The Evil Within - Yaoi

Parte sin título 10

Notas iniciales: Hola a todos los que me leen a mis queridas seguidoras, anónimos y demás, estoy de buenas pese a la carga de trabajo que tengo ya que, como ya lo había mencionado, tenía esta parte lista pero quería detallarlo un poco más ya que quería que los sentimientos estuvieran a flor de piel. Ahora si con todos los ánimos y con todo el drama que pude escribir les traigo esta salsa de capitulo ¡Gócenlo! Los leo abajo

Capi sig.

Laura estaba enojada con Ruvik, su hermano jamás le mentía (no se sabía si era defecto o virtud pero así eran las cosas con ellos dos) y cuando estuvieron de frente recibió valientemente las bofetadas de su hermana, soporto el dolor de ella y el de él cuando esta se desborono en el suelo en lamentos y disculpas - ¿Dónde está él? - le pregunto de rodillas a su lado sin parar de llorar, las lágrimas caían por su afilada nariz y el moco le obstruía la respiración por lo que constantemente hipaba.

- en la granja de nuestros padres recuperándose - el científico se quitó las lágrimas de los ojos que amenazaban con salir (esto de llorar y tener sentimientos era una molestia) solo esperaba que no se volviera una costumbre ya que parecer débil no era una característica de un Victoriano y menos de un alfa - no ha despertado desde entonces...- murmuro sintiendo que sus propias palabras lo herían letalmente.

- ¡Dios mío, es mi culpa! es mi culpa por no decirles la verdad a tiempo - ella se llevaba las manos al rostro y Ruvik no la abrazó por miedo a hacer rechazado por ella – solo quería protegerlo Ruvik, quería que estuviera a salvo de nosotros – siguió llorando amargamente como una niña pequeña el rubio no pudo contenerse y coloco sus manos en los hombros, se acercó a su hermana y recargo su cabeza en su hombro arrepentido. Ella no lo alejo.

- Soy un monstruo Laura. Lo siento tanto – Laura siempre había sido alguien de noble corazón, meditaba las cosas y se anteponía a los problemas, en este momento por mucho que intentó no pudo culpar únicamente a su hermano, sabía que ella había colaborado indirectamente con el daño ocasionado al detective.

- Ruvik tú no tienes la culpa y no es mi perdón el que tienes que buscar pero... dios, por favor... prométeme que dejaras los experimentos a partir de ahora - él la miro con los ojos clavados en la cristalina mirada de ella - ¡Prométemelo! -

- te lo prometo Laura, te lo prometo -

Ambos hermanos se fundieron en un cariñoso abrazo fraternal llorando por el infortunio del que eran presas por sus propios actuares con una promesa secreta que dictaminaron una vez que vaciaron sus penas y eso fue de que harían todo lo posible por ayudar a Sebastián a obtener de nuevo su vida pasada aunque eso significara dejarlos.

Las semanas siguientes fueron un calvario para la familia Victoriano incluyendo para los padres cuyos planes brillantes se vieron opacados por el único alfa descendiente. Rubén había sido tan consentido que ahora era impertinente y su padre se preguntaba últimamente si debería haberle castigado más fuerte para darle un carácter serio y duro como el de él, si tan solo la omega de su madre no quisiera humanizarlos con lecciones de vida ambos hermanos serian su orgullo y no la vergüenza que lo delataba a cada instante.

Primero fue la ruptura del compromiso de Rubén. Fue en una buena noche donde ambas familias estaban reunidas dando la más elegante cena prenupcial. Durante el platillo principal cuando lo que se suponía sería un cortejo único delante de todos y la entrega oficial del anillo simplemente Victoriano se limpió la comisura de los labios dejando los cubiertos correctamente puestos en su lugar, se puso de pie y mirando a todos los presentes alegó que su futuro omega presentaba ciertas costumbres que él como descendiente de tan prestigiada familia como lo era la familia Victoriano no se podía dar el lujo de preservar. Con la mirada asombrada de todos y contando ya con su absoluta atención, finalmente lo dijo – Mi omega me ha sido infiel durante todo el cortejo mi aroma de alfa no es capaz de controlarlo y antes de que signifique una deshonra para mi linaje y mis crías prefiero pensar en el provenir de ambas familias. No es mi intención quebrar con las tradiciones o los tratos que actualmente tenemos con la familia pero, como alfa no soportare una ofensa así. Declaro por lo tanto que al no poder sujetarme a las costumbres de mi omega este compromiso ha quedado rescindido para siempre –