Amazing | Teen Wolf Fanfic.

IV. It's alright, it's okay.

Al sonar el timbre que marcaba el final del día, la mayoría de los alumnos salieron apresurados de las aulas para dirigirse a sus vehículos o para tomar el autobús escolar y dirigirse a sus casas. Algunos estudiantes caminaban a paso normal, sin prisa alguna. Isaac buscaba por todos lados a la chica nueva pero no lograba conseguir rastro alguno.

-¡Hey, Malia!.- Exclamó el chico mientras corría para alcanzar a la chica, ella había sido la primera en acercase a la nueva por lo que Isaac consideró la posibilidad de que supiera el paradero de la chica de nuevo ingreso. -¿Sabes dónde está Cameron? Llevo un buen rato buscándola pero no doy con ella.-

-No, no la he visto desde que salió llorando de la cafetería por tu comentario.- Murmuró Malia, cruzandose de brazos mientras apretaba los labios algo molesta y observaba al chico, alzando un poco su ceja derecha.

-¿Cameron? ¿La chica nueva?.- Dijo una suave pero aguda voz, causando que ambos chicos voltearan para ver a la dueña de ese comentario. Una chica de segundo año, abrazada a su libro de Historia, los miraba algo asustada. -Lleva todo el día en el baño, lo sé porque la he visto cada vez que he entrado.-

Dicho esto, Isaac salió a paso apresurado en dirección al baño de las chicas, trataba de organizar sus ideas y excusas para poder plantearse una buena disculpa porque Cameron se la merecía. El hombre lobo se detuvo frente a la puerta del baño, dudando si entrar o no.

-Ni pienses que vas a entrar ahí.-

Isaac volteó su cabeza para encontrarse de nuevo con la chica de segundo año

-Es el baño de damas, no un lugar para tener relaciones.-

Isaac río burlonamente y giró su cuerpo, caminando lentamente hacia la chica.

-¿Me ves cara de adolescente hormonal desesperado por algún tipo de.. Actividad sexual?.- Murmuró el chico, dando lentos pasos hacia ella, quien retrocedía de la misma manera.

-N..no.- Tartamudeó nerviosa, buscando la manera de poder irse de ahí sin salir lastimada.

-Bien, ahora...- Isaac giró bruscamente su cabeza, causando que ésta emitiera un crujido -¡Apartate y vete de aquí!.-

La chica rubia salió corriendo, completamente aterrorizada, causando que el chico castaño comenzara a reír. Giró nuevamente su cuerpo y caminó de nuevo hacia la puerta, entrando en el baño.

-¿Cameron?.- Su tono de voz era mucho más amigable que el tono con el que le había gritado a la otra chica -Sé que estás aquí.. Anda, sal.- Se recargó contra la pared, metiendo sus manos en sus bolsillos aguardando a la chica.

-Vete, quiero estar sola.- La voz de Cameron sonaba rasposa, sonaba igual a la vez que habló por primera vez con Scott.

-Cameron... Quería disculparme por mi comentario en la cafetería, no pensé que fuera a lastimarte.. De haber sabido que..-

Isaac paró de hablar en el momento en que la chica comenzó a reír. La confusión comenzaba a aturdir al chico por lo que lo único que se le ocurrió hacer fue guardar silencio. La puerta de uno de los baños se abrió y Cameron salió con una sonrisa en el rostro.

-¿Crees que estoy aquí por ti?.- La risa apareció nuevamente y la chica negó con la cabeza -Isaac, mi mamá murió hace un par de días ¿Y crees que me lastima una estúpida broma?.- Negó una vez más y caminó hasta los lavaderos, juntó sus manos bajo el chorro de agua y mojó su rostro.

-Oh, yo pensé que... Bueno, que yo había causado esto.-

- No, de ninguna manera.- Cameron alzó la mirada, viendo a Isaac a través del espejo -Mi padre también fue al Ejercito y nunca volvió, la historia de tu hermano me hizo acordarme de él.-

-Entonces yo sí causé esto.-

-Oh, no te tomes todo el crédito, Lahey... Un asesino también tuvo la culpa.- Murmuró la chica sentándose en la barra de los lavaderos.

-Bueno, pero nunca había causado que una chica llorara por mi.- Dijo Isaac mientras caminaba hasta la castaña, quien tan solo lo observaba fijamente. El chico se detuvo frente a ella, logrando escuchar como los latidos del corazón de la recientemente huérfana comenzaban a acelerarse.

-Te.. Te repito que no todo fue.. Por.. Por ti.- Cameron tragó saliva nerviosa, nunca antes había estado tan cerca de un chico y mucho menos alguien tan atractivo. Espera, ¿qué?. "¿En serio, Cameron? Tu madre acaba de morir y tu estás pensando en cuanta sensualidad derrama este chico? Que desesperada" Su subconsciente la hizo entrar en razón y ella sacudió la cabeza rápidamente, haciendo que Isaac retrocediera.

-Yo... Yo debería irme.- Lahey llevó una mano hacia su cuello, tallandolo con fuerza y se dirigió hacia la puerta.

-¡Espera!.- Isaac frenó de golpe y volteó a ver a la chica, quien lo miraba apenada mientras sus mejillas volvían a su color natural -Gracias.-

-¿Por qué?.-

-Por venir a buscarme y a pedirme disculpas.- La chica llevó la mirada hacia sus manos. Isaac dio un par de pasos hacia ella y besó su mejilla, Cameron mordió su labio inferior para reprimir una risa nerviosa y el chico se apartó, saliendo del baño rápidamente.