Unidas

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Llegamos a la casa de mis padres, mi madre había hecho una pequeña cena en familia y los niños, mientras nos bajábamos de mi camioneta vimos como los pequeños mostritos corrían rumbo al jardín muy felices, luego iban entrado mi madre con mi padre, Sam con la hermana de Laura junto con la mamá de Laura y por último Tasha con Yael. Mientras íbamos avanzando rumbo al jardín Laura no dudo ni un según en agarrar mi mano, al llegar mi nana me recibió con un abrazo y un beso en la mejilla y después saludo de la misma manera a Laura, seguimos avanzando y llegamos al Jardín, mi hermano noto que Laura y yo estábamos agarradas de la mano y me guiño el ojo y una pequeña sonrisa.

- Tay, ven a jugar con nosotros – Vino corriendo Tim agarrándome la otra mano que tenía suelta y jalándome.

- Anda ve con los pequeñitos, aquí estaré esperándote – Me dijo Laura con una sonrisa y soltando mi mano.

- Ven aquí – Le dije abrazando a Tim y dándole un beso en la mejilla, me di la vuelta y le guiñe el ojo a Laura quien me correspondió con una sonrisa y vi que se iba con su hermana.

- A ver pequeños monstruos que vamos a jugar – llegando con ellos y dejando al pequeño Tim en el piso.

- Juguemos futbol – Dijo Josh - ¡Siiiiiii....! – Contestaron todos al mismo tiempo.

- Esta bien, está bien juguemos futbol – Les dije mientras iba por el balón.

Empezamos a jugar todos futbol, pateábamos el balón por todos lados, corríamos por todos lados, risas, festejos y muchos goles, de vez en cuando volteaba a ver hacia donde estaba toda la familia pero en especial con Laura quien en ocasiones nos veíamos y nos sonreíamos era tan especial sentir lo que me provoca con solo verla y que ella me corresponda. En una de esas el pequeño Tim se barrio y para no pegarle o lastimarle me tumbo todos los niños se empezaron a reír y en eso todos me cayeron encima lo que provoco una pequeña mini lucha contra ellos y haciéndoles cosquillas y sin esperarlo sentí unas manos entre mis costillas.

-Ataquen niños, yo les ayudo – Dijo Laura mientras me hacia cosquillas y los pequeños se iban contra mí.

- ¡Basta.... Jajajajajajaja.... Por favor..... Jajajaja piedad..... Jajajaja... ya no puedo.... Más.... Jajajaja! – Les suplicaba mientras me acostaba en el piso muerta de risa y poco a poco los niños fueron parando y Laura estaba a un lado mío con una gran sonrisa.

- ¡A ella! – Les hice seña a los niños de atacar a Laura quien se dejo caer en el suelo y yo la empece a atacar por las costillas y de vez en cuando por las axilas, Laura se revolcaba en el suelo risa y risa y los niños también me ayudaban a hacerle cosquillas.

- ¡Jajajajaja.... Me.... Jajajaja rindo.... Por jajajajaa.... Favor... Jajajaja! – Decía Laura entre risa y risa yo deje de hacerle cosquillas y estaba sentada a su lado y me le quede viendo, mientras que ella se recuperaba volteo a verme y me sonrió, de repente los niños me abrazaron rompiendo nuestro contacto visual y correspondiendo su abrazo.

- Te queremos mucho Tay – Me dijeron los pequeños al mismo tiempo.

- Y yo los quiero mucho a ustedes – Les dije mientras nos dejábamos de abrazar.

- Tay, tú nunca nos abandones, por favor, no nos dejes solos... - Me dijo Tim y todos asintiendo al mismo tiempo.

- Escúchenme todos, jamás los voy a dejar solos, pase lo que pase siempre voy a estar con ustedes – Les dije viéndolos a los ojos a todos – Lo prometo siempre estaré con ustedes ahora todos vengan y regálenme un pequeño beso y luego se van a lavar las manos para que cenen – Todos los niños vinieron con una gran sonrisa y dándome un beso y después se despedían de Laura con su manita.

Contrato de AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora