Your Ghost. [Kim Namjoon y tú. 1ra Parte].

¡La tengo!.

Aiko y April caminaban por las calles de la cuidad buscando una joyería donde pudiesen conseguir el pedido de Namjoon. El dinero no era problema, podrían comprar una pulsera hecha exclusivamente de diamantes y ni siquiera les importaría el precio.

El problema era que ningún accesorio las convencía del todo, Namjoon había descrito la pulsera y la enorme ilusión que él tenía por regalarle algo a ________ en la ya muy, muy cercana fecha festiva.

Pero simplemente las joyerías tenían accesorios exageradamente extravagantes y eso tampoco era de su agrado, además Namjoon pidió algo bonito y sencillo, que no llámase atención innecesaria. Algo que ________ pudiese usar con total seguridad y que nadie intentara quitársela de la muñeca.

-Quizá estamos buscando en lugares con mucho glamur.-dijo April al salir de otra joyería.

-Son una porquería, sólo una persona que quisiese parecer una jodida lámpara compraría eso.

April soltó una carcajada.

-Hablo en serio, brillan con la más mínima cantidad de luz, no quiero pensar lo que sucederá si salgo en pleno día con esas mierdas puestas. Tal vez hasta pierda la vista por tanto brillo.

-Ya, ya, todavía hay más opciones de tiendas. Alguna debe tener lo que buscamos.

-A la mierda, compremosle un Rolex y listo. Asunto resuelto.

-Por supuesto que no le compraremos un Rolex, Aiko.

-¿Por qué no?.

-Cállate y sigueme. Tenemos que conseguir esa pulsera, mañana es la cena y Namjoon la quiere para ese momento. ¿Entiendes, cariño?. La tendremos sí o sí.

-Está bien.-suspiró.

Ambas caminaron un par de calles más. Tenían su objetivo muy bien fijado, y al menos intentarían conseguir algo que se acercara a las expectativas de Namjoon. 

-Entremos aquí, Aiko.

-Voy a asesinar a los empleados si no hay nada como lo que buscamos.

-Odio decirlo, pero concuerdo contigo.

Las dos chicas entraron a la joyería, que a comparación de las anteriores, era más pequeña y menos glamorosa, así que entraron con la esperanza de encontrar lo que buscaban.

-Bueno, éstas mierdas están más decentes.

-Tal vez tengamos mejor suerte aquí. Muy bien, veamos.

Se adentraron más en la tienda. Y durante unos minutos miraron con atención cada repisa y estante de la joyería.

-¡Aiko, la encontré!.

April sonrió ampliamente ante la pulsera que encajaba con los deseos de Namjoon. Estaba a punto de pedirle a una de las empleadas que se la dieran, pero otra chica se entrometió.