Carencias

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Agradezco a mi beta!!!! Lamento la espera pero en realidad ideas iban y venían y preparo la lluvia de ideas que tuve pronto cuando acabe dos mis historias se enteraran jejeje te adoro Valeria_Guzman por tu ayuda!!!
Ahora disfruten!
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Sam Winchester llegó apresurado, de inmediato noto que el chico que estaba en el suelo no era el que creía.
Respiro aliviado al ver que Harry Lecter estuviera bien, al acercarse vio al rubio mayor mirando con verdadero terror a Lecter.
- ¿Que sucede aquí?
Harry de inmediato se giró y sus ojos, junto con su rostro mostraron solo una cosa.
Inocencia.
Pura y llana inocencia.
Como la de un bebé que te mira y no puedes evitar pensar que no hay maldad alguna en ese pequeño a pesar de que te golpee con sus puñitos.
Así fue la expresión de Harry Lecter.
- No sucede nada profesor- el timbre dulce del niño junto con su linda expresión y enormes ojos verdes gritaban que todo estaba bien, que el niño no era el malo del cuento.
Hermione se levantó acompañando la expresión de Harry con la propia, dos inocentes.
- Si profesor… el chico se tropezó cuando Harry le enfrentó, le dijo que no debía ser grosero, empezó a... Bueno no comprendo del todo sus insultos. - Ella parecía tan compungida.
Sam se giró al chico que más problemas daba creyendo de inmediato en las palabras de la joven Lecter.
- ¿Señor Whitman?
El chico rubio no dijo nada apartó la mirada aun temblando recordando la fría y grotesca mirada llena de promesas de muerte y dolor.
Harry Lecter era todo menos inocente, aunque ahora daba esa sensación.
¿Pero realmente quién le creería?
Había recibido de inmediato esa lección cuando el profesor sin saber todo ya estaba del lado del niño.
Sam lo levantó mientras le comenzaba a enumerar sus próxima detenciones y castigos junto a una visita con el director.
Agradecido de ya no ver los mortales y fríos ojos verdes acepto ser llevado, castigado e incluso alejado de ese monstruo.
Por que quien aparenta ser un dulce cervatillo se llevará la sorpresa de ser estrangulado con sus astas.
****
Castiel respiro hondo.
Una vez.
Dos veces.
Tres veces.
Busco calmarse, enserio que el hombre frente a él lo exasperaba.
El caso viejo hablaba de protecciones de sangre rotas, familia muerta, un niño que debía estar en su país de origen, la creencia de una fraudulenta adopción, caos por saber que el pequeño estaba en otra escuela, miedo de los demás por su paradero.
Entre otros.
Él se quedó callado, sin dejar de escuchar la cháchara incesante, Dean tenían razón necesitaba vacaciones, un aumento y tal vez un ascenso, esto debía contar para ello.
- Señor... Dumbledore - Empezó cortando la habladuría sobre un señor oscuro en busca de venganza.
En América eso les tenía sin cuidado.- Si dice que el niño fue llevado ilegalmente me temo que es mentira.- saco una hoja de un expediente, allí la firma de Petunia Dursley estampada junto con la de su marido, la fecha ya hace cinco años atrás- No es una falsificación ni mucho menos, los hechizos alabaron su autenticidad, de cada una.- el viejo se tensó.- Aun así se debía sacar al niño de esa casa, me pregunto ¿Cómo no sabía de su situación si se supone que era tan valioso?- el director palideció.
- ¿Situación?
- Si, el niño sufría de abuso doméstico - la voz llena de disgustó y furia corto cualquier palabra del viejo mago.- me sorprende que llegue hoy muy preocupado alegando un secuestro, pero nunca llegó a enterarse del abuso - el reproche en la voz de Castiel era palpable.- Así que me disculpó por mi falta de credibilidad hacia su persona, si el niño en cuestión no fue su preocupación antes no debe serlo ahora que ya tiene familia, ahora sí me disculpa debo seguir con mi trabajo - El viejo parecía miserable, de levantó y abrió la puerta invitándolo a irse - Así que resignarse es lo mejor para todos y sobre todo para el niño - Dumbledore se fue completamente contrariado.
Castiel suspiro, había tenido ganas de partir la cara del hombre… se le estaba pegando las manías de su esposo.
Suspiro
¿Quién en sus cinco sentidos y con algo de lógica dejaría a un niño mágico en casa de quién no lo cuidaría?
Además, en Estados Unidos no habían mortífagos.
Estaba más seguro lejos de Inglaterra.
Cerro la puerta notando que su secretaria regresaba con un café para él y ella.
Ella lo miró extrañada por su cara llena de disgustó.
- ¿Sucede algo Cas? ¿Debo ir a sermonear a Dean?
El negó con una sonrisa diminuta.
- Solo un loco que no acepta que un niño no esté bajo su custodia - Dijo mientras tomaba el café que le tendía Charlie.
Charlie se quedó quieta pero luego le dio unas palmaditas de apoyo.
No hablaron más del tema, aunque Castiel mando un memo a Lawrence Blacke.
****
La casa era amplia enorme y daba un aire imponente, no entro dejaría de lado.
Se fue sin notar que un pequeño ser de ojos verdes le vio desaparecer, el pequeño ser chasqueo sus dedos y se desvaneció en el aire.
**Una semana después**
Harry había sido llamado.
Sabía que hacer y cómo actuar.
Entro en la oficina, esta era amplia, luminosa y con hermoso vitral que tenía un árbol, la luz era cálida pues aún era temprano.
Había dos personas mayores cerca de Michel Whitman, el cual estaba con la barbilla en alto.
Junto estaban sus padres.
- Buenas tardes joven Lecter - el director con sus manos apoyadas en la mesa- Me temo que debo molestarlo con este asunto - le señalo la silla delante de su escritorio. - El joven Whitman ha hablado con sus padres y quiere aclarar sobre lo sucedido en el comedor.
Harry sintió a su padre moverse y dejar caer su mano en su hombro, Will apretó con cariño su otro hombro.
- Director yo no hice nada- La voz llena de inocencia y dulzura de Harry hizo al director mirar a Michel con algo de furia.
- ¡No! ¡Él tiene una serpiente! ¡¡¡Me amenazó con ella!!! - Michel se levantó.
Hannibal se impuso junto con Will haciendo que el jovencito se intimidara, los padres del joven se pudieron nerviosos.
- Mi hijo dice que su hijo - escupió el padre de Michel con algo de valor y repulsión - le amenazó con una serpiente...
- Que si su hijo no hubiera tenido la osadía de intentar lastimar a mi hijo su familiar no le hubiera defendido.
La sala se quedó en silencio.
- ¿Familiar...? - el director observó con fascinación como el siseo de Harry saco de entre sus ropas una mamba negra, el animal aumentaba de tamaño hasta ser de más de dos metros, no saco del todo su cuerpo.
- ¡¡¡AH!!!- la señora Whitman se alejó y el señor Whitman se sostuvo de la silla.
- ¡Un hablante! - se maravilló el director, Fontaine se levantó. - Bueno en realidad el joven Lecter no hizo nada - asintió y vio como Will y Hannibal acariciaban a la serpiente. - El señor Lecter tiene razón una familiar va a proteger a su mago o bruja si siente amenaza hacia él o ella-
Su mirada se oscureció.
Los Whitman estaban nerviosos.
Solo sabían de un hablante de parsel....
Lo habían rechazado y huido para no enfrentar su ira.
- Les tengo una advertencia señores Whitman, si su hijo continua con su conducta, será expulsado y sus faltas estarán en sus archivos personales. - la amenaza era clara, si seguía así sería rechazado de otra escuela. - Si te el asunto el familiar del joven Lecter no puede irse, eso sería perjudicial y si te todo él tiene un magnífico control sobre ella - estaba emocionado - ¡Un parsel!
- Sí, me tenéis que disculpar por molestarles señores Lecter, por favor siéntase con la libertad de recorrer la escuela, si me disculpan, ¡Ah! ¡Debo decirle al profesor Winchester sobre su familiar!  - Dijo jovial y les dirigió a la salida.
Al volverse no se extrañó de las teces pálidas de los Whitman.
Resopló cuando una de sus muñecas vudú se movió para señalar la calavera en la foto del periódico enmarcado a un lado de ella.
Si, sabía que debía hacer.
****
Hannibal se dejó guiar por sus hijos, conoció a los nuevos amigos y ambos los guiaron por la escuela, Will se hallaba emocionado a más no poder, aunque lamentaba que Abigail se lo perdiera, fue por flu que le avisaron a él y Hannibal que les llamaban de la escuela.
Un problema menor.
Ambos pasaron y dejaron atrás lo que hacían.
De inmediato supieron que esos magos no iban a hacer o podrían hacer algo contar ellos.
Ambos estaban interesados en la escuela.
Las emociones eran intensas bullían con claridad y eran agradables, algunas no, pero eran brillantes, a Will le subió el ánimo de inmediato.
Hablaron de lo acontecido durante esos días.
La escuela bullía en actividad de alumnos, profesores, gatos y perros, incluso fuera la enorme nube en forma de remolino no impedía el paso de la luz del sol.
Los jardines atestados de alumnos que jugaban, u otros que estaban alrededor de un suelo con una casita de pieles cerca, la subdirectora estaba allí en ese grupo aun usando esa ropa de pieles claras.
Las cuentas y plumas se movían con ella.
Los pastos de verde vivido los recibían.
Se encaminaron a pasar el día.
Draco se unió con una cámara.
**††**
Al regresar por la chimenea los esperaba una criatura que nerviosa retorcía con ansiedad el paño de lino blanco inmaculado.
- ¿Sucede algo Dobby? - Hannibal noto como el elfo doméstico se ponía más nervioso.
- Volvió señor- dijo Dobby.
- Mantén cerrada la chimenea a quien no sea de confianza, si intenta entrar de nuevo trae de inmediato a Lawrence - ordenó y el elfo asintió vigoroso antes de desaparecer con un crack.
- El agente que sigue el caso de Harry mando la información - Will se dejó caer en el sofá.
- ¿Qué crees Will?
- Que no quiere el bienestar de Harry.
- Yo creo lo mismo - Dijo intercambiando una mirada oscura
**Días después**
El cadáver se hallaba ante él y lo miró con preocupación.
Jack noto que el asesino era el mismo que había matado a la chica de la cabeza de ciervo.
Se dejó soltar un suspiro.
Tomo el cuchillo de caza con los guantes blancos, notando cierto tejido en el mango.
- ¡Katz!
****
Hannibal dejo el lugar con Will que trataba de no pensar en nada.
Era la preparación para lograr su palacio de memorias.
Memorias que estarían en cuartos cerrados con llave.
Sin más dejaron que Katz hiciera lo suyo.
Sonrió.
Le devolvería a Crawford el favor de cuidar a Will.

Esmeralda EnsangrentadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora