Capítulo 13

30 5 0
                                    

Seokjin recordo en medio de su sueño, y sientiendose descansado creyo pertinente el levantarse a ayudar a su madre a preparar el desayuno; se extraño al sentir un cuerpo al lado suyo, pero pronto recordo que Yoongi habia llegado en la noche, luego de haber tenido una fuerte discusión con su padre y él sabiendo que el menor buscaba consuelo en su persona aunque no se lo dijera, le ofrecio quedarse a dormir allí.

El rubio se quedo observando al chico, mientras se cuestionaba varias cosas de la vida de su novio, que le hubiera gustado que este no tuviera que pasar y sintiendose muy impotente por no poder hacer nada para ayudarle. Disipo sus pensamientos dejando salir un suspiro y beso la sien del pelirosa, acariando luego el mismo lugar con su mano, cosa que el chico agarro y aprisiono entre su pecho y el brazo.

—¿Qué haces despierto tan temprano? —Le dijo con la voz más ronca de lo normal debido al sueño y se mantuvo con los ojos cerrados, recordandole a Seokjin -y haciendolo reir por eso- su logica de que si los abria, era mas facil que el sueño lo abandonara y no era un riesgo que le gustara correr.

—¿Qué te hace pensar que es temprano si ni siquiera has abierto los ojos? —Contesto burlon.

—Mi instinto me lo dice. —El rubio intento soltar su mano para buscar el celular y ver la hora, pero Yoongi se lo impidio, por lo que lo empujo levemente haciendolo quedar boca arriba y practicamente apoyandose en el pecho de su pareja -que se negaba a soltar su mano- rebusco el celular bajo la almohada con la otra.

—Amor, son las ocho de la mañana. —Dijo a modo de reclamo, una vez comprobo la hora.

—¿Quién en su sano juicio se levanta a las ocho de la madrugada un sabado? —Sólo entonces el pelirosa se digno a abrir los ojos.

—Yo, mamá, papá, todos en esta casa a excepción de Jungkook.

—Y por eso es mi cuñado favorito. —Dijo con obviedad, apresando su brazo entre los suyos y volviendo a cerrar los ojos.

—Es el unico cuñado que tienes. —Pero el menor lo ignoro. —Vas a levantarte. —Intento safar su brazo pero le fue practicamente imposible hacerlo sin trampas y por ello termino pellizcando el pecho de su novio, que no sólo aflojo el agarre sino que volvio a mirarlo, ahora indignado. —Hay que levantarse Yoongi. —Pero el otro sencillamente se le quedo mirando y él, un poco exasperado, apreso el cuerpo del menor con sus piernas y recargo su peso en las caderas ajenas, tomando por el cuello de la ropa al pelirosa. —¡Arriba! —Yoongi le mostro una sonrisa gatuna y procedio a contestarle.

—Abajo. —Dijo con doble sentido, haciendo referencia a la posición en la que estaban, y por mucho que él quiso mantener la seriedad, termino soltando una sonora carcajada.

—Pervertido. —Lo acuso dandole un golpe en el pecho. —Mis padres y mi hermanito estan en casa.

—Pero si no he dicho nada malo, eres tú quien lo ha mal pensado.

Finalmente logro hacer que Yoongi se levantara a las ocho y veinte, Hye Young ya tenia casi listo el desayuno para entonces, asi que unicamente la ayudaron a colocar la mesa.

—¿Deberiamos despertar al bebé? —Su madre hizo la pregunta que él tenia en mente, una vez los platos estuvieron sobre la mesa y cada uno en su puesto. —Ya que estamos todos aqui, deberiamos comer en familia.

—Si quieres ser la causante de su mal humor, ve a despertarlo. —Le contesto su padre a lo que la mujer hizo una mueca.

—Yoongi lo despertará. —Ofrecio él en su lugar.

—¿Yo? —El nombrado lo miro pidiendo una explicación y lo que obtuvo como respuesta fue una sonrisa de su parte.

—Asi es, sabras lo que se siente levantar a alguien que no pone de su parte. —El pelirosa lo miro boquiabierto.

El Dolor En Tus OjosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora