12: Intranquilidad.

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¿Qué?, Jungkook fue lo único que pronunció antes de que fuera separado del lado de Taehyung a la fuerza por culpa del personal de seguridad.
Lo estaban separando de su bebé, su amigo, lo estaban alejando de su Tae. Sentía como el corazón se le destrozaba.

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Finalmente Jimin y Jungkook fueron arrastrados hacia la entrada del hospital. Esto es injusto, pensaban los dos amigos que en varios intentos trataron de entrar nuevamente al hospital pero los guardias se interponían en su camino.

—Jungkook, ya... Vamos — Jimin tomó el brazo del azabache al ver que hacia su décimo intento por entrar.

— ¿Vamos?, ¿En serio, Jimin?. No quiero dejar solo a Tae y menos en el estado en el cual está — Jungkook se zafó del agarre de Jimin pero este lo volvió a tomar y esta vez se puso en frente de él.

—Aunque quieras... Con esa señora ahí. No te van a dejar entrar y ver a Taehyung— Jimin posicionó sus manos en los hombros de su amigo.
—Mejor ve a descansar y mañana regresaremos... —

Jungkook hizo caso a las palabras del rubio y fue directo a casa, eso sí con supervisión del mayor para que no se escapara y volviera por su cuenta al hospital.

—Nos vemos mañana, Jungkook-ssi — Jimin revolvió el cabello del azabache y se fue a su casa.

Jungkook por otra parte, fue directamente a su habitación. Su familia se encontraba cenando pero no hizo caso a los gritos de sus padres, al estar en su habitación se postró en la cama. Sin cambiarse de ropa, tomó una almohada para abrazarla, siguió  en esa posición mientras acercaba una de sus manos hacia su cuello y tomaba la piedra que colgaba de él.
— Que tengas dulces sueños, mi Tae— susurró para sí, dejando caer una lágrima  y cerró sus ojos para relajarse y dormir.

El castaño se despertaba de vez en cuando. Se desveló por las pesadillas, habían vuelto. Trataba de tranquilizarse, decirse a sí mismo que eso era fantasía que no iba a suceder pero era difícil. Especialmente para Jungkook.

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—Oh, Jeon te ves terrible —La persona que estaba al lado de Jungkook rió por lo bajo al ver al castaño. — ¿Acaso no dormiste?—

—Cállate Eunwoo... Solamente... Solo tuve que cuidar la tienda — Mintió el castaño sin mirar a su compañero.

— ¿Otra vez?, Pues Jeon deberías dormir más— el pelinegro se posicionó adelante de Jungkook, haciendo que éste rodará los ojos. — Tienes unas ojeras muy visibles, mi niño — Eunwoo tomó la cara de Jungkook y miró a profundidad su cara.
Cuando el pelinegro hizo esa acción Jungkook alejó su cara de las manos de su amigo y lo miró con el ceño fruncido. — Estoy bien, Cha. Y por favor no me vuelvas a llamar "mi niño", es extraño— Jeon se levantó de su asiento y se fue para tomar algo de aire.
Caminó hacia el patio del colegio, no le importó el sonido de la campana sólo siguió con el fin de olvidarse del mundo por un momento.

A la par, la clase de un año mayor estaba haciendo deportes. Algo fácil, circuitos deportivos y fútbol.
Park Jimin se encontraba en esa clase, sonriente jugando a la pelota. Su equipo había metido un gol antes de que el tiempo terminara, los del equipo ganador se encontraban celebrando al igual que Jimin, pero su felicidad duró hasta que vió hacia el pasillo que daba a la cancha.
Les dijo a sus compañeros que iba al baño y partió corriendo, tomó por sorpresa a Jungkook por la espalda.

— ¿Y tú?, ¿No deberías estar en clases? — Dijo con una voz más ronca para confundir a su amigo.

— ¿Jimin? — Preguntó el menor al girarse y ver a su amigo. — Sólo quería tomar aire — Respondió sin mirar a Jimin.

— ¿Tomar aire y faltar a clases? Eso es anormal en Jeon Jungkook — Tomó el mentón de Jungkook para verlo directo a los ojos. — No dormiste ¿verdad ? — Preguntó el rubio.

—No, realmente no dormí nada....sentía algo que no me dejaba dormir....—

~ºCuarzo Rosaº ~ {V.Kook/Kook.V}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora