El muchacho aún sostenía con fuerza el bate de béisbol de frío metal ensangrentado entre sus manos, lo mantenía alto, el cuerpo de su madre yacía allí tirado y aún escuchaba a su hermana al otro lado de la puerta.
ー¡Camile! ーtocó la puerta tres veces- Abreme, escuchame bien, cierra los ojos y abre la puerta. No los abras hasta que escuches que he cerrado, ¿entiendes?
ー¿Ale...Alexandre? ¡¿Eres tu?!... Y... ¿y mamá? ¿Ya se fue?... ーPreguntó la niña con dudas a medida que se acercaba a la puerta, sus manos temblaban de forma leve aun nerviosa por lo ocurrido.
ーSi, soy yo, mamá está... ーEl chico echó un vistazo al demacrado cuerpo, deslizó su pie hasta esta y la corrió a un lado. Sufria pero ha decidido no demostrarlo, había aprendido a hacerlo desde los 15 años. ー Mamá está dormida. ¿Vas a abrir?. Recuerda lo que te dije, quiero que cierres los ojos, no hagas trampas. ーDijo al colocar el bate a un lado de la puerta.
La pequeña asintió de forma lenta y cerró los ojos con fuerza, de esa forma llevó sus manos al pomo de la puerta y quitó el seguro. A medida que la puerta se habría, ella retrocedió de forma lenta confiando y dandole paso a su hermano ーViniste.... ¡sabía que ibas a venir!
A pesar de lo optimista en la voz de la dulce niña, el tiempo iba corriendo, con cada minuto que pasaba la situación podia empeorar y Alexandre lo sabía.
Alexandre se apresuró en entrar, cerrar detrás de si y poner el seguro ー Ya puedes abrir los ojos. ー Puso su mano en el hombro de la niña y la sacudió con suavidad indicándole que puedia abrir los ojosー Prepara tu mochila, pon cosas que necesites, vamos a irnos tú y yo. ¿Okay?
Cuando Camile abrió los ojos estos se iluminaron, estaba contenta de verle ya que hacia ya unos meses desde la ultima vez. Al escucharle su rostro cambió del alivio a la confusion ー¿Irnos? ¿A donde vamos? No podemos dejar a mamá... ー muy a pesar de sus réplicas, había obedecido y ahora tenia entre manos una mochila a medio llenar, esta contenía dos cambios de ropa, un cepillo y una linterna.
El mayor mantuvo la mirada puesta en la ventana, su mente estaba ocupada pensando en como saldrían de allí. ー Mamá no se encuentra bien hoy, iremos a mi departamento, mamá vendrá después. ーmintió, planeaba decirle más tarde pero para ello necesitaba estar en un lugar seguro. Solo se le ocurrió su departamento pero este estaba en el distrito comercial, allí habrían amontonamientos de personas, no, deberían ir a otro lugar. Lejos. ー ¿Sabes?, sería bueno ir con la abuela. Mejor vayamos allá ーDijo tras meditarlo un par de segundos.
ーPues vale.... ¿necesito llevar algo más? ーPreguntó con inocencia la menor al señalar su mochila a medió llenar, segundos despues, de su closet sacó una caja llena de polvo y la sacudió un poco, tenia el presentimiento de que debia llevarse el contenido de la caja. Abrió esta sacando del interior, una chaqueta de color verde militar, obviamente del tamaño para un adulto, se la colocó con prisas llegando el borde de esta ligeramente por encima de sus rodillas, era de su padre biologico.
Para Alexander, ver a Camile sacar esa chaquela le provocó un hueco en el estomago, su papá se la ponía cuando iban a pescar o al bosque a cazar, era su favorita. Tragó en seco antes de contestar. ー Así está bien... ー Suspiro, aquello le estaba agotando emocionalmente ーEscucha, afuera está hecho un desastre, así que tienes que volver a cerrar los ojos hasta que bajemos las escaleras, ¿vale?. Mamá se sentiría avergonzada.
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Camile: un viaje para sobrevivir.
General FictionCuando un grupo de mineros ponen sus manos en el lugar equivocado liberan una enfermedad de otro mundo, incapaces de defenderse ante el virus sin color o olor condenan a toda la humanidad a un apocalipsis inminente. Jóvenes, adultos y niños Se ven i...