Capitulo 15

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Daniel entro cómo pancho por su casa mirando cada detalle de la hacienda cómo si fuera el dueño

- Daniel

- Mi amor

Florencia sacó un arma que tenía atrás de la puerta para emergencias y le apuntó sin pensarlo

- Te vas o te mato

- Tenemos que hablar

- Yo y vos no tenemos nada que hablar

- Vos sabés que si, yo te amo y te extraño

La morocha cargo el arma y se acercó un poco más a él y lo miro fijamente

- ¡Andate!

- No quiero irme. Podemos ser muy felices

- ¡Andate!

Daniel se sentó en el sillón y cruzó sus piernas mientras Florencia seguía parada sin sacar el arma de sus manos

- Flor

Jazmín entro y freno viendo la escena que estaba viendo

- No lo va hacer siempre fue una inútil

Florencia al escuchar eso, disparo entre el sillón y Daniel y volvió a cargar el arma y lo miro fijamente, Daniel había saltado del sillón, la morocha disparo de nuevo haciendo que Daniel se levante lo más rápido posible

- Florencia

- ¡Andate porque de acá no salís vivo!

- Tenemos que hablar

- ¡Andate!

Daniel la miró por última vez y salió corriendo de la estancia a su auto, pero nunca llegó cuando fue agarrado por Javo

- ¿Qué haces acá?

- Ya me iba

- Te pregunte algo

- Vine a ver a mi mujer

Respondió con una sonrisa y no supo en que momento termino en el piso con la nariz rota,

- Ya no es tu mujer

- Siempre lo va a seguir siendo, mientras que yo viva siempre va a ser mi mujer

- Entonces date por muerto

Florencia disparo y volvió a cargar el arma apuntando entre ceja y ceja a Daniel que la miró sorprendido

- Decilo de nuevo y vas a ver cómo terminas

Daniel no lo pensó dos veces y corrí hacia el auto y yéndose a toda marcha, la morocha suspiro molesta y entro a la estancia corrió hasta su despacho y cerró la puerta con furia

- Porque tenías que volver

Susurró dejándose caer al piso y llorando desconsoladamente, escucho la puerta pero no le importó no quería ver a nadie sólo quería estar sola, eso hizo que su mente le juegue una mala pasada mirando el arma que tenía en sus manos, ¡No Flor no vale la pena!...

- No mi amor

Jazmín llegó antes y le quitó el arma de la mano y la miró a los ojos, Florencia se abalanzó a sus brazos y lloro sobre el pecho de la colorada que la abrazo fuerte

- No lo vuelvas a pensar

Jazmín hablo con su voz rota y lágrimas que no tardaron en salir

- Me... Duele mucho

- Shhh, yo estoy con vos

- Era mi hijo Jaz, mi hijo sabes lo que es que vayas al hospital y te digan que tu hijo está muerto

La colorada lloraba a la par de ella el dolor de Florencia era suyo también, le dolía ver a la mujer que amaba sufrir de esa manera la hacía mal

- Yo había preparado todo, tenía su cunita, su ropita de todos los colores, le había comprado unos zapatitos re chiquitos, se iba a llamar Mario cómo mi papá y si era nena se iba a llamar Luna, era mi nombre favorito

Florencia hablaba abrazada a jazmín no quería despegarse era su refugio, se sentía protegida en los brazos de esa mujer que tanto quería,

Protegida y querida era lo que la morocha sentía cuándo jazmín la abrazaba fuerte y escuchaba los latidos de su corazón, era su música preferida escuchar esos latidos que la hacían calmar cualquier malestar

- Era mi sueño, mi sueño de tener un hijo

Jazmín busco la mirada de la morocha y le sonrió chiquito secando pasando su pulgar por las mejillas de la morocha

- Yo voy a cumplir todos tus sueños

- Menos uno Jaz

La miró sin entender y en silencio le hizo una pregunta y la morocha bajo su mirada

- Yo nunca más podré tener hijos Jaz

- Vos me estás diciendo

- Si Jaz

- Flor

- Abrázame fuerte y nunca me sueltes

- Nunca mi amor nunca

Florencia se abrazo fuerte al cuerpo de jazmín que la envolvió en sus brazos

- Va está todo bien

- Si estás conmigo siempre va estar todo bien

- Toda la vida, toda la vida

- Te amo

Jazmín dejo de acariciarle el pelo y se movió en su lugar buscando los ojos cafés de la morocha que de inmediato se arrepintió en decir esas palabras

- Perdón Jaz yo....

- ¿Me amas?

Jazmín la interrumpió, Florencia bajo su mirada

- Con toda mi alma te amo

Al escuchar eso la beso, un beso que será seguido de otro más explorador y provocativo, ese que apropie de tus labios, se apropió de los labios de Florencia cómo si fueran de ella, los saboreó , los acariciaba, hasta pequeños mordiscos, haciendo que la boca de la morocha se extremezca en los labios gruesos y suaves, con su lengua recorrió de lado a lado cómo quien prueba un helado.. en un instante se separó un poco para mirarla a los ojos y sonreírle pícaramente para así seguir con ese beso, sus lenguas jugaban entre sí, se acariciaban mutuamente mientras las manos de Florencia se perdían sobre la nuca y el pelo de jazmín, dónde tenía sus manos en la espalda y bajando hasta la cintura extremeciendo con cada roce

- Yo también te amo mucho

Le susurró sobre los labios y siguieron con el beso que se volvía más apasionado, no existía nada más ellas dos y mundo dónde se subieron a una nubosidad que lo único que sentían era el calor de sus cuerpos

Vino el amor "Flozmin"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora