Epílogo

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— ¿Estas segura de querer conocerme?

—Lo estoy... tan segura como lo que siento por ustedes dos. — reí.

—¿No-nosotros? — él se sorprendió. Yo me arrodille, enfrente de él y lo rodee con mis brazos, abrazándolo fuertemente. — ¿Qu-que haces?

—Una vez escuche por allí a un sabio, que la mejor medicina es el amor y los cuidados.

—¿Y si eso no funciona?

—Sera necesario aumentar la dosis.

—Vaya...— rio.

—¿Qué? — me quede inmóvil por unos segundos, esperando una respuesta de su parte. Si debía de permanecer así o alejarme.

—Ahora comprendo un poco más, porque él te ama tanto...

—¿Y tu?

—¿Y-yo que? — pregunto confundido.

—¿También me amas?

—E-eh...— se sobresaltó. —Pe-pero... tu estas enamorada de TaeHyung.

—¿Creo que todo lo que te he dicho hace unos minutos no ha servido de nada. — rei. —Bien, te lo dire de otra forma entonces...— tome su rostro, y lo acerque hacia mi, a la fuerza, besándolo. Cuando me aleje de él, no podía evitar reir un poco por su expresión, lo habia dejado hecho piedra, creo que la verdad no se esperaba que hiciera eso. —Bueno, si aun asi no entiendes, entonces me ire a casa. Buenas noches Tae...

—¡Hey! — grito.

—Hasta mañana...— exclame.

—No...— respondió fríamente.

Este se movió de una forma tan inhumana y veloz que cuando pestañee me di cuenta de que estaba en mi cama. Recién allí este me soltó.

—Tae... — respire hondo. Algo sorprendida, mire su muñeca y traía las esposas colgando. Parece que fue fácil para él quitárselas. Debería de intentar hacer algunos otros trucos de magia.

Sus ojos se tornaron rojizos vivo, este se fue acercando cada vez más hacia mí. Estaba acorralada. Mire hacia la ventana pero cuando intente levantarme de la cama, TaeHyung me lo impidió.

—Déjame... iré a casa.

—No lo harás. — me fulmino con la mirada. Trague saliva. —No te iras como si nada luego de lo que me dijiste, y con lo que hiciste...— desvió la mirada, note como sus mejillas se sonrojaron un poco.

—Ah...— sonreí. — ¿Estas sonrojado? — le pregunte. —Bueno, parece que si, por favor podrías soltarme, quiero ir a mi casa.

—No te vayas Sun Hee...— volvió a susurrar.

—¿Estas pidiéndolo amablemente? — pregunte sarcásticamente. — Vaya...

—Uh-Uhm...— ahora se sonrojo un poco más, me parecía muy adorable, me recordaba mucho a alguien, sin luna llena, sin cambios, como si los dos estuviéramos aquí, juntos.

—Mañana tengo escuela, tu igual, así que debo de dormir temprano. Vamos, suéltame...

—No...

—Déjame...— insistí.

—Nunca.

—No podrás retenerme para siempre.

—Claro que sí, soy un vampiro.

—¿Qué es lo que quieres de mí? ¿Para qué me dejes ir?

—No creo dejarte ir. Pero ya que insistes mucho, tendré que pensarlo...— este se fue agachando poco a poco hacia mi, podía sentir su respiración en mi cuello, trataba de mantenerme tranquila y serena. —En estos momentos, un beso...— murmuro.

—¿Y si te lo doy?

—Podría dejarte ir, solo por hoy...— susurro mientras ponía uno de sus dedos sobre mis labios.

Decidí acceder, solo espero que él cumpla con su palabra. Apenas estaba conociendo esta personalidad de TaeHyung. Estaba en territorio desconocido. Y con la luna llena.

—Bien, solo un beso...— susurre.

De pronto sentí como la mano de TaeHyung tomaba la mía. Y la otra pasaba por mi espalda, alzándome un poco, los dos nos sentamos sobre la cama. TaeHyung sonrió y luego llevo mi mano hasta la altura de su rostro para luego depositar un casto en beso en ella. Haciendo que un escalofrió recorriera todo mi cuerpo.

—Dijiste un beso... — susurre.

—Sí, mentí...— sonrió maliciosamente acercándose a mí. —No pienso dejarte ir... — sonrió maliciosamente y antes de protestar o decir algo más, estampo sus labios contra los míos.

—Tae...— murmure.

—Te amo...— me respondió antes de que dijera otra palabra. —Y hare todo lo posible para que no te marches de mi lado... ya lo dije ¿contenta?

—¿Tu que crees? — le pregunte sarcásticamente. —Ven y dame otro beso...




¿Fin?

CRB~

Look at me |BTS| 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora