Así te conocí

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Desde el accidente, entendí que la vida inicia y termina demasiado rápido. Entendí que nada es para siempre y que no se puede parar el tiempo. Los días pasan y nosotros con ellos. El destino de todos nosotros está escrito, y tarde o temprano todos desaparecemos y no dejaremos nada más que recuerdos en la memoria de otra persona.

Entonces, para qué vivir preocupados?, para que preocuparnos de la opinión de las demás personas sobre nosotros?...Total, sufriremos por una cosa o por otra. Podría decir que amemos a todos sin importar nada,pero...

1. No soy ese tipo de persona que ama a todos sin importar nada, ya no.

2. Ya he perdido a bastantes personas por haber amado tanto.

3. De esta manera sufriría más, sufrir es algo básico en esta vida.

Así que decidí no ser demasiado amigable con personas que no formen parte de mi círculo de amigos.

Después de quedarme medio dormida pensando en la vida y su gran sentido, vuelvo a la realidad con un mensaje de mi querido compañero de clase diciéndome los deberes, le doy las gracias aunque no me caiga muy bien, le tolero, como a la mayoría. Me pongo mi gorra, mis botas, y salgo de casa donde un amigo me está esperando para ir a entrenamiento.

Me mira de arriba a abajo como siempre y me mira vacilón.

-Chica, tu siempre con esa cara de mala hostia, no sabes sonreír, o que?-me dice Kail riendo.

-JAJA, muy gracioso como siempre. Y los demás? Normalmente vienen contigo.

-Se han quejado de que hace frío, así que me adelantaron y fueron directamente al gimnasio-me responde con una ligera sonrisa. Sí, por fin llegó el frío, si el tiempo sigue así, dentro de poco nevará y podré ir a la pista de snowboard. Me subo a la moto de Kail y nos vamos.

Diez minutos después llegamos al gimnasio de su tío helados. Los otros ya están calentando, aunque Klaus ya está con la lengua fuera; es el más vago del grupo.

Estoy poniéndome los guantes de boxeo ,cuando alguien entra por la puerta, un chaval que no parece muy buena influencia, pelo negro alborotado, una manga corta negra pegada que marca todos sus músculos detallosamente, aparto la mirada en el segundo que él posa sus ojos en mí.

KEITH

Entro al gimnasio y lo primero que veo es a una chica que parece unos años más joven que yo poniéndose dificultosamente unos guantes de boxeo, se da cuenta de mi presencia y me mira, yo aparto la vista unos segundos, cuando vuelvo a mirarla la pillo mirándome, ella aparta la vista, por lo poco que he podido ver antes de que quitara su mirada de mi, es la típica chica que, sin conocer ni saber nada de ella, sabes de antemano que te traerá problemas. Es bastante guapa, aunque, conforme pasa el entrenamiento, veo que tiene bastante mala hostia, y pega con ira, mucha ira, no intento acercarme a ella, es mejor, para todos.

Pasan las dos horas de entrenamiento, y veo que todos se marchan, menos ella, que aún se está quitando los guantes, por lo que veo, no puede ella sola.

-Vamos Dan, recuerda que aún tengo que llevarte a casa antes de que empieze a llover o nevar-le dice un chaval a la chica.

-Joder Kail, espérate a que me quite estos malditos guantes -le dice Dan a...Kail casi gritando. Yo solo me río un poco y me acerco a ella para ayudarla.

-Necesitas ayuda?-le pregunto mientras me pongo en frente de ella- ésta alza una ceja, espera unos segundos y asiente con la cabeza y murmulla un sí, me agacho a su altura, ya que ella está sentada, y le ayudo,me fijo detallosamente en su cara,tiene pecas y los ojos prácticamente grises, con manchasque parecen la luna, ella se da cuenta de que la estoy mirando, y aparta la vista, se levanta de golpe, quedando a escasoa centímetros de mí, y yo auntomáticamente retrocedo.

-Gracias- dice con voz firme y mirándome fijamente.

-De nada, por cierto, bonitos ojos, Dan- le digo sonriendo.

-Gracias, y...mi nombre es Daniela-me espeta, y acto seguido se va, dejándome solo en el gimnasio.

DAN

Bonitos ojos dice, quien es ese chaval? nunca lo ahbía visto por aquí.

-Dan, que ha pasado antes con ese chaval? estabais muy cerca- me pregunta Kail, sacándome de mis pensamientos.

-No se quién es, ni qué hace en nuestro gimnasio, y lo de estar cerca...él no se apartaba, así que me levanté para intimidarlo.

-Pues...no lo hiciste muy bien, porque, al verlo, él se quedó maravillado de tenerte tan cerca-me dice Kail con una sonrisilla que me suele sacar de quicio, como reacción mía, le doy una colleja, y mientras se queja y yo me rñio, nos subimos a su moto para irnos a mi casa.

Cuando entro a casa, en la cocina me encuentro a Jay, mi primo y a su padre cocinando.

-Uy, que bien huele-digo sonriendo.

-Por fin has llegado, dúchate anda, y luego baja a cenar que la cena casi está lista- me dice mi tito, dándome un beso en la cara.

Vivo con mi tío y mi primo desde el accidente, no contaré nada ahora, más adelante sabréis que pasó en realidad para que una chica de carácter fuerte pero amorosa como yo, cambiara a ser como soy.

Tiro mi bolso dode están mis guantes y me tiro a la cama donde mi gata me espera. Después de ducharme rápidamente, me hago un moño y bajo a comer.

Después de comer, subo a mi habitación a hacer los deberes que me faltan ,poco a poco, siento como me quedo dormida...

Lovely ProblematicWhere stories live. Discover now