clases particulares *le insinué con una sonrisa pícara por lo que él me la devolvió*

-Vaya! Eres una chica mala, eso me gusta.

El profesor me dió su dirección y yo salí del curso asegurándome de que nadie me viera. Yo iba por todo el camino acariciándome los labios e imaginado me cómo se vería desnudo.