Una semana pasó rápidamente y no escuché nada de Jagger. Me veía todos los días con Andrew y me traía comida para que comiéramos juntos. Nos quedábamos horas y horas hablando y conociéndonos más. Me contó que tuvo una relación con una mujer que solo lo quería por su dinero, y que cuando se iban a casar, ella tenía planeado dejarlo luego de la boda, para así poder tener su dinero. Él se enteró porque un día salió temprano del trabajo para darle una sorpresa, y la descubrió en su cama con un chico, desnuda y abrazada a él. Escucho que hablaban de él y de lo que planeaban hacer. Al parecer esa mujer ya estaba comprometida y con ese amante, no tenían suficiente dinero para vivir. Andrew se enojó mucho que los echó a patas, no literal, y les dijo que nunca los quería volver a ver. Se deprimió mucho desde ese entonces, que no volvió a ver a ninguna chica hasta que llegué yo y le llamé la atención. Con mi delantal todo sucio y mis muffins, que por cierto le encantaron.
También pasé tiempo con Ty y Kyle, quienes me compraban helados de chocolate y se empeñaban en malcriarme. Marie se llevó un día a Ty a la pastelería e hicieron muchos pastelitos, no sin antes comer una gran mayoría, ya que Ty vino muy feliz y alegre a causa de mucho dulce. Creo que le prohibiré a Marie darle dulces por un mes….por otro lado, los muffins estaban deliciosos como todos los que Marie hacía.
Hoy me levanté con un muy buen ánimo y estoy más que bien para comenzar a trabajar. Ya estoy cansada de pasarme todo el día en cama y que me tratasen como una niña que se rompió una pierna y no puede caminar.
Me pongo un pantalón ancho negro, una remera de Kyle, ya que de seguro me voy a ensuciar toda con harina, y unas vans negras. Ato mi pelo en una cola de caballo y coloco sobre mi hombro mi cartera. Bajo las escaleras hacia la cocina y veo a los dos hombre de la casa sentados en la mesa con su plato de panqueques. Luego de desayunar, me despido de ellos y salgo para el trabajo.
Cuando llego, todos me abrazan y me preguntan si me siento mejor. Solo les sonreí y asentí con la cabeza. Jagger hizo como si yo no estuviera y siguió con lo suyo. Se colocó sus auriculares y se alejó de todos, de mí. Marie me mira con el ceño fruncido y yo aparto la mirada, avergonzada.
Soy yo la culpable de que él estuviera así, pero después lo arreglaré.
Me pongo el delantal y voy hacia Marie para que me diga cuál es mi tarea.
- Bien, Ella. Necesitamos cien muffins de chocolate y arándanos y veinte tortas para un evento de caridad en el hospital. Un jugador de futbol americano vino a pedirnos esto para llevarlo al hospital de niños enfermos o con discapacidad.- dice ella pasándome una hoja
- Bien. ¿Para cuándo es?- pregunto sacando los ingredientes y los bowls.
- Hoy a la tarde. No los hice yo porque ese joven me había señalado los que quería y se los hice probar para que me diga si los quería iguales. Y como no se la receta, te lo dejé a ti.- asiento.
- No hay problema, Marie. Déjamelo a mí.- ella sonríe y se va a preparar otra cosa.
Comienzo a hacer primero las mezclas para los de arándano y luego las pongo en los moldes antes de llevarlos al horno. Hago la otra tanda de muffins de arándanos y hago lo mismo que con las primeras.
Cuando, al fin, termino con los cien de arándanos, comienzo a hacer los de chocolate. Mientras se cocinan, aprovecho para decorar los de arándanos. Ya que son niños los que van a comerlos y les gustan los colores, los decoro con crema de colores haciendo espirales hacia arriba y luego con estrellitas de dulce para que tenga más sabor. A otros les dibujo con chocolate derretido un avión, o un auto, una estrella, corazones y otras cosas. Con la ayuda de Gary, llego a terminar de decorar todos los muffins, incluyendo los de chocolate.
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Placentera adicción (Sin editar- pausada)
RomanceLa vida simplemente no era justa, y Ella Anderson lo sabía demasiado bien a pesar de nunca haber hecho nada para merecerlo. Mantenía un perfil bajo, una simple mortal viviendo su vida de la forma fácil y linda. Hasta que un suceso la marcó de por vi...