Cóncavo y Convexo (JANIA) 💕

Capítulo 12

—Te extrañé infinito muñequita— susurré a su oído

—No más de lo que yo a ti, cariño— le dio otro beso, con más intensidad, pasando sus manos sobre las curvaturas de Alejandra

—Necesito que me hagas un favor—la tome de la cara —Dejé mi celular en tu carro, podrías traérmelo por favor — sonrió

—Vale hermosa, ahora regreso — le dio un beso

Bueno ahora que Estefanía no está es hora de la acción 

Tengo que apurarme, no creó que tarde tanto

Que bueno que deje todo preparadisimo, espero que le encanté la sorpresa

Aaaahhh estoy muy nerviosa -abriendo y cerrando sus manos continuamente- 

Alejandra comenzó a sacar todo lo que había preparado de comer, comenzaba a arreglar la mesa de una manera tan romántica que ni ella entendía como se le había ocurrido.

Estaba disfrutando el poder regalarle una sorpresa a la persona que estaba comenzando a amar, no tenía tanto tiempo, la mesa estaba quedando perfecta, con velas adornando, una rosa puesta en el plato de Estefanía, los cubiertos perfectamente alineados, los pétalos adornando cada parte de la mesa, las copas de vino resplandecientes y un centro de mesa que podía denotar perfectamente las letras "E & A" 

Estaba casi todo preparado, los bocadillos, los platillos que se calentaban a fuego lento, como el amor que comenzaba a profesarse entre dos mujeres hermosas.

En el camino, Estefanía encontró a la persona que jamás hubiera querido tener de frente 

Ay pero que coño, esto se tarda demasiado 

Vale! Por fin... 

*Entro al elevador*

—Que mala suerte— pensó Estefanía mentalmente

—Hola, que tal... ¿La conozco? — sonrió amablemente

—Por desgracia—susurro, que cagada este hombre aquí, carajo

—¿Disculpa? — la observó con duda

—Me parece que sí, en algún lado— contestó con desinterés

—Ah, eres la amiga de Alejandra — recordando en la manera tan prepotente en la que llegó

—¿Amiga? — quisieras llegar hasta donde yo estúpido

—Si, o no? — dudoso — Esperó no ofender 

—Ah ya te recuerdo, eras el que se quería llevar a mi...— se dio cuenta de que estuvo a punto de arruinarlo —  Estabas un día con Ale afuera de su trabajo

—Heee si, ella está en su departamento? — levantando la mano señalando hacía arriba

—Oye que coño te importa imbécil — pensó muy molesta — Si, si está

—De acuerdo — consideró subir a verla —Bueno un gusto saludarte — bajó del elevador —Que extraña mujer, guapa, pero muy rara —