Capitulo 1: Desastre en la cocina

52 6 1
                                    

AMABEL

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

AMABEL

*Beeeeep Beeeeep*

-Dioos callate!! - me cubrí la cabeza con la almohada -no me quiero paraar-

-Cariño tu despertador lleva soñando unos 10 minutos ya parate que ya es muy tarde! - grita mi mamá desde la cocina. Yo solo gruñi y me di la vuelta sin caerme de la cama. ¿Es tarde? -pensé- pero si hoy no hay clases y solo olvide quitar mi odiosa alarma por floja.

Mi mamá me volvió a gritar y no tuve más remedio que levantarme para darme un baño.

Demonios!

Tenía tanto sueño que por un momento pensé que me quedaría dormida en la ducha con todo y agua fría, pero no fue así,en cambio me puse a cantar las canciones que están de moda con mi melodiosa voz. Si mi melodiosa voz que solo YO puedo escuchar. Casi nadie sabe que amo cantar, solo los más cercanos. Es mi pasión oculta.

Así como un romance secreto??
Nel pastel, nada que ver.

Cuando salgo de la ducha veo que mi mamá me escogio mi ropa -vaya, esto si que es importante para mi mamá- pensé, gruñi nuevamente al ver que me había escogido un vestido. No hay palabras para describir lo mucho que odio los vestidos, además tengo 17 ya puedo escoger mi ropa sola. Me puse unos jeans y una playera que decía "Netflix is my boyfriend" Y baje a desayunar. Si mamá me regaña pues ya que.

Tuve que sacar los ingredientes para un rico smothie de fresa ya que no había rastro de mi mamá, de repente oigo que se abre la puerta y entra mi mamá seguida de una señora de su edad que, debo admitir era muy guapa y se veía joven aún.

Ella tiene el cabello rubio como mi mamá con unas muy pocas canas, el mío en cambio es castaño claro, tiene unos ojos verdes como los míos pero los suyos eran un verde más oscuro casi color musgo. Llevaba un vestido de flores rosas y tacones altos del mismo color, atrás de ella entró un chico de más o menos mi edad y... DIOOOS! Era toda una obra maestra tallado por los mismos dioses.

Cabello rubio, ojos azules y una figura excepcional. Al ver que me le quede enbobada sonrió ambiciosamente y yo me volte bajando la mirada un poco avergonzada. Quice encender la licuadora, sin darme cuenta que no tenía tapa, pero era muy tarde. Todo mi esfuerzo se fue a la basura; bueno más bien a mi ropa, ya que esta quedo completamente empapada de una sustancia rosa y pedazos de fresa y hielo. El chico se empezó a reir y lo mire con una mirada llena de furia que solo hizo que se riera más fuerte.

Apenas lo conozco y ya lo odio - pensé

Algo estaba claro, hoy iba a ser un día muuuy largo.

Lo mejor de nosotros (Sin Editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora