Drop Out (A.I)

Epílogo

Un año después.

ASHTON POV.
-Acepto-murmuro esta palabra en el altar frente a quién parecería ser mi chica ideal, pero que en realidad, es más de lo que podría pedir, y es que, sí, quiero a Claire y por eso decidí casarme hoy con ella. De todas formas, esto es lo más conveniente para ambos. Después de habernos mudado a Sydney hace un año, empezamos a planificar nuestra boda.
Las personas aplaudían eufóricamente cuando nuestros labios se tocan, Claire parece extasiada, al fin haber cumplido su demanda de tenerme solo para ella. Ambos somos bastante egoístas, ella siempre fue celosa y hasta controladora, pero de todas maneras eso no quita que sea muy importante para mí. 
Después de la fiesta, y cuando la boda llega a su cierre, ambos subimos a la limusina que nos conduciría a nuestra luna de miel, que fue gentilmente pagada por su opulento padre.
Hace un año, fui un idiota al meterme con una de mis alumnas y hacerle creer que me importaba cuando sólo quería saciar mis necesidades debido a la atractiva apariencia de la misma, me imagino la expresión que debió marcarse en su rostro el día que llegó a mi apartamento y lo encontrara completamente vacío. Fue una decisión que no me costó mucho tomar, ya que lo hice para estar con Claire, la única mujer para mí. Si mal lo recuerdo, su nombre es... ¿Danielle? y tenía dieciocho, diez años menor que yo; algo lo cual la gente vería bastante inmoral, pero eso nunca me importó.
-Amor, ¿en qué estás pensando?-me saca de mis pensamientos la radiante mujer que tengo en frente.
-No es nada-aseguro para depositar un beso en sus labios-, sólo estoy muy feliz de que por fin estemos solos tú y yo.
-Yo también, no puedo imaginarme el porqué de mis celos irracionales hacia tus alumnas, siempre fui muy sobreprotectora, pero ahora estoy tan feliz y tan segura de mis sentimientos-parece inspirada por el momento, suena bastante honesta.
-Ese es el motivo por el cual me transferí-suspiro-, quizás así estés más tranquila. Además, no hace mal un cambio de aires a nadie, ¿cierto? Volver a Sydney después de un año de vivir en el Reino Unido, en dónde nunca me sentí como en casa.
Actualmente no me arrepiento de mis acciones, ya que me sirvieron para darme cuenta de lo que significa Claire para mí, me transferí porque me daba pavor que descubriera sobre mi insignificante aventura, por eso ordené mis prioridades y me vine junto con ella a mi país natal, dónde pensé que sería un buen lugar para empezar de nuevo.

DIANE POV
Abro mis ojos despacio para encontrarme con un rostro familiar frente al mío. Luke descansa pacíficamente mientras que su mano sostiene vagamente mi cintura; aún permanece dormido, apacible. Se supone que su rostro debería transimitirme algo parecido al amor, ya que después de todo hemos sido novios por casi un año ya; pero lo único que siento es un profundo afecto que es más similar a la amistad.
Recapitulando todo este año, desde que por fin me decidí a dejar el instituto para siempre, y que Luke obtuviera una beca en una prestigiosa universidad en todo el Reino Unido, tomé un trabajo como asistente en un local a las afueras de la universidad. Vivo en el campus con él, en un pequeño cuarto que apenas suple nuestras necesidades básicas, hemos aprendido a subsistir con mi salario y la beca que es proveída cada fin de mes. No me quejo, prefiero estar con él que con mi madre, ya que aquí al menos me siento querida y aceptada.
Debo admitirlo, a veces extraño mi vida descontrolada junto a Michael. Hace ya seis meses que no sé nada de él. Lo último que me dijo fue que había decidido vivir su vida como le gustaría, y dejar su departamento e irse en su motocicleta, a cualquier lado. Michael era un buen amigo, quizás hasta un poco más que eso, pero respeté su decisión y lo dejé marcharse si eso es lo que realmente quería.
-¿No puedes dormir? -me preguntó Luke sacándome de mis pensamientos, lo vuelvo a ver para luego negar con la cabeza. Él besa mi frente y me acerca más a su cuerpo, desliza una mano por mi espalda para que mi cuerpo se tranquilice, coloca su barbilla en mi cabeza descansandola. En un momento escucho como comienza a cantar una canción suave que su nombre no conozco para que Morfeo me tome entre sus brazos.