IV

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—Ahora no hyung, papá está en el trabajo y tengo que cuidar a mi hermana.

—Es ur-gen-te —mira hacia todos lados esperando no ser visto, y susurra—. Creo que sé qué son esos sueños.

Jungkook se muerde el labio indeciso, volteando para cerciorarse que su hermanita estaba demasiado ocupada viendo dibujos animados como para notar que él no estaba. Cierra la puerta tras de sí luego de hacerle una seña a Taehyung para que entrara, el joven mago ve la televisión encendida y escucha algunas risas que le hacen sonreír enternecido, de alguna forma le recuerda cuando prefería hacer eso en vez de practicar por trucos inútiles.

—Mi cuarto está cerca de la sala por si ella necesita algo, así que dejaré la puerta abierta —toma asiento en su cama y Kim hace lo mismo en la silla del escritorio, tratando fuertemente de no mostrar lo curioso que estaba por ver cada detalle del cuarto tan poco decorado—. No tengo nada de beber, lo siento. Estaba por ir a comprar algo, si quieres podemos ir con-

—No hace falta —muestra sus manos para calmarlo, tiene tantas ganas de hablar que posponerlo por algo para beber lo iba a torturar—. Sólo... sólo te necesito a ti para esto, podemos ir por algo luego.

Las mejillas de Jungkook enrojecen, Taehyung se permite pensar que eso había sido ciertamente adorable.

—B-bueno entonces, ¿de qué se trata? —Se frota el brazo con inquietud—. ¿Sabes a quién pertenece esa sombra?

—N-no exactamente —se desalienta al ver el brillo de esperanza irse de los ojos ajenos—, lo lamento... sólo puedo decirte que sé qué es lo que tienes... pero no tengo todas las respuestas—El menor asiente repetidas veces y abraza sus rodillas para estar completamente sentado en el colchón, Taehyung toma ello como invitación a seguir hablando—. El día que me conociste... dijiste que me oíste decir tu nombre.

—L-lo hiciste.

—No... no lo hice, al menos no en voz alta —Kook le mira sin entender—. Yo no sabía quién eras y aún así... también dijiste mi nombre antes de irte —la garganta se le seca, estaba poniéndose nervioso sin saber como abordar el tema importante—. Yo... yo te hice algo, justo antes de que saltaras.

El azabache se talla los ojos pensando que aún seguía dormido, Tae reprime una sonrisa por verle actuar tan vulnerable, aunque en su mejilla aún duela el golpe de las piedras que lanzó a su ventana.

— ¿Qué pasó ese día hyung?

—Jungkook... —toma aire y se tropieza con sus propias palabras—. Tienes un hechizo y es por mi culpa lo lamento muchísimo yo no quería-

— ¿Qué? ¿Qué qué espera... qué? — Agita las manos pidiéndole que se detenga—. ¿Me hiciste algo con magia... real?

— ... ¿Si? —se cubre el rostro avergonzado, Jungkook tiene los ojos abiertos a más no poder—. ¡No fue mi intención! S-seguramente me odies y lo entiendo, ¿de acuerdo? No nos conocemos casi nada e imagino que no querrás volver a verm-

El abrazo que lo aprieta con fuerza le hace ahogarse por no haber respirado antes de que le hicieran tal presión en los pulmones, Taehyung parpadea desconcertado y su temperatura aumenta cuando el aroma a bosque vuelve a sus fosas nasales.

Las chispas habían vuelto... también en su vientre, en todos lados pero más intensas en ese lugar.

—Sabía que habías sido tú... no sé como pero, pero lo sabía —Jungkook ríe atontado mientras habla al aire, cómodo con la cercanía y las mejillas rosadas por algo de vergüenza—. No lo imaginé... tú me ayudaste, tú me salvaste.

Kim se encuentra en la duda de su rodear su cintura o permanecer en silencio, la opción de romper el contacto no quiere ni contemplarla. Le gustaba estar de ese modo... le gustaban las cosquillas en sus dedos y el deseo de quedarse así por siempre con su mente llena por el chico que no veía hacía años.

Magical Begin || kth×jjkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora