CAPITULO 10- El hotel "Velika"

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Los padres de Alex y Jerry durmieron en el hotel en el que se quedo Lizette

-Buenos dias -dijo Lizette mientras estaba acostada en la cama semidesnuda y José a su lado-.

-¿Quien eres? -dijo José asustado y se paro de la cama a observar la situación, aparentemente se le olvido el nombre de su esposa-.

-¿Comó qué quién soy? -dijo Lizette confundida-.

-Si, no te conozco, ¿esto es un hotel?, ¿usamos condón?

-dijo José alterado mientras voltea a ver a Lizette-.

-Ammm... José soy yo Lizette, tranquilo

-dijo Lizette mientras se sentaba en la cama-.

-¿Lizette? ¿Te llamas como mi novia?, solo que tú tienes como 40 años y mi novia tiene 30 años -dijo José-.

-Eres mi esposo y yo soy Lizette -dijo Lizette sin saber controlar la situación-.

-¿Mi esposa? ¿Tengo esposa? -dijo Jose alterado-.

-Okay, creo que ya sé que pasa, tu memoria no esta actualizada con lo que ha sucedido los últimos 18 años -dijo Lizette-.

-Ósea eres Lizette del futuro ¿y yo estoy en mi cuerpo del futuro?

-dijo Jose mientras abría la cortina del hotel y observaba la ciudad de San Diego con su amanecer muy lindo-.

-No, tú me dijiste que tenias problemas con tu memoria, si quieres al rato vamos a un doctor 

-dijo Lizette mientras se acercaba a abrazar a José-.

-¿Por qué estamos en Estados Unidos?

-dijo José mientras veía muchas bandera de Estados Unidos-.

-Pasaron cosas y vine a salvarte -dijo Lizette mientras abrazaba fuerte a José, José se confundió por lo sucedido pero la abrazo de igual manera-.

-¿Qué pasa? ¿porqué el abrazo? -dijo José-.

-Pues te quiero mucho ... te extrañe tanto

-dijo Lizette mientras le deslizaban lagrimas por su rostro-.

-Yo tambien te quiero mucho, pero, ¿cuándo me pare de la cama? -dijo José que aparentemente volvió a recordar lo sucedido-.

-¿Ya te acordaste porqué estamos aqui?

-preguntó Lizette mientras se limpiaba las lagrimas de sus cachetes-.

-Pues robe y me sacaste de la cárcel -dijo Jose-.

-Ah, si, es que hace unos segundos te alteraste mucho y dijiste que no te acordabas de mi, y me asuste -dijo Lizette mientras agarraba la mano de su esposo-.

-¿Enserio me altere?, no importa ¿estas bien? -dijo Jose agarrando la mano de Lizette-.

-Si te alteraste, si estoy bien, lo bueno es que no me golpeaste -dijo Lizette-.

-Jamas te golpearé, ¿que haremos hoy?

-dijo Jose mientras caminaban a la cama y se sentaban en ella-.

-Pues hay que ir al doctor porque un cambio de esos con los niños si los asustara y hay que conocer mas aqui San Diego -dijo Lizette entusiasmada-.

-Si, esta bien, ahora bésame -dijo Jose mientras se acercaba al rostro de Lizette-.

-Ay, claro -dijo Lizette mientras se besaban con pasión-.

En la casa Alex estaba solo acostado en su cama muy pensativo

Algo como fuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora