My Angel

Capitulo 13: ¡Ahora no!

He soñado con Nhoa muchos días seguidos, siempre me despierto en el mismo momento: "¿Quién eres?". Ya no sueño otra cosa, sus pasos para alejarse ¿serían de miedo? ¿Desprecio?

Temo que me tenga miedo, es el único que puede ayudarme no puede temerme.

Voy a dormirme luego de la revisión y tomar los remedios. Al abrir los ojos miro al suelo y veo el agua de la pileta, las palabras de Nhoa: -¿Quién eres?-. Alzo la mirada y lo veo retrocediendo, avanzo a pasos rápidos, trato de tomar su brazo pero él se niega, retrocede más. Al dar unos pasos muy apresurados me caigo, el caerme al suelo parecía ser una señal, una señal para dejar de intentar, para despertar de ese sueño y perder las esperanzas. Pero cuando menos lo esperaba Nhoa me toma de los brazos y me levanta, me direcciona a la silla de tomar sol y me sienta en ella, se pone de rodillas ante mí, toma mi mentón y alza mi cabeza, seca mis lágrimas con sus dedos y me regala una tierna sonrisa.

Nhoa:- Tranquila, todo va a estar bien- Acaricia mi mejilla.

Sin saber que pasaba o quién era, me dijo que todo estaría bien, luego de la escena que vio me regala una sonrisa. Me renueva las fuerzas, sin darme cuenta me lanzo sobre él y envuelvo mis brazos en su cuello, sin saber cómo reaccionar se queda inmóvil por un momento, luego de unos instantes corresponde al abrazo y envuelve mi cintura con sus largos brazos. En aquel exacto momento olvide todas mis preocupaciones, estaba tranquila, me transmitía paz, me sentía protegida.

Nhoa se aparta de mí, toma mis manos y con una dulce sonrisa empieza a hablar y a cada palabra me fortalece.

Nhoa:- No sé quién eres, ni de dónde vienes. Pero lo veo en tus ojos, eres una buena persona, siento que debes necesitar ayuda, quiero ayudarte, solo debes mostrarme que necesitas, estoy dispuesto a ayudarte- Aprieta un poco mis manos y me mira a los ojos con una hermosa sonrisa dibujada en su rostro.

Le regalo una triste sonrisa, él me vuelve a abrazar, y nuevamente, me ciento en el cielo.

Nhoa: -Ahora deja de llorar, todo estará bien, te ayudaré-

Se levanta repentinamente y lo sigo con la mirada, se aleja un poco en dirección a los rosales, no logro ver que hace, pero al regresar tiene una mano en la espalda, al volver a sentarse saca su mano y en ella trae una hermosa rosa blanca, un blanco reluciente, y me la entrega.

Nhoa:- Dicen que cada tipo y color de rosa tiene un significado, no sé cuál es el de las blancas, pero creo que te mereces una, son delicadas y pasan la idea de sencillez, pero al verlas de cerca revelan todo su esplendor y belleza, creo que eres como una rosa blanca, una hermosa y delicada rosa blanca, que posee sus espinas para defenderse de los peligros del mundo- Vuelve a sonreírme.

Tomo la rosa y le regalo una sonrisa, recuerdo el llavero que ha encontrado, apunto a su bolsillo, Nhoa me mira confuso e introduce su mano en él, lentamente, saca mi llavero.

Nhoa: - Lo encontré hace unos días, desde eso lo llevo siempre en mi bolsillo, de algún modo siento que es algo importante- Me mira

Sonrío levemente y apunto al llavero, seguido me apunto, dándole a entender que es mío.

Nhoa: - ¿Es tuyo?- Me mira sorprendido.

Balanceo mi cabeza de arriba abajo, él mira al llavero y me lo alcanza, no lo tomo, empujo su mano contra su cuerpo, y niego con la cabeza.

Nhoa: - ¿No lo quieres?- Vuelvo a balancear mi cabeza confirmando- Entonces tómalo- Niego- ¿por qué no lo quieres?-

Tomo el llavero de sus manos y le enseño la escritura