Capítulo 1: El comienzo

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En el capítulo anterior, vimos que el grupo de siete se dirigía a la torre del mizukage, para así poder recibir su misión. Mientras el grupo caminaba, muchos detenían lo que estaban haciendo para saludarlos, desde niños que los veían como heroes, hasta ancianos que los veían como salvadores. Mientras ivan caminando, un grupo de niños se les acerco para poder verlos, cuando uno de los niños fue a hablar, el pelirrojo se agachó a su estatura, revolviendo su cabello y sonriendo, mostró sus dientes como zorro y le dijo:

Naruto:  Que tal pequeño, como te llamas?

Niño: Me llamo Ryuto, señor

Naruto: Bueno, Ryuto, que se te ofrece?

Ryuto: Bueno, me preguntaba, como logró ser un gran espadachín?

Naruto sorprendído por la pregunta, lo mira y le dice:

Naruto: Por que la pregunta?

Ryuto: Bueno, algún día quisiera ser como untedes, así que me preguntaba si podría decirme como lo logró.

Naruto: De acuerdo, creo que te lo podré decir. Mira pequeño, cuando se tiene pasión y empeño en algo, solo se necesita empezar a hacerlo. Cuando crescas, puede que se te haga difícil, pero verás que todo es posible si tu mente así lo quiere. Toma una espada y practica, algún día serás como nosotros si te esfuerzas. Así que te deseo suerte, y si algún día necesitas ayuda, no dudes en pedirla, de acuedo?

Ryuto: Si señor, lo haré, y cuando por fin sea un genin, me gustaría que usted me ayudara con la espada, y así lograré ser como usted.

Dijo el niño muy feliz, antes de volver con sus amigos a jugar en el parque.

El pelirrojo se levantó y siguió caminando, sin darce cuenta de las miradas sorprendidas de los otros seis espadachines. Ignorandolo de momento, siguieron su camino hacia la torre.

Luego de estar caminando por un rato y recibiendo saludos, llegaron a su destino. Subiendo las escaleras, llegaron a una puerta con la palabra MIZU, tocando varias veces, recibieron la confirmación para entrar. Entrando en la oficina, vieron a una persona un poco (muy) bajita, detrás de un escritorio firmando una gran torre de papeles. El chico detras de esa montaña de papeles era Yagura Karatachi, uno de los más fuertes Mizukages, si no el más fuerte, logrando controlar el agua a su voluntad con tan solo pensarlo, con ayuda de su bastón, con el cual pelea de forma increible. Pero lo que lo hace alguien increiblemente fuerte es su total control sobre su biju, el Sambi, o tres colas, una tortuga  gigante con un caparazón indestructible, haciendola casi intocable e invensible. El Mizukage mira hacia alfrente justo cuando se sierra la puerta. Al mirar al frente sonríe al ver a su mejor equipo de pie ante el. Justo cuando estaba por hablar, se fija en la sonrisa que llevaba el pelirrojo en el rostro, así que extrañado miró a los demás, quienes se encogieron de hombros ignorando la silenciosa pregunta. Siguiendo con lo que va a decir:

Yagura: Naruto, que bueno que llegaste. Les tengo una misión.

Naruto: Cual sería la misión, mizukage-sama?

Yagura: Su misión es ayudar a Konoha en su guerra contra Kumo.

Naruto, sorprendido le dice: En serio nos mandarás a una guerra con la que no tenemos nada que ver?

Yagura: Esta sería una gran oportunidad para obtener una alianza con Konoha. Sabes que tendríamos mejor ruta de comercio con otros países si pasaramos por el país de fuego sin altercados en nuestra contra.

Naruto lo pensó, y se dio cuenta de que su amigo y Mizukage tenía razón. Así que aceptó la misión y se fue de la oficina a empacar. Cuando llegó a su casa se encuentra a su amiga Haku esperándolo en la puerta. Sonriendo se dirige a ella y le dice:

Naruto: Hola Haku-chan, en que te puedo ayudar?

Haku: Hola Naruto-kun, me preguntaba si querías hacer algo, como ver una película o comer conmigo, ya que estuve de misión y papá está preparando su equipaje para su misión mañana.

Naruto: Claro por que no, además estoy con energías, así que no me dormiré temprano.

Haku: De acuerdo, nos vamos?

Naruto: Claro, vamos, hace tiempo que no nos veíamos por nuestras misiones, así que sería divertido poder hablar contigo un rato.

Así, ambos se fueron a comer y luego al cine pasando una velada agradable entre los dos, hasta que se hizo de noche así que Naruto, llevó a Haku a casa, donde luego de despedirce, Haku le dió un beso en la mejilla y se fue rápido hacia su cuarto, dejando a un Naruto sorprendido y sonrojado en la pueta tocando el lugar del beso con una sorisa boba, hasta que decidió irse a casa no sin antes despedirce de Zabuza que estaba viendolo con enojo y ganas de matarlo, cosa que ignoró y se marchó a dormir ya que al final de su velada le dió un poco de sueño. Justo en el momento de acostarce, sonrió pensando en lo ocurrido hace unos minutos, así callendo dormido preparandoce para su misión en la mañana, pensando en que tendría que pelear en otra guerra, cosa que le preocupó, pensando en que quizás no volvería a ver a Haku, cosa que lo sonrojó al pensar en eso, así durmiendose por fin.

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Espero que les gustara este capítulo. Nos veremos luego en el siguiente. Y que no se les olvide su buen comentario. Hasta luego.

El Zorro Asesino de la NieblaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora