¿Qué wea culiao? |TERMINADA|

Capítulo 1

Siento cómo se acerca y me susurra al oído.

-¿Te puedo besar?-pregunta con su voz toda ronca y sexy.

Mi clitoris conchetumareeee.

-Violame si queri

Se estaba acercando el wachito rico de Damon Salvatore, hasta que siento el medio golpe en la cabeza.

-¡Despierta cabra culiá!-escucho como mi bella madre me pega el grito al lado de mi oreja.

¡Por la conchetumare!

-¿No me podiai despertar después de comerme al damon rico salvatore?-le digo pesá.

Esta rueda los ojos mirando al cielo, como si dijera "esta cabra culiá ya empezó con sus weas" y baja, no sin antes decirme que me apure.

Gimo enojada.

Por la chucha, ¿Quién mierda inventó el colegio?  Porque me encantaría pegarle unos buenos papes.

Me levanto pajeramente y me pongo la falda y la polera del liceo.

Oh hermano, como que igual me pegué un estirón y la falda culiá me queda cortita.

Bueno, ¿Qué tanta wea?

Que me digan algo conchetumare.

Como que me desperté con la wea.

Que inusual.

Me encrespo las pestañas y me echo rímel. Me peino con los dedos y me pongo perfume.
Como soy bien chora me pongo unas argollas medias grandes y era.

Chora por fuera eso si djdj.

Bajo y veo la hora. Las 7:30.

Shit.

Adiós desayunito. Fuiste hermoso mientras duraste.

Ah se la creyeron.

Me siento en la mesa y como mi hermoso pan tostado con huevo.

Wea ricaaaa.

-Vai a llegar tarde el primer día Cabrita-me reta mi mami.

Me encojo de hombros.

-Si sabi que los primeros días no hacemos ni una wea-le digo pesa. Yo no quería ir, e igual me obligó esta iñora.

¿Pero que recibo?

Un pape.

-La boca Ignacia-dice seria.

Entra mi papá y nos saluda a ambas.

-¿Cierto papá que los primeros días no hacemos nada?-le digo mirando feo a mi maire.

Esta rueda los ojos.

-Si po, ¿Por qué vai?-pregunta encogiéndose de hombros.

Sonrío victoriosa por dentro. Amo a mi papi.

-Porque la humana que tienes como esposa me obliga-le digo.

La nombrada ve a mi papá amenazadoramente.

Este se encoge un poco, por lo que me dan ganas de reír. A todos les da susto esta mujer.

-No hija, tienes que ir. Tu mamá tiene razón.

Ruedo los ojos y después de disfrutar mi desayunito, me levanto, me lavo los dientes, y me marcho.

Camino relajadamente hasta el paradero y me siento esperando la micro. Noto que hay más weones atrasados donde estoy. Me da risa la cara de relajación que tienen, pura paja, igual que yo. Ni ahí en llegar atrasados.