Capítulo 2

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La mirada de cada una chocó con la otra, sus ojos se comenzaban a abrir y a mirar cada rasgo en su reflejo, sus ojos, nariz boca, etc, esperando encontrar alguna diferencia a parte del color de cabello.

La castaña no dejaba de mirar a la rubia, estaba estupefacta, en entendía cómo podía haber alguien tan idéntica a ella misma ¡No eso era imposible! Pero... pero esos mismos ojos cafés, el mismo tono suave de piel, los mismos finos labios acorazonados, no comprendía porque había tanto parecido entre ellas, todo era tan extraño.

Mientras la castaña asimilaba todo, la rubia no dejaba de verla, su boca estaba ligeramente abierta, era como verse en un espejo, no había duda era ella misma, era su reflejo ¡no podía creerlo! No quería creer que había alguien igual a la gran carismática Choi Hana y menos podía ser esa chica que se creía superior y que aunque le doliera admitir le había ganado... o no... eso no... ¿Cómo un vil clon podía superar al original? Eso era, un vil clon nada más y si lo veía bien casi no había parecido o eso intentaba hacerse creer mientras cerraba su boca e intentaba mostrarse tranquila.

-Eh...- dijo mientras se rascaba los cabellos mojados –... yo

La castaña no dijo nada simplemente alargó su mano, la rubia comprendió juntando la suya con la de la castaña, pero, al momento en que sintieron la piel de la otra, una corriente eléctrica y un extraño sentimiento las embargó, era... era como sentir a su otra mitad, era como si ambas se conocieran desde hace tiempo, fue un calor muy profundo en el pecho de ambas que las asustó e hizo que se soltaran al instante sin dejar de mirarse ahora con más profundidad.

-Son idénticas– dijo una niña mientras todas comenzaron a rodearlas.

Las demás niñas al verlas no pudieron evitar gritar, era algo extraño, todas comenzaron a rodear a las niñas, las amigas de la rubia se situaron detrás de esta y las de la castaña detrás de la otra, estaban confundidas, es que no era normal ver a otra persona idéntica a tu amiga en frente, definitivamente eso superaba con creces la palabra "raro".

-Ehh... ¿por qué nos miran tanto?– dijo Hana mientras evitaba la mirada de Lauren.

Lauren no pudo evitar enarcar una ceja es que ¿Cómo era posible que no se diera cuenta?

-¿No te das cuenta?– dijo suavemente mientras la miraba a los ojos.

-¿De qué?– dijo tratando de sonreír pero fallando terriblemente.

-Del gran parecido que hay entre nosotras– dijo cruzando los brazos.

La rubia rió suavemente mientras miraba desafiante a los ojos de la castaña.

- ¿Que tú– la señala –te pareces a mí? -


-Eso mismo– dijo sin poder evitar ponerse seria, ¿era tan idiota que no lo notaba o la estaba agarrando de tonta?

-A ver si es cierto... ponte de perfil– dijo la rubia tranquilamente.

La rubia bufó mientras lo hacía ¿qué perdía?


-Ahora del otro lado- Lo hizo con desgano, pero se volvió.

-Humm... bueno la primera diferencia es que yo soy rubia y tú castaña – dijo cruzando los brazos mientras la otra la miraba

-Eso ya lo sabía- dijo con obviedad.

-Pero hay más... para empezar tus ojos están mucho más juntos que los míos, tus orejas pues... no te preocupes dudo que crezcan más que tú– dijo sonriendo mientras veía como sus amigas se reían –tus dientes son mucho más grandes y ¡ayy! Esa nariz... no hay problema creo que un buen cirujano plástico puede arreglarla– dijo estallando en risas mientras la castaña se comenzaba a ruborizar y su linda mirada café se comenzaba a tornar casi roja, estaba furiosa esa mocosa se estaba pasando, nadie insultaba a un Kim y menos a Kim Lauren.

-¿Quieres que le dé su merecido?– dijo una de sus amigas


-Déjame darle su merecido– agregó otra pero la castaña las detuvo con la mano sin dejar de ver directamente a los ojos a la rubia con una de esa típicas miradas altivas que sabía hacer muy bien.

-Aguarda... todavía no termino– dijo con una media sonrisa -¿quieres saber la verdadera diferencia entre nosotras?-

-Eso sí lo sé...- dijo riéndose Lauren –la diferencia es que yo sé esgrima y tú no... y veo que yo tengo clase y tú para nada– dijo caminando alrededor de la azabache –ah y por supuesto... yo soy muy superior a ti cariño yo no soy una perdedora– dijo mientras una sonrisa irónica adornaba su bello rostro

-Te crees la gran cosa– dijo intentando acercarse pero siendo jalada por sus amigas

Twins Game - MinKeyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora