Capítulo 5

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Un grito provocó que despertara de golpe. Sin embargo, volví a tumbarme al recordar que solo era Jasper. Habían pasado un par de días desde que le habíamos recuperado, pero el pobre chico se pasaba día y noche gimiendo y quejándose de dolor, aunque aún no había despertado. Según me había contado Clarke, ahora tenía fiebre y se le estaban infectando las heridas.

Sin poder soportar ni un grito más, recogí mis cosas y salí de la nave. No me había separado de mi arco en ningún momento, ya no lo guardaba en el árbol. Desde que había visto los ojos del terrestre en los arboles me encontraba con la guardia alta sin descanso. Cuando él vio que le había visto, se escabulló de nuevo, por lo que no me dio tiempo a avisar a nadie.

Tras separarme un poco del campamento, me senté bajo un árbol para repasar mi libro.

En cuanto empezé a escuchar el murmullo de 97 personas despertándose, regresé al campamento.

El día anterior, Clarke me había dado una mochila, así que había guardado en ella mi libro, el cuchillo y el intento de carcaj con flechas.

Octavia salía de la nave cuando llegue a la entrada.

—Oct, ¿puedo hablar contigo? —ellaasintió y nos alejamos del resto. Acabamos sentadas en el suelo junto a un arbusto de frutos comestibles—. Sabes que eres mi mejor amiga y me preocupo por ti —empecé llevándome una baya a la boca—. Pero no me parece bien lo que le estas haciendo a Bellamy —vi cómo su rostro se contraía con enfado.

—Él no tiene ningún derecho para mandar sobre mi vida.

—Mira, no lo digo para que te enfades. Bellamy no me cae bien, pero no puedes estar con Atom y también con él.

—Espera, ¿De qué estas hablando? —preguntó ella confundida.

—No puedes ponerle los cuernos. Se que has estado mucho tiempo sin verle, y que quizás ya no sientas lo mismo, pero se sincera —mi amiga se echó a reír, por lo que ahora la enfadada era yo—. No le encuentro la gracia.

-Sammy, amiga, Bellamy no es mi novio —la miré sorprendida.

—¿Entonces?

—¿Recuerdas que te dije que me habían condenado por nacer? Es porque soy la segunda hija. Bellamy es mi hermano —explicó con gracia, yo me eché a reír.

—Joder, que susto me has dado.

Tras aclararlo todo y hablar un rato más, ambas regresamos. Ahora veía las acciones del chico de pecas de una forma distinta. Estaba preocupado por su hermana, e intentaba protegerla.

Un rato después, Bellamy se acercó a donde yo estaba.

—Vamos a salir a cazar, ¿vienes? —asentí sin emitir palabra.

Aún le odiaba por lo de la pulsera, y seguía siendo un estúpido con aires de grandeza, aunque hubiera descubierto que podía sentir algo más que egocentrismo.

Nos habíamos separado para poder cazar algo grande. Bellamy y yo íbamos por un lado y otros dos chicos por otro. Vi por mi lado derecho una sobra, por lo que me di la vuelta, Bellamy se giró conmigo.

Era un animal pelirrojo, con la cara alargada y la mandíbula blanca. Parecía un zorro, pero era mucho más grande. Le apunté con el arco, esperando a tener mejor visión. Sin embargo, no pude disparar al ver como el zorro me devolvía la mirada.

Bellamy en cambio, le apuntó con su hacha, pero le sujeté la muñeca.

—Espera —dije demasiado alto, por lo que el zorro se marchó.

—¿Porqué has hecho eso? —me preguntó con rabia.

—Tengo una corazonada —dije en un volumen bajo, andando sigilosamente.

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⏰ Última actualización: May 25, 2020 ⏰

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