La llamada

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Salí del cuarto y me dirigía a la puerta donde escuche una voz familiar que me buscaba, fui bajando las escaleras lentamente y llegar a lado de Laura.

- ¿Que haces aquí Carrie? - Me acerque a Laura mirando fijamente a Carrie con cara de pocos amigos.

- Vine a ver como seguías - Intento acercarse a mí pero Laura me abrazo de la cintura y me atrajo a ella cosa que Carrie no paso desapercibido - Me entere del accidente y me preocupe mucho por tí.

- Como verás MI ESPOSA esta bien, además estoy yo para cuidarla - Contento Laura quien tenía una seriedad en su rostro que muy pocas veces se la había visto.

- Taylor - Ignoro el comentario de Laura - Taylor sabes que me importas mucho y sabes lo que siento por tí, cuentas conmigo para lo que ocupes.

- Te lo agradezco Carrie pero ahora tengo quien pueda velar por mí y cuidarme - Seguía aun cerca de Laura donde tenía su mano muy posesiva en mi cintura - Y por favor Carrie no vuelvas a repetir sobre tus sentimientos hacia mí, yo ya soy una mujer casada y amo a mi esposa - Me le quede viendo.

- Taylor sabes lo que pienso sobre tu matrimonio - Me dijo Carrie quien tenía cara de dolida - Lo que siento por ti nadie me lo va a quitar, seguiremos viéndonos Taylor - Se dio la media vuelta y avanzado hacia la puerta - Te guste o no Laura, tu esposa y yo tuvimos una historia - Cerro la puerta y se fue.

Voltee a ver a Laura quien tenía un semblante entre enojada y seria no dejaba de ver la puerta pero tampoco dejaba de tenerme agarrarme, yo levante mi mano derecha y pase mis dedos sobre su mejilla.

- Por favor deja de pensar en lo que dijo Carrie, jamas tuve una historia con ella - Me voltee y le agarre su cabeza con mis manos y le hice que me viera a los ojos - Te amo mi posesiva y celosa Sra. Prepon de Schilling - Le sonreí y me acerque a darle un pequeño beso en los labios, me separe un poco de ella y me regalo una sonrisa.

- Yo también te amo Sra. Schilling de Prepon - Me beso de bueno - Deja voy a preparar el desayuno - me agarro de la mano y nos dirigimos a la cocina, me dejo en la barra donde me senté para observar como se desenvolvía en el momento de realizar la comida.

El desayuno estuvo tranquilo no dejábamos de vernos y sonreírnos parecíamos adolescentes enamoradas y embobadas una a la otra, después de desayunar Laura recogió todo yo me fui a la sala a descansar un momento.

- Deberías de estar en reposo acostada - Se sentó a mi lado Laura - ¿Cuando iremos con tu doctor para que te revise más a detalle?

- Si me acuesto me desespero, yo creo que más al rato hablo para sacar una cita y que me diga cuanto tiempo estaré así - Voltee a verla con una sonrisa.

- Muy bien entonces deja voy rápido al restaurante amor para llevarte con el doctor - Se levanto del sillón y me dio la mano - Por mientras ven conmigo mientras me baño tu te vas a acostar y te quedaras quieta mientras regreso - Agarre su mano y le robe un pequeño beso en los labios.

Fuimos directo a mi cuarto, las cortinas seguían abajo, Laura me llevo directo a la cama y me acostó me dio un beso en la frente y se dirigió al baño.

- ¿Puedo bañarme contigo? - Le grite desde la cama.

- No, estas lastimada y debes de reposar para no lastimarte más - Se asomo desde la puerta mientras escuchaba el ruido de la regadera.

- Eso no dijiste ayer cuando hicimos el amor tanto en la tina como en esta cama - Le sonreí maliciosamente.

- Esta muy sensible en ese momento - Se asomo Laura con una toalla enredada en su cuerpo y tenía una mirada seria por mi comentario.

Contrato de AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora