FORASTERO

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PROLOGO

El viejo oeste es el término con que se denomina popularmente a los hechos históricos que tuvieron lugar en el siglo XIX durante la expansión de la frontera de los Estados Unidos hacia la costa del océano pacífico, aunque la colonización del territorio comenzó mucho antes, en el siglo XVI, con la llegada de los migrantes europeos.  La migración de la gente al oeste desplazó las culturas ancestrales y oprimió a la minoría étnica de indios, sin embargo hubo grandes avances de la industria, las comunicaciones y la agricultura.

A lo largo que la historia esta época a contado con un sin número de personajes, que han sido recreados en un sinfín de historias, personajes como cowboys, pioneros, indios, cherif, con historias de personas de variada condición que emprendieron la aventura del oeste con la esperanza de alcanzar éxito personal, algunos en busca de oro, de una tierra propia, pero que, en su mayoría terminaron enfrentadas a la pobreza o a la fatalidad del destino.

El rancho y la ganadería fueron base en esta época del viejo oeste, se originó y desarrollo principalmente en Texas, muchos ganaderos de esa zona, vendían sus reses al resto de la región, para que se identificaran las reses de acuerdo a sus dueños, se origino la realización de la marca, por medio de metal ardiendo, debido a las grandes distancias, los dueños de las reses o ganado llamados Brandings contrataban a los llamados cowboys para realizar esta encomienda.

Los cowboys estadounidenses heredaron su oficio de los vaqueros mexicanos que habitaban el suroeste y oeste del país, desde Texas a California. Después de la guerra civil, su labor cobró auge con el inicio del transporte del ganado desde Texas hacia el norte del territorio, desde donde era luego distribuido. Esta labor necesitaba jinetes diestros y resistentes que garantizasen el traslado del rebaño. Los cowboys formaban un verdadero brazo armado al servicio de los grandes ganaderos o cattle barons, los cuales se quedaban con la mayor parte de las ganancias.

Las rutas surgidas del transporte a campo traviesa se hicieron legendarias (en promedio un viaje cubría alrededor de 16 a 24 km diarios), tales travesías estuvieron plenas de durezas y peligros. Por sus servicios los vaqueros ganaban alrededor de un dólar al día. Una vez pagados, la mayoría de ellos se dirigían a los burdeles y casas de apuesta de las ciudades ganaderas. Desde esa época el cowboy se transformó en el más prominente encarnamiento del mito del viejo oeste

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