La hija de Gastón [Ben & Tu]

3

Se acabó el partido de Tourney, los caballeros perdieron, comoquiera bajé y fui con Ding Dong quien era el que narraba los partidos.

- Ding, ¿me permites el micrófono?
- claro, Lady Grace.
- Ding...
- sólo Grace. - sonreí y me dio el micrófono.
- gracias. - me subí a la plataforma y y todos me miraron, incluyendo los jugadores y Ben.

Diablos, los nervios me comenzaron a invadir, mis manos sudaban.

- Grace.. - me habló Ben y lo miré.
- Ben, sabes que te quiero mucho y no te respondí muy claramente en la mañana.
- ¿te refieres a... - asentí.
- ¡Doug! - la banda comenzó a tocar.

- Grace.. - se subió a la plataforma y me tomó de la mano.
- vuélvemelo a pedir si es que no te da pena decirlo enfrente de todos. - dije tapando el micrófono. - o lo hago yo.
- la respuesta es sí, ¿verdad? - asentí.
- pero sólo tengo una condición.
- la que tú quieras.
- que esperemos un tiempo, unos meses más, tal vez el año.
- está bien, puedo resistir hasta entonces. - me besó y escuché el grito de todos de emoción y algunos aww.- ¿me permites el micrófono?.
- todo tuyo, lindo. - dije dándoselo.
- tenemos un aviso muy importante, chicos. - dijo Ben por medio del micrófono mientras me tomaba de la cintura. - nos vamos a casar. - volvieron a gritar y reímos por la reacción de todos, era muy linda.
- nos vamos a casar, wow. - dije recargando mi cabeza en el hombro de mi novio.
- si, me alegro por eso. - sonreí y lo besé.

1 mes después...

Faltaban tres días para el baile real donde haríamos formalmente el compromiso.

- Evie, no puedo respirar. - le dije.
- deberías soltárselo un poco. - le dijo Mal y ella la miró mal. - se está poniendo azul como los ojos de Kendall. - ambas la miramos. - son muy oscuros los ojos de Kendall.
- si, supongo que me puse más como Ursula. - dije e Evie soltó un poco el vestido. - sólo faltan tres días, no es que vaya a engordar.
- si se puede.
- no quiero ponerme azul como tus vestidos. - rió.
- aún falta tu boda.
- medio año, ya está la fecha decidida.
- después de que ustedes se comprometieron, hace unos dos días, o sea ante ayer... - dijo Mal.
- ¿qué pasó?
- me propuso matrimonio. - dijo enseñando un anillo que traía en su dedo anular.
- ¡felicidades!. - dije tratando de caminar hacia ella pero Evie me detuvo. - ¡Evie!
- lo siento pero no te puedes mover.- Mal caminó hacia mi riendo y me abrazó.
- felicidades Mal. - le dije ya abrazándola. - a ver tu anillo. - me lo enseñó.

- ¿acaso no es..
- el anillo de Elsa, si. - dijo.
- y si es de su tía, ¿por qué te lo dio?
- Kendall me dijo que Elsa se lo dio para la chica con la que se fuera a casar y yo me voy a casar con él, por eso me lo dio.
- ¿y sus padres y Elsa lo saben? - asintió.
- me aceptaron en su familia así como Bella y Bestia te aceptaron a ti.
- ¿desconfiaron de ti hasta que salvaste al reino?
- no... me gané su confianza y tal vez si fue eso. - Evie me volvió a apretar el vestido.
- ¡Evie!
- lo siento.. - dijo y volvió a soltarlo. - ¿cómo quieres tu vestido de bodas?
- medio año. - canturreé.
- se va a pasar muy rápido. - canturreó.
- no puede ser que en medio año las tres tengamos novios y dos nos vayamos a casar.
- sólo faltan los chicos. - dije. - Jane y Carlos hacen bonita pareja.
- terminarán juntos tarde o temprano.- dijo Evie.
- oye, ¿me puedo ir ya?
- dame una buena razón.
- un almuerzo con Ben.
- ¿irás en la moto nueva que te regaló?
- si, me encantó el color. - dije, era roja.
- bien, quítatelo. - me lo quité y me vestí con mi vestido rojo con dorado.
- enserio te tomas enserio todo lo que sea ropa.
- es mi futuro. - dijo. - diviértete con Ben.- asentí muy sonriente y salí con una canasta en mano.

Me subí a la moto y me dirigí a donde habíamos quedado, en el lago.

- Grace..
- te dije que lo tendría listo. - le dije abrazándolo.
- ya veo que sí. - dijo abrazándome de vuelta y me besó.
- anda.. - lo tomé de la mano y ambos nos sentamos.

[...]

- wow, no puedo creerlo, lo hiciste con anticipación.
- si.. - ¿por qué lo dice?
- esto lo dieron e n la boda de mis padres, se tarda tres días en hacerse.- dijo muy feliz mientras comía. - ¿por qué no comes?
- ya me llené.
- ¿una tartaleta de fresa?
- ¡si! - dije tomándola y me la comí.
- tienes jalea, deja saco una servilleta, traes, ¿verdad? a mí se me olvidaron.
- sí pero yo las saco. - dije nerviosa, no quería que viera que traía el libro de hechizos de Mal.
- no, no te preocupes. - abrió la cantaste y su sonrisa se desvaneció, había visto el libro. - esto es de Mal y debería estar en el museo. - dijo sacándolo.
- lo siento Ben.
- ¿por qué traes el libro? ¿para qué lo necesitas?
- Ben, yo... - lo empezó a hojear, mierda.
- hechizo para teñir el cabello, hechizo para comida, hechizo para el nerviosismo, hechizo para modales. - comenzó a decir cuando leía las páginas marcadas. - ya no puedo leer más. - dijo soltándolo.
- Ben, yo..
- me has estado engañando todo este tiempo haciéndome creer que te esforzabas.
- ¡me estoy esforzando! - le grité molesta. - no soy una chica de Auradon, todo lo que tú haces naturalmente a mí no me sale tal como a todos los que conozco.
- eso no tiene nada que ver.
- toda mi vida estuve rodeada de villanos, haciendo bromas crueles y golpeando personas. - dije. - maldiciendo el nombre de cada príncipe y princesa de Auradon en especial a tu familia y a ti,
- eso tampoco tiene nada que ver, porque sé que Evie, Carlos, Mal y Jay lo hicieron también y es normal en ustedes.
- lo que no es normal es que se supone que soy tu enemiga pero no lo soy porque soy tu novia y me voy a casar contigo.
- ¿te estás retractando?
- no, no sé pero sé que no pertenezco a Auradon. - dije antes de marcharme.