Eres Mi Luz (Draco Y Hermione)

Capitulo 3 "Nuevo Comienzo"

Después de recuperarse, Hermione regreso a dormir a su habitación.

A pesar de la tristeza que sentía, sabía que no podía dejarse vencer y más aun después de ver la cara de tristeza revuelta con algo de decepción por parte de Harry. Así que decidió que no se encerraría más y seguiría adelante.

Ya habían pasado cinco días desde el incidente, pero a pesar de que ya comía un poco mas no se veía realmente mejor.

Sus ojos aún se veían con ojeras, sus pómulos aun estaban sumidos por la falta de peso y sus ojos seguían sin brillo.

Se miraba al espejo como todas la mañanas antes de bajar a desayunar.

-Se que puedo- se repetía como siempre, tomo el cepillo y trato de desenredar su cabello, pero sin mucho éxito. Ya la tenia molesta esta situación, había pensado en cortárselo. Pero aun no lo decidía bien.

Termino de arreglarse y bajo al comedor. Ya todos la esperaban ahí.

-Buenos días Hermy- dijo Ginny al verla, la pelirroja se esforzaba por transmitirle algo de alegría a la castaña. La cual le dedico una sonrisa que no se reflejó en sus ojos.

-Hola Hermy- dijo Harry sin excesiva euforia como su novia.

-Buenos días a todos- dijo Hermione sentándose entre Harry y Ron.

Todos comenzaron a comer en silencio. No había bromas ni chistes. Solo el sonido de los cubiertos al chocar en los platos.

-“Igual que cada mañana”- pensó Hermione. Hasta que aquel silencio fue interrumpido por una torpe lechuza que chocaba con la ventana.

-Maldición Errol- exclamo Ron.

Todos estaba expectantes ante lo que traía la lechuza en su pico. Molly se levanto de su lugar para tomar la correspondencia y se sorprendió ante lo que vio.

-Cartas de Howarts- dijo sin poder creerlo.

-¡¿Qué?!- exclamaron todos.

-A ver, déjame ver mamá- exclamó Ginny, tratando de quitarle las cartas a su madre.

-Espera Ginny- dijo ella -Las repartiré- y comenzó a entregar cada una a los chicos del trio de oro y una más para Ginny.

Ginny la leyó a prisa.

-No lo puedo creer- dijo eufórica -Volveremos a Howarts- exclamo pensando que todos compartían su emoción.

-¿Volveremos?- dijo Hermione rompiendo la burbuja de Ginny.

-Si- exclamo la aludida -Es lo que dice la carta- dijo a la castaña.

-Si Ginny, ya vi lo que dice la carta, pero cuando dices volveremos hablas como si todos pensáramos eso- se notaba un tono de enojo en la voz de la castaña.

-Pues así será ¿O no?- dijo mirando a Harry quien solo le daba una mirada de desaprobación -¿Qué pasa Harry? ¿Por qué me miras así?

-Porque Hermione tiene razón Ginny, hablas por todos y no sabes si realmente queremos volver- le contesto el chico.

-Pero ¿De que hablan?- dijo la pelirroja como sino entendiera -Tenemos que volver, debemos estudiar- dijo esto mirando a su madre en busca de apoyo.

-Pues yo no lo hare Ginevra, no volveré- dijo Hermione al tiempo que se levantaba y salía de ahí para encerrarse en su habitación.

-Bien hecho Ginny- le dijo Ron para después seguir comiendo.

Ginny se quedo con cara de no entender, como es posible que no puedan compartir su felicidad.

Ella quería ir, ¿Por qué ellos no?
Harry se iba a levantar para imitar las acciones de Hermione, pero alguien lo detuvo.

-Tu volverás conmigo- dijo Ginny a Harry en tono autoritario.

Harry frunció el ceño ante el comentario y jalo su mano para soltarse del agarre de Ginny.

-No me puedes obligar, eso lo decidiré yo- dijo molesto el chico. Y salió del comedor.

Ginny estallo.

-¡¡¿Qué les pasa?!!- y salió corriendo al jardín para despejarse un poco.

En el comedor solo quedaron Molly, George, Ron y Artur. Molly miraba a Artur buscando apoyo, ella quería que sus hijos terminaran sus estudios, pero a la vez tenia miedo de perder a uno más.

Ron seguía comiendo como sino hubiera mañana y George solo observaba la escena.

Harry iba a entrar en su habitación, pero un estruendo lo distrajo y fue corriendo a la de Hermione.

-Hermione ¿Estas bien?- pregunto al tiempo que tocaba la puerta, pero obtuvo respuesta, solo se escucho otro estruendo, así que sin pensarlo dos veces Harry entro tumbando de un golpe la puerta.

Hermione lo miro sorprendida. Al entrar Harry vio como todo estaba roto, el espejo del tocador, algunos floreros que había en la habitación, hasta la cama estaba hecha pedazos.

-¿Qué paso aquí?- pregunto Harry mas para si mismo que para la chica -¿Estas bien Hermy?

-No Harry- dijo ella molesta -No estoy bien, y si vienes a convencerme de volver a Howarts de una vez te digo que no lo hare.

-Lo sé- dijo Harry causando sorpresa en la expresión la chica -Eso es solo decisión tuya- dijo antes de dirigirse a la puerta.

-Espera- dijo Hermione al tiempo que reparaba su cama y se sentaba en la orilla, Harry se acerco a ella e imito su acción.

-¿Qué pasa?- pregunto Harry.

-Tengo miedo- respondió, y Harry se la quedo mirando sin entender bien -Tengo miedo de volver al exterior, ya no quiero perder mas seres queridos o enfrascarme en mas batallas sin sentido- termino y cubrió su rostro, lloraba desconsolada, quería expulsar todos esos sentimientos de su corazón.

Harry no dijo nada, solo se limitó a abrazarla.

Estuvieron así por varios minutos, hasta que el llanto de Hermione comenzó a cesar.

-Gracias Harry- dijo la chica levantando su mirada -Siempre has estado a mi lado para escucharme.

-Y siempre lo estaré Hermy- dijo acariciando el cabello de la chica -No olvides que eres como mi hermana y siempre estaré ahí para apoyarte y cuidarte- contesto amoroso -Así que, si decides volver a Howarts ahí estaré para apoyarte y si decides no volver también estaré ahí y comprenderé tu decisión- dijo el chico dejando tranquila a Hermione y levantándose de la cama para después depositar un beso en la frente de la chica -Ahora trata de relajarte, no te abrumes con la noticia al cabo falta mucho para el 1 de septiembre- salió de la habitación de Hermione y se fue a la suya, él también tenía cosas que pensar.

Ron solo se había quedado en la sala después de comer, sinceramente el asunto le daba igual, el solo haría lo que hicieran los demás.

-Si ellos van yo voy- se dijo a sí mismo.

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El resto del dia paso lento, Hermione reparo su habitación, Ginny seguía en el jardín molesta con los demás, Harry en su habitación pensando y Ron en la sal durmiendo como si no hubiera mañana.

Al fin Hermione había tomado una decisión y salió de su cuarto para buscar a Harry, era al primero al que quería decírselo.

Toco la puerta del cuarto del chico.

-Pase- respondió. Estaba sentando en el alfeizar de la ventana, viendo desde ahí a Ginny sentada en el jardín arrojando pequeñas piedras al lago.

-¿Estas ocupado Harry?- pregunto Hermione.

-No- dijo girando a verla -¿Qué pasa Hermy?

-Es que yo- dijo temerosa -Ya tomé una decisión.

-¿En serio? Me da gusto- dijo el chico con una amplia sonrisa en sus labios -Y ¿Qué decidiste?

-Volveré- dijo feliz -Quiero terminar mis estudios y ser Medimaga o trabajar en el ministerio de magia.

Harry le dedicó una sonrisa igual de feliz.

-Yo también volveré- dijo Harry -Además no puedo dejar a mi hermanita sola.

Hermione se ruborizo ante el comentario.

-Bien entonces les diremos a los demás en la cena ¿Te parece bien Harry?- pregunto ella.

-Claro- asintió.

-Hasta la cena entonces- dijo Hermione saliendo de la habitación.

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-Ya esta la cena- grito a todo pulmón la señora Wesley para que todos bajaran a cenar.

Todos llegaron al comedor. Incluida Ginny, que en cuanto sintió que comenzaba a hacer frio, entro a la casa a darse un baño y cambiarse.

Todos se sentaron a la mesa y Molly comenzó a servir los platos.

-Tenemos algo que decirles- hablaron Harry y Hermione casi al mismo tiempo.

-¿Qué?- pregunto Ginny despectiva.

-Nada especial Ginny- dijo Hermione sarcástica -Solo que si volveremos a Hogwarts.

Dicho esto la pelirroja grito de alegría.

-¿De verdad? ¿No me estas engañando? Siiiiiiiiiiiiiiiiii- dijo abrazando con fuerza a Hermione.

-Ginny me asfixias- se quejó Hermione.

-Jajaja lo siento Hermione- y soltó a la chica -Que felicidad- dijo conforme.

-Bien volveremos entonces- dijo Ron sin despegar la vista de su plato.

Todos lo miraron con gracias e hicieron lo mismo que el chico.

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Mansión Malfoy…

-Vamos Draco acepta- decía Zabbini mientras seguía tratando de convencer al rubio de volver a Howarts.

-Ya te dije que no Zabbini ¡carajo no entiendes!- respondió Draco furioso -No volveré a ese maldito lugar, ahora lárgate de mi cuarto- ordeno el chico harto.

-Bien- dijo Zabbini triste -Nosotros si volveremos- dio un ultimo vistazo al rubio, que lucia ojerosos y cansado, desde que recibieron aquellas cartas se la pasa encerrado en su cuarto, casi no come y al parecer se ha tomado el wisky de fuego de todo el mundo, a nadie le quiere contar sus penas, pero se ve que esta sufriendo mucho -Y estaremos siempre a tu lado por si nos necesitas- dijo y salió de la habitación de Draco, justo cuando cerro la puerto escucho como algo choco contra esta.

Draco había arrojado el vaso que tenia en sus manos, en un arranque de ira.

Aun tenia atorado en el pecho aquel dolor que lo atormentaba y su única manera de apaciguarlo era quemándolo con wisky de fuego.

Se derrumbo de rodillas en el suelo. No soportaba más a aquello, sentía que moriría consumido por la pena y el dolor. Hasta que alguien interrumpió su soledad.

-Draco- era la voz de su madre, se acerco a el y se agacho a su altura poniéndose de rodillas también -¿Que pasa hijo? , dime ¿que te sucede? , sufro mucho al verte así.

Draco levanto la mirada y se abrazo al cuello de su madre, llorando desesperadamente.

Narcisa lo abrazo y recordó cuando Draco era pequeño y tenía miedo.

-Madre- dijo entre sollozos -No se que hacer- dijo abrazando mas fuerte a su madre.

-¿Por qué mi pequeño?- le pregunto amorosa.

-Ellos quieren que vuelva, pero tengo miedo, no quiero ser señalado por todos, mi orgullo no me lo permite- dijo entre lagrimas -Todos saben lo que hice, soy un simple cobarde.

-Draco Lucius Malfoy- dijo ella mirando con amor a su único hijo -Tu no eres ni serás jamás un cobarde, tu has enfrentado penas como nadie en este mundo, pero como el fénix hijo mío renacerás de las cenizas y ten por seguro que de todo el linaje Malfoy tu serás el mejor, porque en ti esta el cambio, en ti esta el ser alguien diferente a tus antepasado y demostrar que llevar el apellido Malfoy no representa solo estar a lado de brujos tenebrosos o portar una marca, no, demostraras que también representa redención y cambio, así que hijo mío levántate y renace- termino Narcisa dejando a su hijo sorprendido por aquellas palabras.

Él nunca se había visto de esa manera, pero lo haría, renacería y sería el mejor Malfoy de la historia, enmendaría errores y seria una mejor persona, por el y por su madre.

-Gracias madre- la abrazo nuevamente y se puso de pie y después la ayudo a ella a levantarse -Gracias por siempre estar a mi lado y demostrarme lo que es el cariño- dio un beso a su madre en la frente y ella después salió de la habitación del chico.

El se quedo pensativo, tomado decisiones y sintiendo como aquella carga comenzaba a hacerse más ligera.