El secreto de Érika

Capitulo 7: Un secreto y una promesa.

Érika//

Me había torcido el tobillo y no podía ponerme en pie, ¿Qué podía hacer, este era mi fín? ¿Mi tío se había salido con la suya?, no quería pensarlo pero eso era lo único que se me venía a la mente. El lobo acerco a mi, he iba a darme el golpe final cuando se escucho algo y apareció en el cielo una criatura, el lobo miró hacía arriba al igual que yo, lo único que pudé ver fue unas enormes alas blancas que resaltaban en la oscuridad, pensé que era un ángel pero quién, no podía verle la cara.

Entonces de repente apareció en sus manos un arco y una flechaa echos de luz. Cogió las dos cosas y se disponía a disparar, no me creía que desde esa distancia pudiera darle, pero creí mal. Disparó y le dió de lleno al lobo, que este cayó al suelo y al igual que los otros lobos desapareció en polvo negro.

Me quedé sin habla, cuando quise mirar al angel ya había desaparecido, ¿de donde había salido? ¿Quién era y por que me ha ayudado?, pensando esto me arrastre hasta donde estaba Lucí y la cogí estaba inconsciente y todo por ayudarme. De repente oí una voz que venía detrás nuestra.

-¡Érika! ¡¿Te encuentras bien?! -preguntó Gil alarmado y corriendo hacía mi.

-Gil, solo me he torcido el tobillo, pero que haces aquí -dije mientrás que el se agachó de espaldas delante mía.

-Estaba paseando cuando escuche un ruido y te ví hay tirada -dije.- Ahora sube.

-No hace falta, con que me sujete en algo puedo caminar -dije, pero Gil me echó una mirada fulminante.

-No te dije que te iba a ayudar en lo que pudiera, ahora sube -dijo un poco mosqueado.

-Estaba bien -dije subiéndome en el.- Lo siento.

-No te preocupes.

Llegamos a las cabañas y allí me vendó la pierna. Al día siguiente, volvimos a casa y le conté todo a Dafne que me abrazó viendo que estaba bien. Me dieron unas muletas para que pudíera caminar así tendría que estar dos o tres días.

Gil//

Estaba tan tranquilo en mi casa viendo la televisión cuando ví al hada de Érika sentada encima de ella, ¿Qué hacía aquí?, me puse nervioso he iba a irme de hay, cuando empezó a hablarme.

-¿Puedes verme, verdad? -palidecí, me había descubierto, no dije nada y me hice el loco.

-No te hagas el loco, se que puedes verme y también se quien eres -dijo, no podía hacer nada, me había descubierto, así que me volví a sentar y empezé a hablar.

-¿Como lo has sabido? -dije resignado.

-A mi no se me olvida una cara tan facilmente -dijo ella orgullosa.- ¿Eres el chico que ayudamos en el mundo mágico, verdad?

-Sí, soy ese niño.

-¡Lo sabía! -dijo ella emocionada.- Tengo que decir celo a Érika.

-¡NO! -grité.- no puedes....

-¿Por qué?

-Por que si se entera de lo que hizo su padre, se echaría la culpa a ella mismo y no quiero.

-El padre de Érika, que hizo? -preguntó extrañada.

-Mató a mi madre -me dolía decir esas palabras.

-¿Mató?... no me digas que tu madre es esa maga.... no puede ser -dijo ella mirándome.

-Si, es ella, la que mataron por traidora -dije con un hilo de voz.

-Lo siento... -dijo ella deprimida.-Espera un momento.... entonces tu padre era un ángel y tu tienes los dos poderes.... -pensó un momento y de repente gritó.-¡El que nos salvo ayer, fuiste tú!

-Sí... -me asusté no esperaba que gritara.

-¡Ahora en caga todo! -dijo emocionada.

-Pero no puedes decirle no una palabra de esto a Érika -dije serió.

-Esta bien no te preocupes -dijo ella con una sonrisa.

-Gracias -dije.

-Por cierto, tu no sabes que dentro de cuatro días es el cumple de Érika, ¿verdad?

-No, no lo sabía -dije, entonces se me ocurrió una cosa.- Esta bien deja me el cumpleaños a mi, vete con Érika ahora iré a hablar con ella.

-Esta bien -dijo eso y se fué y yo me preparé para ir hablar con Érika.

Érika//

Estaba jugando con Daní cuando apareció Lucí.

-¿Donde has estado? -pregunté.

-¿Donde...?, Ah.... dando una vuelta -dijo sonriendo y cambiando de tema.- Érika, tu cumpleños es dentro de cuatro días, verdad?

-Es verdad, no me acordaba -dije y se escuchó llamar a la puerta.

-Oh, Gil -se escuchó decir a Dafne,. Pasa, Érika esta arriba con David, subé.

Se escucharon los pasos y luego llamar a mi habitación.

.Se puede -dijo Gil abriendo.

-Claro, pasa.

Estuvimos hablando, mientras jugábamos con David cuando saco el tema del cumpleaños.

-Me he enterado, que dentro de cuatro días es tu cumpleaños.

-Sí -dije con una sonrisa.

-Hmm... vas a querer algo -preguntó.

-No, no hace falta.

-¿Que tal una fiesta?

-No, enserio no hace falta que hagas nada.

-Tú, dejamelo a mi te haré la mejor fiesta que nunca has tenido -dijo riendo.

-Parece ser que tu no escuchas a la gente enn -dije sonriendo.- Vale, me rindo, pero tienes que sorprenderme, ¿prometido? -dije riendo.

-Prometido.

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Gracias por leer :D espero que les este gustando.

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