NARUTO " Estudiante De La Serpiente " Traducción

Capitulo 4

'Algo no esta bien. Esos no son insectos normales de Aburame; Los que solo comen chakra, no pican y muerden. Estas cosas en realidad están hiriendo a Naruto. Pensó Inoichi, tan horrorizado como él y su hija miraban. Ino trató de ayudar a aplastarlos, pero su padre la tomó de la mano. "¡No, no! Esos insectos también te lastimarán".

"¡Usa el spray tou-chan!" Ino suplicó.

"No puedo ahora, Naruto también se envenenaría".

Naruto gritó de nuevo y su cuerpo brillaba con un ligero rojo. Los insectos retrocedieron un poco, pero no abandonaron su cuerpo ni se detuvieron por completo. Incapaz de soportar más el dolor, Naruto hizo lo único que cualquier niño en su situación haría: corrió. No sabía a dónde iba o qué haría cuando llegara allí, pero tenía que correr. Los de Yamanaka los siguieron.

"¿Crees que podría gustarle esto, Jiisan?" Anko preguntó mientras señalaba una espada de juego en exhibición en una ventana.

Orochimaru estaba a punto de responder, pero cualquier respuesta murió en su lengua cuando escuchó un grito familiar en la calle. Anko también lo escuchó y perdió completamente el interés en la pregunta.

Ambos miraron por la calle con la esperanza de que estaban equivocados. Vieron a un niño pequeño corriendo con un enjambre de insectos que se aferraban a él. Unos pocos transeúntes trataban de vencer a los insectos, pero se movieron solos lo suficiente para revelar quién era el niño. Una vez que las personas vieron, o miraron para otro lado, o lo golpearon por una razón diferente.

Orochimaru, Anko y Kogyoku se apresuraron a ayudarlo. Se sintieron un poco aliviados cuando un agente Anbu se acercó al chico e hizo un jutsu con una bola de fuego. Los insectos huyeron del chico dejando a Naruto para tomar la peor parte del ataque. Orochimaru y Anko estaban horrorizados por esto, y más aún al ver que Anbu no parecía arrepentido, ni siquiera tentado a apagar la llama. Aunque Orochimaru vio esa última parte más que Anko.

Orochimaru usó un suave jutsu de viento para apagar la llama mientras Anko gritaba al Anbu, llorando de ira. "¡Joder! ¡Te lo perdiste!"

"Eso depende de hacia dónde apuntaba".

Anko jadeó y luego comenzó a golpear las piernas del ninja enmascarado, a lo que él reaccionó dándole una patada. Ella no se desanimó por esto y trató de atacar de nuevo, pero él simplemente abandonó el área, sin ver ninguna razón para quedarse más. Pero no antes de que Kogyoku lograra darle un mordisco doloroso en su pantorrilla derecha.

Antes de que los insectos pudieran atacar de nuevo, Orochimaru usó un jutsu de fuego como se esperaba y fueron completamente incinerados. Miró a Naruto y estaba muy enojado, pero no a Naruto por su cuenta. El chico rubio tenía quemaduras de segundo grado casi en todos los brazos y la cara, con las áreas vestidas que solo tenían quemaduras de primer grado y respiraba con dificultad.

"¿Otouto? ¿Va a estar bien, jiisan?" Preguntó Anko llorando, al borde de la histeria.

Orochimaru lo recogió con cuidado. "Lo estará. Sé cómo ayudarlo mejor. Anko-chan, ponte de espaldas. Kogyoku, ve por Sango". La serpiente morada asintió y se alejó mientras Anko se encargaba de los hombros del sannin de la serpiente. Luego se dirigió a un lugar seguro para todos ellos.

Algunos civiles empezaron a preguntarse si tal vez el único sannin que todavía estaba en la ciudad había sido empujado demasiado lejos.

'Eso es. He tenido suficiente de esto. Minato debe estar dando vueltas en su tumba. Orochimaru enojado pensó mientras entraba a su casa y colocaba a Naruto en el sofá. El chakra del kyuuubi ya estaba sanando al joven. Y afortunadamente para él ya estaba inconsciente. Las dos serpientes entraron en la casa unos momentos después y también se sentaron en el sofá.

Anko, con sus mejillas llenas de lágrimas y sus ojos rojos, se cernía sobre la figura de su hermano como un perro guardián. "Jiisan, ¿qué va a pasar con él?"

"Estará bien, Anko-chan. Ya está sanando y debería estar como nuevo esta noche".

"¿Qué deberíamos hacer con ese bastardo que lo quemó?" Anko preguntó, sonando un poco más enojado ahora. Orochimaru nunca se molestó en imponer un lenguaje apropiado para los niños, ya que de todos modos escuchaban cosas ofensivas casi a diario.

"Nos ocuparemos de él. Y también de quien le envió esos bichos. Eso tampoco fue natural. Pero primero, tengo algo más grande en mente".

Anko parpadeó. "¿Como qué, Jiisan?"

"Esto ha durado demasiado tiempo. Sarutobi-sensei no puede negociar su salida. Voy a asegurarme de que esto se detenga de una vez por todas". El sannin serpiente declaró con hostilidad y veneno, y tal vez un poco de alegría por la última idea.

Anko sonrió. "¿Puedo ayudar?"

"Absolutamente. Pero tenemos que actuar esta noche y no puedes decirle a un alma". Él le dijo, a lo que ella asintió. "Bien, ahora empaca todo lo que tienes. Vamos a hacer un pequeño viaje".

"¿Cuánto tiempo?"

"Tiempo suficiente."

Anko parecía preocupado por tener que dejar su hogar y seguir siendo amigos por quién sabe cuánto tiempo. Pero después de mirar a Naruto una vez más, supo que era cuestión de tiempo antes de que eso también le pasara a ella. Y Orochimaru nunca la había engañado antes. "Estaré listo en un santiamén". Ella le dijo antes de dirigirse a su habitación.

"No será tan fácil, Maestro Orochimaru". Kogyoku ha comentado.

"Oh, lo sé. Es por eso que voy a presentar un gran espectáculo para Konoha y también hacer un poco de daño". El pálido sannin respondió.

"¿Como que?" Preguntó Sango.

"Bueno, digamos que Konoha aprenderá lo que sucederá cuando intentes acorralar una víbora". Les dijo con una risa siniestra. "Y lo mejor de todo, ya que esa reunión con los representantes de Kumo es esta noche, pocos estarán disponibles para interferir en mi pequeño plan".

La noche llegó a Konoha, y sería una noche que le dio forma a su futuro por tiempo indefinido.

La mayoría de los representantes de los clanes estaban en una reunión con visitantes de Kumo, con la esperanza de organizar una especie de alianza. Las calles estaban desiertas cuando la gente se iba a casa a dormir con la noche Anbu haciendo sus rondas. En general, nada siniestro ni inesperado.

Sarutobi había llamado a un breve descanso durante la larga discusión con los ninjas extranjeros para que todos pudieran estirar las piernas y usar el baño si fuera necesario. Mientras que él mismo tomó un trago de un baño, un agente de Anbu se le acercó. "Hokage-sama, el fuego acaba de estallar en la residencia de Orochimaru-sama y en el departamento de investigación y desarrollo".

Sarutobi frunció el ceño. 'Ah mierda. Esto acabará mal, solo lo sé. "Gracias por alertarme. Dígales a mis asesores y jefes de clan que revisaré personalmente este asunto y que no se confirmará ninguna decisión sin mi presencia. Espero que esto no tarde mucho". Luego, el anciano se metió en su equipo de combate y se dirigió a la casa de Orochimaru, con la esperanza de resolver a su estudiante antes de que actuara de manera precipitada. No es que no estuviera fuera de lugar, admitió.