The Townsville game | PPG

Nivel de recuperación.

Nivel de recuperación desbloqueado.
Disfrute su partida. Gracias.

▽

Llevaban caminando algunos minutos. Su camino y destino eran marcados por letreros que tenían bananas en el medio. Así que entablando una tranquila conversación llegaron a su aparente destino. Una fabrica a la orilla de la ciudad. Ésta, por simple fachada daba miedo, pues estaba hundida en la obscuridad de la noche y lejanía juntas, además que la luna ahora se había ocultado tras las nubes.

—¿Será aquí? —Preguntó Bubbles confusa, ladeando su cabeza.

—Oh, definitivamente es aquí. —Respondió Buttercup con un tono de voz que demostraba disgusto.

—Vamos... —Musitó Blossom tomando iniciativa entrando al lugar. Las puertas ya las esperaban abiertas, y al parecer, debían subir las escaleras para llegar a donde debía. Así fue, y se encontraron una gran puerta dorada con una banana en el centro.

—Es aquí... —Susurró Buttercup, y Blossom dio un paso al frente tomando la perilla dorada, girándola lentamente. Al abrirse, por dentro observaron algo que a simple vista, lucia imposible. Estaban en un cuarto probablemente cinco veces mas grande de lo común, y en ves de escaleras o pisos, todo estaba vacío a excepción de cinco niveles un tanto lejanos que formaban un camino hasta un cofre.

—Esto me recuerda a algo... —Musitó Buttercup sonriendo victoriosa, y de pronto, una aguda alarma sonó y en cada nivel, aparecieron pequeñas muñecas extrañas, que poseían raras combinaciones entre ellas, pero todas eran distintas; con esto me refiero a que mientras unas tenían coletas pelirrojas, otras tenían el cabello largo y negro, y otras el cabello corto y rubio, eran muy extrañas. Y de pronto, en cada hilera aparecieron continuas bananas, y mezcladas entre ellas, tres armas que por lo alto que estaban algunos niveles, no lograban ver de que armas se trataban.

"Nivel de recuperación: Come bananas."

Repitió de nuevo una voz.

—¿Qué tenemos que hacer? —Preguntó Bubbles con miedo.

—Comer bananas... —Dijo Buttercup con ironía.

—Pero esas muñecas no parecen estar muy felices de vernos aquí.... —Buttercup negó.

—Ese es el punto, Bubbles. Esas muñecas nos atacarán e intentarán matarnos. Nosotras debemos matarlas a ellas y comer bananas, subir al siguiente nivel y así... Hasta llegar a aquel cofre... —La azabache observó a la rubia con emoción, pero esta parecía un tanto asustada.

"Cinco..."

Anunció la voz iniciando la cuenta regresiva para dar inicio al juego.

—Prepárense... —Dijo Buttercup con emoción.

—Yo no iré... —Dijo Blossom.

"Cuatro..."

—¿Qué? ¿Por qué? —Preguntaron sus acompañantes confusas.

"Tres..."

—La habilidad física no es lo mío, además que no necesito lo que sea que "ganemos" y creo que les sirvo mejor aquí abajo. Además, hay mas probabilidades de que si subo, termine perdiendo mis dos últimas vidas, y moriré. Prefiero aprovecharlas mejor.

—Como quieras... Vamos, Bubbles...

"Dos..."

—No, yo tampoco iré. Tengo miedo...

—No es pregunta. Es orden. No me dejaras sola allá arriba.

"Uno..."

—Pe.... —Estaba por discutir, cuando Buttercup la tomó del brazo jalándola y dando el primer brinco con ayuda de un resorte que apareció en último momento en el suelo. Y llegaron al primer piso.