Capítulo 41

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Cuando abrí los ojos, me di cuenta de que me encontraba recostada en la bañera completamente desnuda, la cual estaba llena con agua tibia, y alguien se encontraba sobre mi, mirándome fijamente con aquellos ojos rojos, hasta que yo despertara.

—Tae...

—Sun Hee...— sonrió con malicia. —Por fin, todas mis fantasías, se harán realidad...

Continúo haciendo conmigo lo que le placía. Los gemidos se volvían más fuertes. A ese punto, mi cuerpo estaba empezando a cederle terreno a TaeHyung, mi cuerpo débil no podía contra él.

Él acarició nuevamente mis pechos, quitándome los cabellos que los cubría un poco, pude sentir un par de hincones, mire hacia Tae y vi como este dejaba una marca notoria en mi pecho, nuestras miradas se unieron, pero no eran los mismos ojos los cuales me agradaban ver cada día, estos eran completamente diferentes, no era el TaeHyung que yo conozco, este subió lentamente hasta que sus labios se apoderaron de los míos nuevamente, estimulándolos continuamente. No podía con todo lo que ocurría, simplemente no podía...

—Tae...— volví a susurrar su primer nombre.

—Callate. — susurro firme.

—Basta...— le suplique.

Este se detuvo por unos segundos, volvió a conectar su mirada con la mía, aquellos ojos, se volvieron un rojo intenso, esa mirada mística, penétrate e intimidante en algunas ocasiones.

Nuestros cuerpos desnudos volvieron a tocarse nuevamente, recorriendo cada parte de ellos, dejando caminos de caricias y besos. Pero en eso nuestros sexos rozaron.

TaeHyung soltó un profundo suspiro al sentir aquel estimulo tan placentero. No podía soportar más la espera, TaeHyung interrumpió las caricias, para dar el siguiente paso. Con una de sus manos, alzo un poco mi pierna izquierda.

—¡Espe...— intente detenerlo, antes de que intentara luchar y poder librarme de este, paso su mano por mi cuello, volviéndolo a alzar, permitiéndole acceso a este, incrustando sus colmillos nuevamente, con eso, logro debilitarme lo suficiente, para que no pudiera luchar en un futuro.

—¿Decías algo? — pregunto sarcásticamente.

—N-no...— trataba de golpearlo con mis manos, pero para él solo parecían simples caricias, ante mi desesperado acto de liberarme.

—Tranquila, tratare de ser delicado. —pude ver una sonrisa maliciosa salir de sus labios. —Hare que recuerdes por siempre esta noche, querida Sun Hee...— susurró él mientras se abría paso.

Gemí sin querer al sentir como la dureza de él entraba tan lentamente, podía sentir como mi intimidad era invadida por completo. Se mantuvo quieto por algunos segundos, mientras yo cerraba fuertemente los ojos, para que las lagrimas no salieran, me dolia mucho, pude sentir una mano, acariciarme la mejilla, secando algunas lagrimas, apreté los puños.

—Tranquila...— susurro.

—Du-duele...

—Solo es al principio.

Empezó besando mi cuello hasta llegar a mis labios, aun podía sentir un sabor un poco salado en mis labios, era por mi sangre que aún se encontraba en los suyos, este continuo mientras entraba completamente, poseyéndome por completo.

—Tae...—susurre su nombre entre sus labios, sintiendo como empezaba a moverse dentro de mí—. ¡No!—gimió mientras volvía a entrar.

—Ngh... no te pongas tensa, que te va a doler más. — exclamo él mientras volvía a moverse.

—N-no...—susurre intentando no perder la poca cordura que me quedaba— No ba-basta, por favor...

Sus embestidas iban aumentando cada vez más, podían sentir aquella sensación de placer proviniendo de TaeHyung, aquel éxtasis tan anhelado acercarse lentamente, disfrutando de cada momento, de cada caricia, de cada beso...

—Tae...—por error se me escapo un gemido audible, él se detuvo, me miro directamente a los ojos y vi como sonrió victoriosamente.

—No hagas eso...— ordeno mientras trataba de recuperar el aliento. —Si vuelves a hacerlo, no podrás levantarte por varios días...

¿Quién rayos es este sujeto? ¡Por favor! Devuélveme al TaeHyung que conozco...

Look at me |BTS| 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora