Proyecto Alfa & Omega (EXO)

Under Control (ChenMin)

Un omega rebelde, merece ser puesto bajo control.

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MinSeok jadea y contiene cada sollozo que se apodera de su garganta, aprieta la tela en sus puños y se muerde los labios para no demostrar nada, no está dispuesto a ser sometido o a que su diversión se acabe tan pronto.

—No vas a rendirte, ¿cierto?

—Tal vez tú no eres tan dominante cómo...—otro azote en sus nalgas y MinSeok se traga sus gemidos—Piensas...

—Joder MinSeok, me vuelves loco.

—¿Y eso es bueno?

—Es maravilloso.

JongDae lo azota cinco veces más, no hay delicadeza en las palmadas y sus nalgas ya son de un color rojo brillante, pero MinSeok se niega a gemir o a demostrar cuánto le gusta estar bajo el control de su alfa, el rebelde omega se niega a admitir cuan caliente lo pone ese aroma a tierra mojada y menta.

En un mundo ideal, los omegas son sumisos y obedientes.

MinSeok es todo lo contrario.

Gusta de provocar a JongDae y dejarlo con las ganas de enterrarse hasta el fondo de su culo, también le gusta excitarlo hasta el borde y salir corriendo, especialmente en el sexo oral para luego reírse de los asuntos que su pareja arregla en el baño.

Y no es que JongDae no tome represalias por tanto, es que también le gusta sentirse así, que jalen y tiren de su cordura hasta el límite, para después poner todo su dominante ser al servicio del placer.

Pero MinSeok es necio hasta decir basta.

El omega se niega a gemir, optando por morder sus labios y la almohada, la lengua de JongDae se cuela en su entrada, las fuertes manos del alfa le estrujan las nalgas y a veces, le succionan los testículos , todo mientras JongDae emana más de su masculino aroma.

—MinSeok, por favor, déjame oírte...

—N-No...

—Lo pedí por favor, después no te quejes.

Y aunque MinSeok quisiera, no pudo.

La dura erección de JongDae colándose con fuerza en su ano le roban cada sonido y aliento de sí mismo, el alfa sale y entra de nuevo por repetidas ocasiones, impactando fuerte contra su ya dolorido trasero, MinSeok sigue mordiendo la almohada y apretando las sábanas bajo él, no va a ceder.

—MinSeok...—la voz de JongDae hace estragos en su sensible anatomía—Gime para mí cariño, me encanta saber que te gusta cómo te estoy follando—un empuje más, un espasmo en su omega y un jadeo ahogado—Me encanta escucharte cuándo pides más, es hilarante escuchar tu voz quebrarse, así que...—toma al chico de la cintura—Grita mi nombre...

Las embestidas se vuelven violentas, JongDae toma con fuerza la cintura de MinSeok, empujando demasiado dentro del chico, sus testículos chocan contra el periné de su omega y hasta sus muslos se ponen rojizos en cada nuevo impacto, adentro es tan caliente y apretado que el alfa realmente se desespera y envidia a la puta almohada por tragarse la voz de su amado.

Muy a su pesar, sale del interior de MinSeok y le da la vuelta, gruñendo por la deliciosa imagen de su pareja con los labios rojos, hinchados y el pelo pegado a su frente, MinSeok es hermoso.

Coloca a su omega de lado, levantando una de sus piernas en su hombro y de nuevo, clavándose en su interior con fuerza, llegando al punto dulce del omega y embriagándose con el aroma a frutos rojos de su hermoso chico, más, lo que tanto esperaba.

MinSeok grita, grita por más y se empuja contra la ingle de JongDae, buscando más fuerza y profundidad, quiere sentir a JongDae hasta lo más profundo que su cuerpo pueda ofrecer.

Todo es salvajismo puro, los sonidos de sus cuerpos chocando, la cama golpeando la pared, los gruñidos de JongDae y los meros aullidos de placer de MinSeok.

Tan embriagante que ninguno lo soporta más.

El omega jala al alfa, reclamando sus labios y enredando sus piernas en la cintura ajena, las embestidas se vuelven erráticas y cuándo el orgasmo se avecina, ladea el cuello y es mordido, liberando toda la adrenalina en su cuerpo con el nombre de JongDae saliendo en un gemido erótico.

Su interior es completamente llenado, el semen de JongDae se esparce en su interior y el nudo en su pene le recuerda a MinSeok a quien le pertenece.

—MinSeok, en serio tú eres genial, me haces perder el control...

—No te pedí que lo tuvieras, me encanta cuando me tomas salvajemente, joder, fóllame toda la noche...

Y JongDae obedece, tomándose unos segundos para poner a MinSeok en su regazo, ni necesita pensar en otra cosa, su omega es lo suficientemente excitante para ponerlo duro.

Siendo alfa y omega, ninguno sabe quién está bajo el control de quién.