Conquístame

'Los alrededores'

Capítulo Octavo:

El insistente pítido del teléfono celular resonaba en el oído de Louis Tomlinson. Eso lo había dejado mal... ¿Que le sucederá a Kath si no hace algo pronto? Entró hecho una fiera a la comisaría. La gente de allí lo miraba raro, pero a él no le importaba, solo le importaba el bienestar de Kath.

-¿Joven, podemos ayudarlo en algo? -Exclamó uno de los polícias intentando calmar a Louis. No logró mucho, pero cuando Louis tragó el agua que este le había servido anteriormente, logró calmarse un poco.

-Veran, tienen a mi... amiga. Un hombre la tiene secuestrada en algún lugar de por aquí. Ayúdeme señor, por favor. -Vociferó Louis con tono suplicante. Había dudado un momento ¿Acaso eran solo amigos? Hacer el amor no es algo que 'Solo amigos' harían. Pero Louis intentó despojar todo sentimiento hacía Kath por un momento. Lo primero, sería rescatarla.

-Narra Kath-

Había pasado mi primer día en ese agujero. La noche anterior me la había pasado intentando descifrar alguna manera para escapar. Jonathan estaba loco, y tenía que ser lo más silenciosa posible; sin embargo no pude evitar que una botella de -vaya uno a saber que- se callera, provocando un ruido horrendo.

El hombre había corrido a toda prisa para ver que había sucedido, y al encontrarme en el piso, con todas las rodillas raspadas, y las manos llenas de tierra, no fue algo que haya puesto a Jonathan de buen humor.

Me había atado nuevamente a la silla, y tras súplicas y súplicas, había vuelto a violarme. Para ese entonces, me preocupé de poder quedar embarazada. Aunque sinceramente, ahora era lo que menos me importaba. No estaba... en esos días, y lo mejor por ahora sería hacer la de buena.

A la mañana siguiente me había despertado atada a la silla. Tenía mi cabello rubio, ahora negro de suciedad y todo lleno de alguna sustancia pegajosa. Las manos, las tenía doloridas y llenas de tierra. Mis uñas rotas, y mi cara, estaba demacrada. El maquillaje estaba todo corrido, y mis ojos hinchados de tanto llorar.

Jonathan me había levantado para "Tomar el desayuno", claro que yo solo quería largarme de allí. El famoso desayuno solo había resultado ser una rodaja de pan, con algo de leche. Moriría de hambre si seguía así; a mi me encantaba comer, no era la clásica plástica.

Es decir, puede que en algún momento haya sido una verdadera plástica, pero Louis había logrado cambiarme. Se que suena extraño, pero por él había cambiado muchas cosas de mi vida. Al principio solo quería que fuera una conquista más, pero si lo vemos con perspectiva, él fue el único en conquistarme.

Jonathan me levantó de la silla, y me dio la vuelta. Comenzó a examinarme de pies a cabeza y luego hizo un sonido como de desaprobación. Estabamos llendo para una de las habitaciones cuando...