—Así que no vas a poder venir, ¿no?
Tras haber recogido las hojas, Kirishima prácticamente había obligado a Kaminari a entrar en su habitación, y ahora la pila de documentos descansaba sobre el escritorio de Eijirō, mientras los chicos estaban sentados en la cama. Kirishima miraba a Denki con la decepción pintada en el rostro, y por eso precisamente era que el rubio no se atrevía a mirarlo.
—No —murmuró Kaminari, suspirando—. Aizawa me ha obligado a pasar toda la tarde haciendo su trabajo. Tengo que daros un papelajo de ésos a cada uno de vosotros y lo tenemos que rellenar todos. Midoriya ya tiene el suyo, me quiso ayudar antes, pero Aizawa le dijo que ni se le ocurriera y luego se rió en mi cara.
El chico ahogó un gemido.
—Si es que no sé para qué me he levantado hoy...
Eijirō suspiró. Rodeó los hombros de su pareja con un brazo y le abrazó con el otro por el pecho, sonriendo sin dejarse llevar por el ambiente depresivo.
—Bueno, a ver, es algo que no has podido evitar, Den —le dijo, con su suave voz alegre y comprensiva. Kaminari le miró y, al verle sonriendo, de nuevo tuvo ganas de ponerse a llorar. No merecía tener un novio tan... tan Kirishima. No se le ocurría ningún calificativo para definirlo—. Vamos a hacer una cosa, voy a rellenar mi papel, rellena tú el tuyo y después te acompaño a por los demás, ¿vale? Me da igual lo que diga el profesor, no te voy a dejar solo amargándote la tarde.
Kaminari le echó los brazos al cuello y le abrazó con todas sus fuerzas sin poder contenerse. Ahí sí notó que se le escapaban un par de lágrimas. Eijirō le había desarmado por dentro.
—G-gracias, Eiji, eres el mejor del mundo. ¡T-te quiero mu-
Kirishima no le dejó terminar, porque acercó sus labios a los de Denki y se dieron un corto beso. Fue apenas un suave roce, pero más que suficiente para hacer que ambos se pusieran rojos hasta la raíz del pelo.
Denki tenía otras ideas más emocionantes para su primer beso con Eijirō, por ejemplo en la hamburguesería, con el aliento de ambos oliendo a la carne recién hecha y el regusto ácido de la Coca-Cola. Pero aquello no estaba tan mal. El drama ya lo había puesto él. Y tras recibir el beso, se sintió mucho mejor y menos culpable por arruinarle la tarde a Kirishima.
—No lo menciones —le dijo Kirishima—. Bien, ahora vamos a ver de qué van estos cuestionarios...
El pelirrojo se levantó y fue hasta su escritorio, cogió una de las hojas de papel y le dio la vuelta para leerla. Kaminari se dio cuenta demasiado tarde.
—¡Espera, espera, que tengo que ser yo quien...! —exclamó. Pero Kirishima ya lo había leído. Dejó la hoja en la mesa y pareció como si le explotara la cabeza de lo rojo que se puso.
—Denki... —murmuró el chico, con voz temblorosa—. ¿Me estás diciendo que tengo que poner en ese papel si me masturbo o no?
—¡Son datos médicos! —exclamó el rubio, con una voz mucho más aguda de lo habitual—. S-supongo que Recovery Girl necesita esos datos para saber nuestro estado actual de... bueno, de eso, y a lo mejor alguno de nosotros tiene algo ahí o yo qué sé...
—Ya, pero... es que así de repente... —Kirishima carraspeó intentando disimular—. Es un tema muy íntimo y tenerte delante haciéndome preguntas sobre eso, pues...
Denki sabía que no debía haberse levantado de la cama aquella mañana.
—B-bueno, con respecto a eso... creo que tú eres el único con el que me podría sentir cómodo —confesó el chico, con los ojos clavados en su regazo—. Pero con los demás va a ser un corte terrible y no sé si voy a poder. Pero es o eso, o que Aizawa me baje dos puntos la nota. Y si acabo suspendiendo el examen de matemáticas, Bakugō me va a colgar del techo.
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Cuestionarios "médicos" [Boku no Hero Academia] [KiriKami/BakuMono]
HumorLes presento esta pequeña historia en la que se cuenta la aventura, o mejor dicho la desventura de Denki Kaminari cuando el profesor Aizawa le encarga la tarea forzosa de realizar un cuestionario médico entre sus compañeros masculinos de clase y ent...