026/ Ride

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Desperté demasiado temprano, aún después de haber llegado tarde a dormir. Ninguno de los Oleff estaba despierto, así que deje una pequeña nota sobre mi escritorio, diciendo que no se preocuparan por mi, pues sólo saldría a dar un paseo.

Un paseo, un simple paseo como siempre, mi vida sólo consiste de los paseos, mi vida consiste, nunca he tenido un rumbo fijo, sólo soy un alma volátil en medio de un eterno silencio.

Me pare justo en un pequeño parque, viendo a todas las familias felices divertirse. Tome una bocada de aire y seguí andando.

Metí mis manos a mis bolsillos, tenía tiempo sin usar esta chamarra. En las bolsas interiores encontré un cigarrillo, ¿Cuanto lleva esto aquí?, Busqué en la otra y encontré el papel de la dirección que me había dado Marie. Estos días he evitado constantemente el recuerdo de mi madre, quería mantenerme anestesiada de la realidad, pero ahora es momento de enfrentar mis problemas.

Llevaba aproximadamente unos 20 dólares, pues el demás dinero lo había dejado en la casa de Wyatt, así que me aventure a tomar un taxi.

-¿A donde la llevó señorita?-Dijo el conductor amablemente.

-A está dirección- dije entregándole el papel y recargandome en el parabrisas.

Revisé mi celular el cual tenía miles de llamadas pérdidas de mi padre y una de Finn, realmente sólo bloqueé el celular, pues quería enfrentar esto, sola y conciente.

Llegamos dijo el conductor, frenando el coche y devolviendo el papel que le di.

-Serian 16 dólares- dijo el conductor, estaba conciente de que había sido un viaje largo, así que no reproche y pague sin problema. El único problema sería que no tendría efectivo para regresar.

Salí y busqué la casa, era una pequeña casa cercada, localizada en un barrio muy pobre de Los Ángeles.

La casa estaba cayéndose de sucia y vieja, así que abrí la reja y caminé hasta el pórtico. Mis piernas estaban temblando como nunca en la vida, mis piernas me estaban fallando, como nunca.
Pero toque y abrieron la puerta.

Era una mujer joven con un pequeño en brazos estaba hecho en brazos, quede embobada ante su presencia.

-Oye si le debo dinero a tu madre o algo, dile que después le pagaré. -Dijo casi apuntó de cerrar la puerta.

-No espere, en realidad busco a Cloe, mi madre. -Dije con la esperanza de que me abrazará.

-Pues lamento decepcionante niña, pero aqui ya no vive, ella me regaló su casa después de encontrarme en la calle con mi bebé. Lo siento pero es lo único que puedo decirte, la única persona que te puede dar más información es la vecina de a lado. Ahora si me permites tengo un bebé que alimentar- dijo antes de cerrar la puerta.

Corrí hasta la casa vecina y toque algo desesperado.

-¿Que sucede?¿Por que tocan así?- dijo una anciana mientras salía de su hogar.

-Perdon, es que necesito saber información sobre mi madre, Cloe.

La anciana me miro unos segundos y después me abrazo con tanta fuerza que podía escuchar su corazón palpitar.

-Ven, entra por favor.

Nos sentamos en su mesa, mientras me servía un poco de ti.

-No puedo creer que estés aquí, Beatrix, tu madre hablaba de ti todo el tiempo.

-¿Enserio?

-Si, me contó innumerables veces el día que naciste y lo feliz que estuvo durante su embarazo, tanto que incluso me lo se de memoria. Ella era muy joven cuando llegó aquí, ella comenzó a trabajar en un restaurante cercano, trabaja incluso turnos dobles los fines de semana, estaba ahorrando como loca, siempre tan atenta, ella tenía una  carrera por lo que sabía, pero nunca la ejerció, hasta el día que... Que...

-¿El día que ,que?

-El día que tú padre le dijo que estabas muerta. Tu padre la había hechado prácticamente de su casa, así que mudo a Los Angeles, ella creyó que aunque tu padre te había arrebatado de sus brazos, ella juntaria lo necesario para traerte con ella. Pero un día recibió una llamada por parte de tu padre, diciéndole que habías muerto. Ella murió por dentro, asi que todos los ahorros que tenía para ti los invirtió en su futuro, creo sus cadenas comerciales, incluso estaba tan apegada a la idea de que hablas muerto, tanto que incluso mando a construir un altar enorme en un cementerio. Ella me regularmente, pero estos días no lo ha hecho, no se si tiene una nueva familia o nuevos hijos, pero eso no debe ser impedimento para que tu la busques y ella sepa que estás viva.

-¿Por que hizo eso mi padre?

-Por rencor, rencor a ella. No dudo que tu padre te quiera, pero sin duda el no tiene derecho  alejarte de tus padres.

-Gracias, volveré pronto, señora?

-Dime Glenda, si necesitas algo vuelve pronto linda.

-Gracias lo prometo- mi impulso fue grande, pues hasta el momento ella es la persona más cercana a mi madre así que la abrace por mi voluntad.

Al salir de la casa, note que no tenía dinero para regresar y no sería una abusiva con la señora, así que le marque a Jack, pero no me contestaba, a Finn no quería preocuparlo, Wyatt iría con su familia a una galería de arte, no quiero interrumpirlo, ¿A quien? Tal vez haya una persona que pueda contestar.

𝕯𝖆𝖉𝖉𝖞 𝕴𝖘𝖘𝖚𝖊𝖘-𝓕𝓲𝓷𝓷 𝓦𝓸𝓵𝓯𝓱𝓪𝓻𝓭Donde viven las historias. Descúbrelo ahora