CAPÍTULO 13

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Cap. 13

Matt condujo de regreso a Norristown en compañía de Alistair y Shadona, quien aprovechó el tiempo del viaje para llamar a su hermana y darle un claro informe de lo ocurrido.

Lo primero que hicieron al llegar, fue ir por el auto de Alistair y luego en los dos vehículos, fueron al hotel donde este tenía su habitación; al llegar Matt queriendo darles un poco de tiempo para estar solos les dijo

-iré a arreglar el papeleo por lo ocurrido en esa casucha; les veré en un par de horas para comer y después vemos a ver que es lo que vas a querer que hagamos

- solo podemos ir por la última parte del asunto, cuando ya sea de noche; tómate tu tiempo – Matt sonrió suspicaz y se marchó para que Alistair pudiera asearse

La pareja subió en busca de la habitación de Alistair y una vez allí, después de besarla por enésima vez, él se separó un poco de ella y le dijo

-me daré un baño cariño ¿quieres tomarlo conmigo? – no tenía intención de seducirla en la ducha, solo sabía que ella estaba agotada también

- me encantaría; estoy sucia y cansada, pero no tengo que ponerme, dejé la bolsa en el auto de Matt

- yo soluciono eso – fue al teléfono y pidió al hotel que le consiguieran algunas prendas femeninas de buena marca; informó de la talla y que tipo de prendas les debían llevar y cortó – listo cielo, podemos meternos a la ducha; cuando salgamos tendrás que ponerte

Ya no dijeron más y fueron por el baño; Alistair ayudó a Shadona a desnudarse y luego se desnudó lo más rápido que pudo; era evidente que después de lo pasado, su deseo por ella había ido en aumento y ahora le estaba costando demasiado controlar sus apetitos.

Shadona vio que su amado prometido no tenía intenciones de tocarla en ese momento, bueno, no de la manera que ella deseaba; entonces decidió que bien y ella podría enviarle el mensaje correcto.

-¿me frotarías la espalda Al? Estoy muy cansada ¿lo harás? – Alistair se dispuso a hacer lo que ella le pedía y se puso a su espalda para frotársela

- ¿así cielo? – ya la voz de él no era muy clara

- mmm, es probable que si en lugar de la esponja usaras tus manos sería mucho mejor

Él ya no intentó contenerse más, le dio la vuelta y se apoderó de su boca con locura mientras sus manos continuaban en su cuerpo, lo que antes había empezado como una inocente frotada de espalda.

Pero luego pensó en que ella aún no estaba preparada para algo demasiado rudo, puso a llenar la tina y mientras esperaba, continuó besándola y enardeciéndola; finalmente cuando la tina estuvo lista, se metió en ella y la ayudó a entrar; ya los dos estaban demasiado excitados, Alistair la guio a que se pusiera a horcajadas sobre él y la ayudó a descender sobre su erección, hasta que ella estuvo totalmente llena de él; y mientras la guiaba en movimientos lentos y acompasados, atendía sus pechos con fervor y acariciaba su espalda.

Ella se aferraba a sus hombros totalmente absorbida por la pasión y sus gemidos eran estímulos al oído de Alistair; y poco después ella sintió que se fragmentaba y Alistair absorbió su grito besándola hambriento, siguiéndola de inmediato en un candente clímax.

Los minutos pasaban y ellos aún no se separaban, se besaban con ternura y se acariciaban mutuamente; no sentían ningún afán y tampoco deseos de dejar de prodigarse mimos.

Cuando finalmente lo hicieron; Alistair los terminó de lavar a ambos y luego de envolverse en una bata, la llevó en brazos hasta la habitación y la depositó en la cama acostándose a su lado, con intención de seguirse deleitando en la pasión.

Cuando te vieron mis ojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora