ELOISE

Eloise Capitulo 3 -Chris-

Después de dicho ancontecimento nuestra rivalidad se hizo más fuerte, no perdíamos tiempo en odiarnos o hacernos la vida imposible.  Mi padre la admira creo más que a mi,  bueno sinceramente dudo que admire algo de mi. Para él simplemente soy una irresponsable que solo se ocupa de andar viviendo los placeres de la vida y le doy el crédito porqué no se equivoca. No me interesa ser la futura dueña de su grande y prestigiosa empresa, nací en mundo de riquezas que trabajen los pobres yo tengo todo lo que quiero en la vida.  En cambio Rouse idiotamente está tras sus pasos y trabaja para él, es que la niña no deja de fascinarse con el hecho de querer ascender a lo más alto en la empresa por los momentos creo que es administradora. Es impresionante escuchar como mi padre le dice "Hija" a mi simplemente me dice Elo o Eloise creo que dejo de llamarme hija cuando cumplí los diez años.

Si para algo nacimos Rouse y yo es para no soportarnos y para hacer que el sentimiento de odio hacia la otra aumente cada vez más

Regreso al presente y decido volver a mi auto para ver el amanecer, no es la primera vez que lo hago. El desvelo es mi fiel amigo. una vez que deleito mis ojos con semejante belleza de la naturaleza decido ir a mi habitación para descansar.

- Mi niña despierta -siento una suave caricia en mi cabeza-Elo arriba por favor...

-- Nana déjame descansar, que en serio tuve una noche realmente agotadora -digo con la voz amortiguada por la almohada-

-  Ya son las dos de la tarde y tu padre esta en el estudio principal de esta hacienda esperando que bajes,  tiene algo importante que comunicarte -levanto mi rostro-

-- Seguro es lo mismo de siempre, querer que me haga cargo de la empresa y mi respuesta sigue siendo la misma ¡No! - dije tajante y volví mi rostro a la almohada-

- No tardes en bajar por favor. Hazlo por mi -sentí que beso mi cabello para luego salir de la habitación. Sonreí y volví a quedarme dormida-

<> Joder Eloise. Levántate de una puta vez que no tenemos todo el día para esperar por ti -¡odio su voz!-

-- Que te den Rouse. Déjame descansar, idiota. -la escuche gruñir. Levante mi rostro y no la vi en la habitación. Sonreí volviendo a mi posición-

Minutos después sentí agua helada caer sobre mi piel y la risa de Rouse.

-- Te esperamos abajo Loisito, solo cámbiate ya no es necesario que te duches... -al ver que se iba de la habitación le grite deteniendo su andar-

-- ¡Eres una grandísima hija de puta! -hizo un gesto de fingida ofensa-

<> Respeta a mi madre que es una santa y además tu nana favorita -su risita burlona se esfumó por completo al ver que me levante furiosa de la cama dispuesta a ir por ella- Ni se te ocurra acercarte -dijo nerviosa-

-- ¡Corre por tu vida imbécil!

Basto y sobro que hablara para verla correr como una cobarde, gritando. No dude en seguirla, soy mas rápida que ella. Cuando logré alcanzarla no sé de donde saque tanta fuerza que la cargue sobre mi hombro,  quizás fue la misma adrenalina del momento, sin hacerle caso a sus gritos y golpes en mi espalda camine hasta la piscina

<> ¡No Eloise! ni se te ocurra. ¡No se nadar! -fue lo último que escuche cuando la aventé a la parte más honda de la piscina-

Se perfectamente que no sabe nadar y siempre que entraba a la piscina se quedaba en la parte menos honda, solo quería darle un susto para que en su puta vida se le volviera a ocurrir despertarme con agua fría, cuando detalle que no podía luchar mas y se comenzaba a hundir me lancé a la piscina para ayudarla a salir, no es que me importe su bienestar. Aunque no la soporte mi intención no es matarla mi nana no merece semejante dolor. Se aferró fuertemente a mi mientras trataba de recobrar el aire tosiendo torpemente. Una vez al salir no dudo en irse encima de mi y comenzar a golpear mi pecho diciendo palabras que quien viera su cara y escuchara dudaría que de su boca salieran semejantes barbaridades

- ¿Hasta cuando ustedes dos? -Pregunto mi padre molesto, Rouse se separó inmediatamente de mi-

<> Lo siento mucho don Esteban -dijo con vocecita de niña regañada ¡Manipuladora de mierda! 

- Ya son adultas deberían comportarse como tal -Me miro con reproche-

-- Para ti siempre soy yo -le dije en tono tranquilo- lamento decepcionarte una vez más pero mi alma de niña nunca se irá.  tu hija Rouse está bien, es tan torpe que se cayó en la piscina y yo solo fui a su rescate

<> ¡Eso no es cierto! -grito molesta- tú me lanzaste...

-- Carajo sigues siendo la misma chismosa desde que eras una niña estúpida...

<> La estúpida eres tú, eres una inmadura que...

-- Mira quien lo dice. Tú eres una...

-- ¡Basta!  -Alzo la voz mi padre haciéndonos callar- vayan a cambiarse. Que sea rápido tengo cosas por hacer.

-- Permiso -hablo Rouse a mi padre para luego pasar por mi lado chocando fuerte su hombro contra el mio-

-- Claro y la inmadura soy yo -dije en voz alta- Debí dejar que se ahogara

- ¡Es para hoy Eloise! -detesto que me regañe-

-- Tengo 27 años. deja de regañarme como si fuera una niña -le digo molesta-

- Pues aprende a comportarte como una mujer, deberías no solo demostrarlo mientras te revuelcas con otra en una cama -sus palabras en vez de ofenderme me hicieron reír-

-- La homofobia envenena el alma querido padre, además tener a una mujer en la cama gritando de placer es la mejor maravilla del mundo, tú mejor que nadie lo sabe yo soy muestra fiel de tus actos con mi madre aquella mujer que no dudo en abandonarte -su rostro se puso rojo de la rabia y seguro que de vergüenza también-

- Ve a cambiarte ¡Ya!  te espero en el estudio principal Eloise  -Se fue totalmente furioso-

-- Que bonita manera de empezar el día.  -Suspire y me dirigí a mi habitación-

Me tome todo el tiempo del mundo. Sabia que me esperaban, así que una vez lista decidí bajar pero en vez de ir al estudio principal me fui a la salida, me subí en mi auto dispuesta a partír del lugar. Que le den a mi Padre y a Rouse, a mi nana no porque de verdad es una santa, me daba pesar con ella que seguro mantenía la esperanza de que me presentara pero tengo cosas más importantes por hacer... 

-- Es hora de ir por una excitante aventura Eloise. no hay nada mejor que una buena dosis de sexo femenino. que lo demás se vaya al carajo -Le hable a mi rostro reflejado en el retrovisor de mi auto, lo encendí y pude detallar que Rouse se encontraba en el umbral de la puerta, Sonreí con burla, le saque mi dedo medio y sin más a toda velocidad salí de la hacienda.