Eloise Capítulo 26

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Eloise -Chris- 26

Rouse

Digamos que estoy un poco aterrada, yo no puedo estar sintiendo algo más que placer por Eloise. Han pasado varios meses y simplemente no hemos podido parar este juego de “Solo sexo” a veces, siento que no es así, es decir: si es solo sexo no deberíamos tener muestras de afectos al finalizar, besos robados, caricias durante o después, amanecer abrazadas ¡Joder! Esto se me está escapando de las manos, de verdad me aterra porque se supone que Eloise no es de comprometerse.

Yo creo en el amor ¡Sí! Pero en el que es correspondido, sé que con Eloise eso no será posible, pero cada vez que intento alejarme simplemente se me hace difícil, vuelvo a caer en sus brazos, trato de verlo como solo sexo, lo intento ¡Lo juro! Pero todo en mi interior se derrite cuando siento sus caricias, esa manera en la que me mira últimamente o quizás sean alucinaciones mías.

El punto es que fácilmente me pierdo en su mirar, la extraño e intento no pensar que esta con otra mujer, por ejemplo Amy. Estúpido lo sé, es libre de estar con quien desee y digamos que Eloise desea a toda cosa que tenga vagina ¡Aff! No imposible, no puedo estar enamorándome de esa idiota.

¡Estoy jodida! Mas porque volví a despertar rodeada por sus brazos, pero no en su habitación o en la mía, sino en la suite principal de unos de los mejores hoteles de parís, “La ciudad del amor” ¿irónico no? 

La muy idiota actuó de manera magistral delante de su padre fingiendo interés sobre “los negocios de la empresa” Esteban muy fácilmente cayó, el soñar que su hija comience a ser responsable lo llevó a creerle.

Claro está que Eloise solo vino para disfrutar del país porque ni a una sola reunión con los inversionistas me ha acompañado. ¿En serio me enamore de esta idiota? ¡Coño estoy jodida! El amor es para valientes definitivamente.

-- Rojita, ven a la cama. Deja de trabajar tanto –Salí de mis pensamientos al escucharla- 

<> Si voy a la cama no me dejaras dormir idiota –Escuche su risita- tengo que terminar estos documentos. La reunión de mañana es de suma importancia. Debo cerrar contrato con estos inversionistas para la expansión de la empresa. Una extensión aquí en París, sería un gran logro, así que ya deja de molestar e intenta dormir, no entiendo como no puedes estar cansada si hoy parecías una niña recorriendo la ciudad.

-- Pero quiero sexo Rouse -dijo como niña malcriada- antes de que me digas que salga a buscarlo, te diré que lo único que se me apetece es tu hermosa vagina  -sonreí de medio lado ¡En serio es una idiota! Escuché como salía de la cama- vamos rojita, prometo dejarte descansar -dijo a mi oído una vez estando atrás de mí-

<> Eloise… este viaje es de negocios no de placer -mis ojos se cerraron al sentir sus labios en mi cuello y sus manos bajo mi pijama acariciando directamente mis senos-

-- Anda rojita, así te relajas y dejas a un lado la preocupación, estoy segura que lograrás el contrato, por algo mi padre confía tanto en ti… -un leve jadeo salió de mis labios cuando sus dientes mordieron levemente mi cuello. Tiene razón necesito relajarme. Aquí vamos de nuevo.-

Después de saciar nuestras ganas pensé que Eloise se daría media vuelta para dormir y así dejarme terminar los documentos, mi cara de sorpresa me duro varios minutos. Pues, la idiota se sentó a mi lado para ayudarme, sin duda alguna nació para esto, pero la palabra responsabilidad y Eloise no van de la mano, a menos que de por medio este Aurora.

Verla tan concentrada cuando le explicaba algún detalle me hizo sonreír como tonta, un par de horas después nos cercioramos de que todo quedara dentro de lo que cabe perfecto, el cansancio era notable así que decidimos ir a la cama. Me acosté de espalda a ella, sonreí cuando sentí su brazo rodear mi cintura. Vuelvo y repito ¡Estoy jodida!

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