Capítulo 54

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Pov Camila

Llegamos a un hotel bastante hermoso en París después de casi 11 horas de viaje debido al retraso, teníamos un montón de maletas ya que después de unos días aquí volveríamos a Barcelona y sinceramente me sentía muy cansada y sé que Lauren también. Se la pasó dormida casi todo el vuelo aunque sabía que el jetlag le afectaría pues ya no podría dormir más y llegaríamos de madrugada. Contra todos mis pronósticos, ella cayó como una roca al tocar la cama del hotel. No sabía si debía preocuparme por su manera de dormir, aunque traté de dejar todos esos pensamientos de lado. Ella estaba cansada y lo entendía y lo mejor que podía hacer era cuidarla.

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Me desperté sintiendo muchos besos en la cara y el cuello que me hicieron erizar la piel, era Lauren. La sensación era increíble, definitivamente estaba lista para despertar así el resto de mis días.

-Hola -dijo ella sonriendo cuando al fin abrí los ojos, metió sus manos dentro de mi pijama y comenzó a acariciar mi abdomen haciendo que me tensara enseguida

-Hola Lauren, ¿qué tal has dormido?

-Lo sé, lo sé, soy una mujer aburrida que se la ha pasado durmiendo, pero te lo compensaré, lo prometo amor -dijo besando mi frente

-No, no tengo problemas con que descanses

-No he sido una gran esposa estos dos días que hemos estado casadas, lo siento

-Lauren, no seas boba, eres la mejor esposa de todas, incluso estamos en París -dije sorprendida -Por cierto, de eso quiero hablarte, Lauren ¿cómo has costeado todo esto?

-¿Eso importa? -dijo ella levantando la ceja

-A mi si, ahora que estamos casadas deberíamos cuidar las finanzas, no quiero sonar aburrida ni nada, me encanta la idea de estar aquí, pero me preocupa un poco lo que sigue... -dije un poco insegura, Lauren me miró en silencio por algunos segundos y luego por fin habló

-Camila, cuando te pedí que te casaras conmigo estaba segura de que quería hacerlo porque te amo, pero también estaba segura de que saldríamos de cualquier adversidad y por supuesto de que viviríamos bien, no tienes nada de que preocuparte. Sé que somos jóvenes, pero he aceptado este compromiso porque te amo y no va a faltarnos nada, tú vas a seguir en la escuela, yo también y todo va a estar bien, no te preocupes

-No quise decir eso, es decir, no quiero presionarte ni nada... Es que yo...

-Te entiendo Camila, pero todo va a estar bien, te lo prometo, mientras estés a mi lado, todo va a estar bien...

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Tomamos un desayuno ligero en el restaurante del hotel. Luego nos encaminamos hacia donde según Lauren nos esperaban. Llegamos a un parque cercano, el clima estaba un poco frío y ya pasaban de las 11 AM. En el parque habían otras personas que parecía también esperaban. Luego de unos minutos una mujer de unos 35 años con un megáfono comenzó a llamar a la gente.

-Iremos de tour por París -dijo Lauren sonriendo -Sé que hubieras preferido que fuéramos solas, pero es que, creí que era mejor tener un guía, solo será hoy, el resto lo descubriremos solas ¿Te parece bien?

-Me parece perfecto, realmente cualquier plan lo es mientras estemos juntas, incluso si nos hubiéramos quedado en el cuarto del hotel -dije sonriendo y besando la comisura de sus labios

-Suena como una gran idea... Aún te debo algo... -dijo ella en mi oído dando una mordidita en el lóbulo de mi oreja

-Si haces eso voy a querer volver -le respondí

-¿Lauren Jauregui? -le llamó la mujer con el megáfono y nos acercamos

-Si, soy yo

-¿Dos personas cierto? -dijo la mujer

-Así es

-Adelante, suban al bus -respondió la guía y Lauren asintió y me tomó de la mano conduciéndome hacía adentro, al pasar cerca de la guía me di cuenta de que nos miró con extrañeza lo cual me hizo sentir incómoda

-Parece que esa mujer nunca ha visto una pareja de chicas -dije entre dientes

-¿Cómo? -respondió Lauren

-Nada, olvídalo -dije y preferí dejar el tema quizá era solo mi imaginación

Recorrimos las calles más hermosas de París, nos llevaron a los lugares más representativos, explicándonos un poco de la historia de estos. La obvia parada obligada era la Torre Eiffel, donde parecía que el romanticismo cobraba más vida pues todas las personas que iban en pareja parecían más cariñosas que antes. Incluso Lauren no paraba de abrazarme y besarme cada dos segundos. Amaba toda esa atención sobre mi. Fue lo que me siempre soñé y deseé desde mi subconsciente a partir de que nos conocimos.

-Siento si esto de venir acá ha sido demasiado cliché, es la primera vez que me caso, tú comprenderás -dijo Lauren abrazándome y dándome un beso en la frente

-Es perfecto Lauren, ¿bromeas? Es lo mejor del mundo

-Tú eres lo mejor del mundo Camila, más bien, tú eres mi mundo

-Te amo

-También te amo Camila gracias por casarte conmigo a pesar de todo

-No me agradezcas, no es ningún favor Lauren, yo te amo, nos merecemos esto, nos merecemos toda la felicidad, hemos pasado por demasiadas cosas

-Lo sé... Pero eso se acabó, ahora seremos felices y estaremos juntas hasta que la vida nos lo permita...

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Luego de un intercambio más de besos, abrazos y de sacarnos miles de fotos, era momento de volver al hotel. Los guías muy amablemente nos llevaron de vuelta. Cuando bajamos la guía quien nunca nos quitó la vista de encima durante todo el tour se acercó.

-¿Disfrutaste el tour Lauren? -dijo la mujer a mi esposa con una familiaridad que me pareció molesta

-Estuvo perfecto, muchas gracias, nos gustó mucho ¿cierto amor? -me dijo Lauren y la tomé por el brazo para luego entrelazar nuestras manos

-Claro, todo estuvo muuuy bonito, el mejor regalo de bodas -le respondí pero mirando a la mujer delante de nosotros quien nuevamente puso esa expresión molesta de todo el día

-Oh vaya, entonces, ¿estás casada? -dijo la tipa mirando a Lauren y luego a mi de arriba a abajo

-Sí, estamos -respondí yo levantando nuestras manos entrelazadas y señalando los anillos -Ahora si nos disculpas, tenemos cosas que hacer, como las recién casadas que somos, tú entiendes -dije con malicia y guiñando, -Adiós -Luego de eso jale a mi mujer y la metí en el elevador casi empujándola

-Camila ¿qué te sucede? -dijo Lauren riendo una vez que estuvimos dentro de éste

-A mi nada, esa tipa es la que tiene un problema, no te quitó nunca la vista de encima, trató de coquetear contigo...

-Mi amor eso no es cierto...

-¡Claro que lo es Lauren! No te hagas la tonta

-Mi amor...

-¡Ningún mi amor! -Lauren rió, era obvio que le divertía la situación -¡Deja de reírte Lauren, no le veo lo gracioso!

-Lo siento mi amor pero es que estás enojada por nada, no me fijé, y aunque hubiera sido de otra manera a mi no me importa, solo me importas tú... -Rodé los ojos y traté de safarme de su agarre, me sentía demasiado celosa de pensar que alguien quisiera acercarse a mi esposa -Bueno amor, deja ya esa carita, por favor Camila, ¿dime qué puedo hacer para que estés feliz de nuevo?

-¿Harás lo que yo te diga?

-Lo que quieras

-Muy bien Lauren, en ese caso... En cuanto estemos en la habitación, harás lo que yo te diga, serás solo mía...

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Anterior a este hay otro capítulo. Gracias por leer.

Bad Reputation | Camren Donde viven las historias. Descúbrelo ahora