❝ Me atrae todo lo que tenga que ver contigo, me vuelves loco y no esta de más decir que eres mía... Jamás encontrare a una chica como tu. ❞-Jason McCann.
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Justin Bieber Fanfiction.
Jason McCann Fanfiction.
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Jason's POV.
Aun estábamos en la clase, Vanda aun estaba algo nerviosa por mi presencia y más cuando estoy a su lado y todos nos miran con sorpresa. Son unos idiotas, odio las miradas de los hombres en ella.
Aproveche el momento y rodee a Vanda con mi brazo pasándolo por sus hombros y pegándola a mi. Ella solo abrió los ojos como platos sorprendida por mi acción. La verdad me gusta esto.
Trato de separarse de mi moviéndose incomoda.
—Suéltame —dice sacudiéndose.
—No, eres mía —la apreté más a mi.
—No lo soy, déjame —me empujo con su brazo.
Yo solo rodé los ojos y la solté.
Ella presto atención a la clase pero yo solo le prestaba atención a ella. Estaba tan bonita, me volvía loco, estoy dispuesto a golpear a quien sea que intente quitármela.
Ella estaba apuntando los ejercicios que el profesor anotaba y ella trataba de resolverlos en su cuaderno. Yo solo me dedicaba a ver todo lo que hacía con detenimiento.
—¿Puedes dejar de verme? —sonó algo seca.
—No —respondí simple y seguí mirando.
Ella solto un suspiro cansado y soltó el lápiz de manera brusca. Uy... Se enojo.
—Déjame en paz, aléjate de mi, no te quiero cerca —dice enojada sin levantar la voz.
—No —negue inocente con la cabeza—. Me gusta verte, eres muy hermosa —sonreí tierno.
A cualquier chica le hubiera gustado que yo le hable así y que le diga eso. No es que yo sea tierno, la mayor parte del tiempo estoy con mi cara seria o como mi hermana lo dice; "cara de culo". Y si, tengo una hermana. Pero a Vanda simplemente le vale mierda e incluso me desprecia ¿Qué estoy haciendo mal?
Ella me volvió a ignorar y siguió haciendo los ejercicios de la clase. Yo solo me dediqué a verla otra vez pero ahora ella no me dijo nada al respecto.
Se veía tan tierna frunciendo el ceño cuando no entendía algo, lo que hacía que quisiera besar sus mejillas.
Y eso hice.
Me acerqué a ella lentamente y se quedo quieta al sentirme tan cerca de su cara. Como estábamos sentados y ella miraba a su cuaderno el cual estaba frente a ella en el mesa-banco, yo solo recargue mi mano izquierda en la mesa y giré un poco mi cuerpo aun sentado, acerqué mi cabeza y le di varios besos pequeños en su mejilla izquierda.
Vanda sólo quedó quieta y no me dijo nada pero volteo a verme con el ceño fruncido.