Nivel 03

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Nivel 02 desbloqueado.
Disfrute su partida. Gracias.

Al principio le costó comprender el "mensaje", pues como ya se había percatado, los títulos poseían la respuesta del como superar el nivel, o de lo que consistían. Por ello, pensó: ¿Dónde podrían haber azúcar, flores y muchos colores? Flores y colores, en los parques, azúcar y colores, las pastelerías, pero algo le indicó un lugar en especifico. El supermercado. Si no era ahí, era en una tienda de payasos, pero esa era menos frecuente. Por ello, no dudó en dirigirse a su próximo destino. Pero el problema era que no conocía aquella ciudad, y sus "corazonadas" no eran lo suficientemente buenas para indicarle calle por calle hacia donde ir. Así que caminó hasta finalmente encontrar su destino. Las luces en el interior estaban encendidas, por ello, no tuvo miedo al ingresar. Recibida por aquellas puertas automáticas, y una suave música de fondo, se sintió tranquila por unos momentos. Suspiró el olor a limpio que había en aquel lugar, pero estaba completamente solo. Así que corrompiendo su moral, decidió ir por algo para comer. 

Tomó la primera chuchería que encontró, y la abrió para empezar a alimentarse. Caminó recorriendo los pasillos lentamente, en busca de lo que necesitaba, pero nunca lo encontró. ¿¡Por que no había azúcar, flores y muchos colores en un supermercado!? Pues al parecer su idea de supermercados era muy distinta a la que había ahí. 

Estaba insultando mentalmente a la tienda (y a si misma por no tener mas ideas de donde podía encontrar lo que buscaba) cuando repentinamente sus pensamientos frenaron al escuchar el sonido de la puerta automática abrir y cerrarse. El sonido de los pasos constantes le confirmaron la llegada de alguien. Mi próximo enemigo, pensó. De manera cautelosa se asomó por la orilla de uno de los pasillos, y su pensamiento se vio revuelto al observar a una joven en la entrada. Aproximadamente de su misma edad, de cabello negro y corto, ojos verdes y un usando vestido muy similar (casi igual, a excepción de unos detalles) a el de ella. Aunque el color era muy distinto.

Al momento, la reconoció. Era aquella chica que estaba en al revista. No dudó en sacarla, y observar la imagen. En efectivo, era la misma. Si, estoy segura que es mi próxima contrincante, pensó. Y dejándose llevar por su instinto animal, como león cazando a su presa, se tiró sobre la joven de cabello azabache, y buscó la manera de luchar contra ella. Pero la joven solo se quejó y empezó a sacudirse como perro en busca de secarse a su atacante de encima.

—¿¡Qué te pasa, maldita loca!? —Gritó la azabache molesta. 

—¡Dame la azúcar, las flores y los muchos colores! —Exigió la atacante. 

La escena continuó así por unos momentos, hasta que la tercera acompañante se hizo presente. 

—¿Hola? —Preguntó confusa al observar a las dos chicas pelear como gatas en celo. 

El par frenó su pelea, y las tres se observaron hundidas en un completo silencio mientras intercambiaban miradas, y de pronto, algo tenebroso sucedió. La alarma sonó, y las luces se apagaron dejando a la vista unas sirenas rojas, que eran la única iluminación además de la luz de luna que entraba por los cristales de las puertas automáticas que se cerraron de un momento a otro. 

—¿Tu has hecho eso? —Le preguntó la joven de vestido rosa mientras abandonaba la espalda de la azabache. La recién llegada negó. 

No hubo mas intercambio de palabras, pues las tres se colocaron frente a la puerta observando que en el fondo del supermercado se había encendido un letrero.

"Nivel 03: No permitas que las bacterias te enfermen."

Y después, el mensaje cambió transformándose en un reloj de cuenta regresiva. 05:00 minutos. 

The Townsville game | PPGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora