*Al día siguiente*
Me desperté a eso de las 7 a.m, ya que el horario de mi gimnasio comienza a las 8 de la mañana. Me despedí de la madre de Jessie, la cual me tiene mucho cariño. Jessie seguía dormida, es normal que duerma hasta tarde, siempre llega tarde a clases, en cambio yo prefiero aprovechar mi día haciendo algo de ejercicio.
-Hasta luego Sra Liza, hoy arránco temprano.- Dije en medio de un bostezo y una sonrisa.
-Oh ¿Tan temprano? Saludos a tu madre querida, tomate este té antes de salir que hace mucho frío.- Dijo.
-Seguro Sra, muchas gracias.
Mientras me tomaba el delicioso té, tomé mi teléfono y le escribí un mensaje a Vale. Desde el día anterior que no sabía nada de ella.
Para Valeria: Hey! Buenos días hermosa, espero que estés súper bien. Ahorita voy saliendo al Gimnasio, me avisas si nos podremos ver hoy.
Terminé mi té y tome mi camino hacia el gimnasio. Era un día con tiempo de lluvia, por un lado unas cuantas nubes y por otro totalmente despejado, caminaba pensando muchas cosas y una de ellas era mi familia. Mi familia es adorable, graciosa, una familia que todos quisieran tener, bueno eso dicen, como tienen cosas buenas también tienen cosas malas. Ellos no saben acerca de mi preferencia sexual, he pensado decirles ya que estoy harta de ser alguien que no soy pero no estoy segura de que pueda pasar.
Recuerdo una vez que estaba observando la televisión con mi madre, en ese momento pasaron un video musical el cual trataba acerca de las parejas homosexuales. Presté atención a como reaccionaría mi mamá acerca de este video pero sin ver mucho sus palabras fueron:
-"Que asco, menos mal que tu no saliste de esa forma hija, me hubiera muerto. No se cómo esas personas pueden ser así, ¿A caso no les repugna? Mejor quitó esta mierda de una vez".
No me sorprendí a escuchar esto, ya estoy acostumbrada a esta clase de comentarios. Pero si me dolía que fuera de mi propia madre, la cual seguro se avergonzaría de tener una hija lesbiana. Yo solo ahorre mis comentarios profundos y dije:
-¿A ti te repugna estar con la persona que amas? ¿No verdad? Entonces no entiendo cual es tu problema mamá.
Seguía caminando mientras esta guerra en mi mente no acababa, así que preferí agarrar mi IPod y escuchar un poco de música. Recibí un mensaje pero no le presté atención y seguía enfocada en mi música.
*Llegando al gimnasio*
Subí la mirada y pude notar que había una chica en las escaleras para subir al gimnasio, me pareció raro ya que ya era un poco tarde y seguro todos estaban entrenando ya.
-¡Un momento! -Pensé.- ¿Ella es Valeria? No creo, no me respondió el mensaje. ¡EL MENSAJE!
Rápidamente agarré mi teléfono y efectivamente el mensaje era de Valeria.
De Valeria: Mi vida❤️ Si bebe, es más, ahorita mismo arranco a tu gimnasio ¿Qué te parece?
De Valeria: Bebe ¿Estas ahí? Seguro ya estás en vía, nos vemos allá, ten cuidado.
-¡Que hermosa es esta chica! Me alegro la mañana❤️.- Dije en mi mente mientras apresure mi paso.
-Bebe!.- Noté que no estaba sola. Había un chico muy guapo a su lado con su teléfono en la mano. -Seguro le esta preguntando la hora.- Pensé y empece a subir los escalones.
-¡Excelente, entonces te escribo!- Dijo este chico sacando una sonrisa con sus perfectos dientes dirigiéndose a Valeria.
-Ahm ¿De que me perdí?.- Dije en un tono confuso y con un poco de celos.
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El Misterio de una Lesbiana.
Подростковая литератураMucho gusto mi nombre es Alejandra, tengo 18 años y soy lesbiana. Si, si estoy segura de eso. Mi familia no sabe nada, este tema es un tabú para ellos pero aún así espero que algún día me acepten. En mi vida me he enamorado de verdad una sola vez, d...