Capitulo tres: Me c*go en la p*ta!

152 7 0
                                    

-VEGETTA?- Casi grité, totalmente anonadada y rebosante de emoción, el se rió fuerte y asintió con la cabeza dos veces. -Me cago en la puta!- grité esta vez menos fuerte, me puse la mano en la frente y suspiré.

-Samuel! creí que no ibas a... que pasó aquí?- dijo Daniel llegando a nuestra ubicación, le dio la mano a vegetta y yo gesticulé con las manos exageradamente, -eso te pregunto yo a ti!- grité, vegetta volvió a reír y le dijo algo a mi hermano que no pude escuchar. -¿alguien va a explicarme que rayos pasa aquí? Daniel!- dije y el me tomó por los hombros, -vamos, que te explico en el vuelo, vamos tarde- dijo y casi me arrastró hasta el avión.

-allí está tu silla, Mandy. Samuel, al lado de ella- abrí los ojos como platos y traté de relajarme, fui hasta mi asiento y me acomodé. eran cuatro sillas y yo era al lado de la ventana, vegetta a mi lado, y Daniel en el tercer puesto. -Daniel, que está pasando?-dije totalmente seria, mire de reojo a vegetta que se reía en voz baja. -eh... hermana, el es Samuel.- dijo y puse los ojos en blanco <<claro que lo sé, maldito imbécil>>-y es uno de los chicos que va a vivir con nosotros- ahogue un grito y deseé que fuera broma -hablo en serio- dijo y me golpeé la frente <<nadie te ha mandado a leer lo que hay en mi cabeza>> -el otro chico dijo que no tardaba en llegar, pero no lo veo por ninguna parte- murmuró y suspiré. no quería otra sorpresa.

-y cuando se supone que el avión vuela? - dije enojada ignorando la mirada intimidante de Vegetta,-Daniel! - Gritó alguien y me puse la mano en el pecho  -eh! Guillermo! gracias a dios que llegaste! - dijo y grité otra vez, y me tapé los ojos. no quería mirar pero la curiosidad me ganó, mire a mi izquierda y ahí estaba, respirando agitado, el mismísimo Willyrex, en carne y hueso, -me cago en la puta...-susurré para mis adentros con la cabeza baja;tenía dos opciones, preguntar que pasaba <<lo cual era claramente estúpido>>, o ignorar su presencia, para no perder la cabeza <<si, acertaron, escogí lo segundo>>. miré a la ventana y escuché la conversación de los tres chicos.

-ella es mi hermana... y esta, un poco nerviosa, con todo esto- dijo Daniel y enfurecí, -no estoy nerviosa, joder- dije aún sin mirarlos y continúe mirando la ventana -ella es tu hermana? -dijo la inconfundible voz de Willy, y suspiré -se llama Amanda- dijo Daniel, y me puse cómoda en la silla. "muy buenas tardes, pasajeros, son las 4:30 de la tarde en la ciudad de Los Ángeles, el avión despegará en 20 minutos, les deseamos un buen viaje..." dijo el altavoz en inglés, y siguió dando indicaciones para el viaje, tomé mis audífonos y puse "cry to the moon" de epica, a todo volumen.

cuando miré el reloj de mi celular, me di cuenta de que había dormido mucho, pues ya habían pasado tres horas, mierda, eran las siete de la noche. mire a mi izquierda y vi a vegetta, no estaba dormido, estaba hablando con Willy, que ahora no estaba en el extremo, sino a un costado de vegetta. y mi hermano estaba moribundo al final, profundo del sueño; volví a mirar a los chicos de reojo después de quitarme los audífonos aún sonando.

debía admitir que estaba emocionada, estar tan cerca de el vegetal este y el batracio me dejaba alucinando.

la razón de mi indiferencia no era más que culpa de mi hermano, el podía ser bastante molesto con ciertas cosas, pero el, hasta donde yo sé, no tiene idea de mi fanatismo loco, desenfrenado y pasional, hacia estos y otros cuantos hombres.

si, tenía gorras  y camisas y unos cuantos pósters hechos por mi, no muy sorprendente, pero Daniel nunca hizo comentarios sobre esto, por lo que vivía tranquila. <<aunque seguramente lo sabía desde siempre, y solo queria trollearme cuando se le antojara>>.

Me llené de valor y me giré hacia ellos, el corazón me latía como tambor, y presentía que iba a arruinarlo todo con decir palabra. me aclaré la garganta para llamar su atención y por fortuna me miraron.-hola. - dijo willyrex tendiendo su mano y la estreché con timidez, <<¿que pasa contigo, estúpida? di algo!>> Intenté no gritar pero fue en vano, apagué mi voz con la misma rapidez con la que empezó. luego me saludó vegetta, a punto de reventar de risa, y sonrió, <<¿porque? mierda! ¿porque tenía que ser tan.. tan Él?>> si tuviera la capacidad de sonrojarme, ya lo habría hecho, por fortuna, no puedo. -soy amanda. -dije seca, y ellos abrieron la boca, los interrumpí -no me digan sus nombres, que ya los sé- dije seria, luego, se partieron de risa <<seguro que me vieron cara de payaso, los gilipollas>>.

Huele A Hipster!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora