Capítulo 10

17 4 0
                                    


Narra Sam

-Con que sabes quién soy?

Hmmm habrá escuchado de mí? En eso le tiré una sonrisa amigable

-Oye no hay porque pelear verdad? Si te rindes, no tendrás una muerte lenta y dolorosa, que dices?

Ella me dio un golpe rápido en la cara antes de poder decir otra cosa, me había tomado con la guardia baja, dolió un poco a decir verdad. Cuando subí la guardia ella con un tono de decepción y tristeza me dijo

-Idiota, es que no te acuerdas de mi? Tan rápido ya me olvidaste... que descaro, y yo buscándote sin descanso.

Que demonios? Sabrá en realidad quien soy?

-Disculpa, nos hemos visto antes?

A menos... en eso la vi de reojo para asegurarme si la había visto antes, espera un segundo...

-Reconocería esa tabla de planchar donde fuera

Ella se acercó y golpeó mi estómago con fuerza.

-Qué te pasa idiota, ¡ni tan plana estoy!

No puede ser... sí quien más me respondería de esa forma!

-Rith! Eres tú, no sabes cuánto te extrañe, Que feliz estoy de verte!

La abracé con mucha fuerza y ella correspondió al abrazo con pequeñas lágrimas brotando de sus ojos

Estuvimos abrazados como por cinco minutos más o menos, pero al cabo de un tiempo, pude ver que mis hombres estaban empezando a verme raro, como si dudaran de mi, en ese momento me di cuenta de lo que tenía que hacer, o los mataba a ellos, o tendría que asesinar a Rith y a los americanos restantes.

-Lo siento Rith...

Me separé de ella y le apunté a la cabeza con una de mis Tac-45 para luego decirle

-Nuestras vías están unidas de nuevo

En eso disparé... a los hombres que había tras de ella para luego voltearme velozmente y asesinar a mis compañeros alemanes de igual forma.

-Lo siento, de verdad eres la persona más importante para mi, pero siento que nuestras naciones nos impedirán que nos juntemos... así que creo que lo mejor sería olvidar que todo esto sucedió corazón, no te parece?

Dije yo bajando la mirada tratando de sonar seguro y convincente. No quería alejarme de ella, pero no es muy buena decisión tenerla conmigo y obligarla a seguirme en una vida fugitiva, al menos eso creo yo...

Guerra en las víasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora