11

2.8K 428 144
                                    

YoonGi cometió un gran error después de que besó a JiMin, y se dio cuenta cuando volvió a su casa después de haber estado todo el día hablando sobre vestuarios y las coreografías con el amigo del bailarín.

Estaba recostado en su cama pero no tenía sueño, quería seguir hablando con JiMin sobre esa vez que había tenido que bailar disfrazado de patito para un acto de su escuela, entonces fue ahí que descubrió el error que había cometido...

Él aún no tenía el número de JiMin.

Así que esa mañana estaba sentado en el banco del piano, tocando cosas al azar para matar el tiempo. De repente sintió dos brazos abrazándolo desde los hombros por atrás y vio dos pequeñas manos entrelazándose en su pecho.

-Buenos días, hyung...- la voz dulce de JiMin lo hizo sonreír y dejó de tocar el piano para acariciar las manos que acariciaron su pecho con suavidad.

-Buenos días, JiMin-ah - el mayor se dio la vuelta  y volvió a entrelazar sus manos sin dejar de sonreír, algo que JiMin provocaba seguido —Sabes... Descubrí que ambos cometimos un error—

Se levantó del banco del piano mientras el bailarín lo miraba confundido, esa expresión se le hizo tierna y le dieron ganas de besarlo, pero se contuvo.

—¿Qué error, hyung?—

—Pues, no tengo tu teléfono, y quiero seguir hablando contigo antes de dormir y no puedo—

El bailarín se sonrojó y se mordió el labio inferior antes de volver a mirarlo

—Además, si quiero invitarte a salir tendría que avisarte todo cuando te vea aquí — siguió hablando, admirando lo hermoso que lucía JiMin sonrojado. —Y es mas fácil para mi decirte que te ves hermoso sonrojado por chat, es que soy un cobarde —

—Yah hyung~— desvío la mirada de nuevo y soltó sus manos —Se lo daré pero ya no diga eso— pidió riendo nervioso.

—Claro que no, ahora lo escribiré —

Mientras JiMin negaba con la cabeza sin dejar de sonreír y buscaba su teléfono para pasárselo a YoonGi, los alumnos fueron entrando al salón y haciendo burlas sobre los rojos cachetes de JiMin que solo empeoraban su sonrojo.

Uno de los últimos en entrar fue JungKook que hablaba animadamente con Bora sin prestar atención a JiMin, el centro de las burlas de todos. Anteriormente lo hubiera hecho y estaría defendiendo al profesor de baile  burlandose de sus compañeros y ganándose mas risas, pero ahora su cabeza se encontraba en otro lado.

—Bora, estoy muy nervioso ¡No me ayudas diciendo eso!— se quejó el pelinegro con la chica que solo reía al verlo así.

—¡Si te ayudo! Te estoy diciendo que practiques porque TaeHyung estará mirando esta clase—

—¡Callate, Bora! ¡No me interesa si mira la clase!—

—¿Debería irme entonces?— la voz grave a sus espaldas lo hizo paralizar y Bora contuvo la risa y se alejó lentamente hacia atrás, dejando a su amigo con el castaño. JungKook volteó y miró al chico que le sonreía

—Es una pena, me encantaría verte bailar...— JungKook se sonrojó fuertemente y el castaño abrió los ojos en grande y luego negó con la cabeza, notando lo que había dicho —D-Digo, verlos, a todos. Todos parecen ser muy buenos bailarines ¿no? —

—Sí...todos nos esforzamos mucho — respondió JungKook sonriendo suave.

—Entonces me encantaría confirmar lo que dices— volvió a sonreír el castaño

—Lo haré bie- lo haremos...lo haremos bien— 

Y llámenlo loco, pero cuando JiMin y YoonGi comenzaron a llamarlos para comenzar, él vio como TaeHyung le guiñaba un ojo.

Tu tocas, yo bailo [YoonMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora