Se conocieron cuando eran pequeños, él se enamoró de ella, ella se enamoró de él.
El tiempo pasó y quiso separarlos, ambos emprendieron caminos diferentes.
El destino los quiso volver a juntar.
Él continuaba amándola, ella le olvidó .
Hasta que...
Aclaración: las palabras en cursivason palabras que dicen es español, la novela transcurre en "japones" pero la protagonista también habla en español :)
Era ya por la mañana, casi no pude dormir por los nervios del primer día. Ayer al final se nos hizo un poco tarde, fingí no conocer a Rin no quería que esa parte de mi pasado volviese a aparecer no ahora que estaba en una relación estable con Will.
Temas aparte, hoy era mi primer día en la secundaría, no tenía ni idea de nada así que Gou me ayudaba en prácticamente todo. Al llegar tuve que terminar de rellenar unos papeles y el director me llevó a mi clase. Entré en la sala y como era de esperar fuí el centro de atención. El director me dejó allí con el profesor el cual hizo que me presentara.
- Hola a todos, Soy Jimena pero todos pueden llamarme Jim que es más fácil. Soy de España pero viví aquí hace mucho tiempo. Espero que nos llevemos bien- hice una pequeña reverencia.
Al levantar la vista vi como al fondo un chico rubio empezó ha hacer señas, parecía que le estaba dando algo. Ese chico desde primer momento que pisé la clase no paró de hacer cosas extrañas para llamar mi atención, lo dejé pasar. El profesor me volvió a dar la bienvenida y me señaló mi asiento, que vaya casualidad que paraba por el fondo y muy cerca del chico hiperactivo de antes. Me senté dejando mi mochila en el suelo y mis utensilios necesarios encima de la mesa. Yo estaba dispuesta a atender cuando...
-Jim-chan!- escuché un pequeño susurro proveniente de mi derecha, sabía quien era pero como dije antes yo iba dispuesta a atender en clase.
-Jim-chan, aquiiiiii- este chico es un pesado, pensé
- Jim-chaaaaaaan- esta vez me lanzó una bola de papel a la cara, ahí fue cuando me enfadé
- QUE COJONES QUIERES????- chillé en español mientras me giraba hacia el niño pesado
-¿Tiene algún problema señorita Vega?
-Mierda, lo siento, no- algunos compañeros se reían de mí ya que empezaba a mezclar idiomas
-Si necesita algo no dude en comunicarlo
-Sí, gracias- cuando el profesor se volvió a girar cara a la pizarra me volvía a girar para ver al rubio
-Jim-chan, cuanto tiempo sin verte
- ¿Quien eres?- este chico cada vez que abría la boca me parecía más raro
-¿No me recuerdas? es normal en verdad, ha pasado mucho tiempo
- Si, puede ser, pero si me dices tu nombre quizás...
-Ah si, perdón, soy Nagisa Hazuki
-Nagisa....
*En mi cabeza
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